Minnesota

2.5

- ¿Pero se puede saber que está pasando?

-Ahora no, Nobody. ¡Corred, joder! - Awful agarró su brazo con fuerza y le empujó hacia delante, haciendo que casi se caiga- ¡De verdad, necesito que corráis, ahora!

El miedo en sus ojos llamó la suficiente atención del resto como para que tomaran en cuenta la posibilidad de correr. Deep no se lo pensó dos veces, a pesar del cansancio sacó fuerzas de dónde no las había y junto a Andrea, que al principio se mostró algo más reacia, corrió. Kokoro subió de un salto encima de su monopatín e hizo que este avanzara con velocidad.

Nobody y Awful iban a su propio ritmo, mientras el rubio agitaba el brazo para que el otro le soltara, Awful, con una mueca en el rostro, hacía que sus piernas se movieran lo más rápido posible.

- ¡Kokoro, te voy a matar en cuanto nos libremos de esta! –gritó el asiático, mientras respiraba agitadamente- ¿¡Como hiciste que la policía llegara hasta aquí!?

La chica se encogió de hombros sin mirarle. No parecía preocupada ni lo más mínimo, ella solo patinaba mientras reía, como si hubiera vivido esa situación miles de veces y supiera perfectamente cómo manejarla.

-Por favor, solo espero que esto en lo que nos estamos metiendo no sea ilegal. –susurró Andrea, haciendo pausas para respirar cada vez que decía más de dos palabras.

Kokoro pareció oírla, porque se giró rápidamente hacia atrás y aumentó la fuerza de su risa.

- ¡Esto que hacemos no es ilegal! –chilló. - ¡Esto que hacemos es criminal!

Hubo unos segundos de silencio en los que solo se oía el sonido de las pisadas de nada uno.

-Si tenía alguna esperanza puesta en esto, ese chiste la acaba de matar.

Awful miró a Nobody y soltó su brazo. La velocidad a la que corría disminuyó tanto que hizo que el rubio se cayera de bruces contra el suelo.

-Si no tienes esperanzas en esto, no continúes- le dijo, antes de seguir corriendo.

Levantó su cara del duro asfalto y se mordió el labio. Se limpió la sangre que caía desde su rostro y se puso en pie. Avanzó con velocidad y cogió a Andrea del brazo, para tener a alguien en quien apoyarse durante unos momentos. Ésta le miró extrañada de que hiciera un tipo de contacto físico voluntario, pero prefirió no decir nada al respecto.

Awful sacó la pistola y la cargó, dando media vuelta y apuntando directamente hacia un coche policial que avanzaba directamente hacia ellos. Cerró los ojos y sin pensarlo dos veces apretó el gatillo tres veces consecutivas, acertando de lleno en el cristal de neón de la parte delantera.

Lo más probable era que alguna de esas balas hubiera dado a la persona que lo conducía. Abrió un ojo y vio como el coche daba unas vueltas alrededor de sí mismo antes de parar de moverse en seco.

Guardó la pistola y caminó lentamente hacia delante. Ahora sí. Ahora la policía si tenía motivos para perseguirles.

Cerró los ojos y siguió caminando. Notó como los demás también frenaban su paso y lo miraban fijamente.

- ¿Ese era el único que te perseguía, Kokoro? -dijo.

Ella soltó una risa inquieta que de inocente tenía cada vez menos, y se rascó la coronilla.

-Sí. Ese era el único. ¿Por qué esperaste tanto para disparar?

-Aún no estábamos lo suficiente lejos de la ciudad. Y también quería asegurarme de que no venía ninguno más, así que lo hice cuando pude distinguir que era solo una sirena la que sonaba. -dirigió su mirada a los otros tres, que ahí estaban, mirándole fijamente, analizando cada uno de sus actos y seguramente juzgándole.