Capitulo 22

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Me hacias desayuno, me atendias bien, la verdad es que me sorprendias demasiado. Pero debo decir que estaba ansiosa por saber que pasaria el día siguiente, ya que era día de la mujer, te debo aceptar que te di otra oportunidad, definitivamente soy una estupida, así que olvide este otro chico y me centre en ti, estaba ansiosa por saber que me darias del día de la mujer, si tal vez me ibas a sorprender o me dariaa algo y ya, realmente te vi normal, debi saber que si en este tiempo no me habias logrado sorprender, no lo harias ahora.

En la noche te pedi un favor, tú me ignoraste por completo, aún así te volvi a repetir pero alce la voz, lo cual te coloco furioso, me entre a la habitación, comenzamos a discutir, me agarrastes en medio de esta y me tiraste bruscamente a la cama, me decias... tantas cosas que me dolian pero me hacia la fuerte, la que no me importaba y eso te enfurecio mas, en una ocasion me apretaste tan duro que no podia respirar, te diste cuenta, eso me dolio aún mas, ya que empece a llorar, tenia demasiado miedo... te di una bofetada, pero tu eras mas fuerte que yo, me agarrastes de tal manera que no lograba desprenderme y me pegaste... te odio tanto, enserio no sabes cuanto, quise en ese momento que estuvieraa muerto.

Estaba llorando demasiado y me tapabas la boca para que no escucharan, grite y nadie oyo, sali corriendo y alcance abir la puerta, como pude llegue a encerrarme en el baño... te vi tratando de alcanzarme, pero esta vez fui mas veloz que tú.

Necesitaba dormir y me fui despacio hacia la habitación, la puerta estaba abierta, me fui despacio, cuando de yn momento a otro te aparecistes en la puerta como cuando un león caza a su presa, senti ese miedo recorrer por mi cuerpo, empece a llorar, me tratastes mal y me quede dormida en esa cama, tan cansada, tan debil, me dolia absolutamente todo.

AnhedoniaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora