Ha pasado mucho tiempo desde aquel día que por primera vez cruzamos miradas, jamas paso por mi mente lo que podrías ocasionar dentro de mi, pues lo reconozco, al principio no sentí ni una pizca de interés ni por ti, ni por tu básico sentido del humor. En cambio tu, tan egocéntrico y audaz, te propusiste adueñarte de mi ser y poco a poco conseguiste enamorarme. Quizás todo hubiera salido bien de no ser por tus viles intenciones de jugar conmigo.Creeme cuando te digo que jamas había sentido algo tan intenso y caí tontamente en tu juego, pues claro, era tan joven e inocente que por mucho que mis amigos me advirtieran no podía comprender la magnitud del daño que serías capaz de hacerme. Pero ahí estaba yo encaminada a ti, como un ratón se dirige a una trampa situada específicamente para a el.
Lo intente y espere demasiado de ti, te descubrí infinidades de mentiras que calle por sostener "lo nuestro" y ahí empecé a desconocerme. ¿Quien lo diría? A tan corta edad experimentaba tantas emociones que me era imposible poner en orden mis ideas, y probablemente de eso te aprovechaste.
Pero claro, que no todo fue un infierno. Tu "estúpido" humor se convirtió en el único con la capacidad de hacerme reír, eras tan atento que casi ni recordaba el daño que me hacías con tus mentiras, y cuando me tomabas entre tus brazos para abrazarme con tanta intensidad que hacía que mi risa se ahogara y apenas pudiera convertirse en un "ya amor, me lastimas", ¡que irónico! Nunca pude decirte que esa no era la única manera en que me estabas hiriendo.
Pues claro que siempre lo supe, nunca fuiste lo suficientemente astuto y lamento mucho hacerte entender tiempo después que era yo quien nos mentía día a día, era yo quien te hacía creer que tu plan estaba siendo ejecutado a la perfección y era yo quien todas las noches se hundía en la tristeza de sostener una relación con cimientos de mentiras.
Sin embargo, poco a poco fui madurando, aprendiendo que toda chica merece sentirse única y especial, despertar todos los días con una mágica ilusión. Y eso me llevo a tomar la decisión de alejarme de ti, te admito que me costo y fue complicado sacarte de mi alma y mi piel, pues muchos rostros acaricie y muchos labios bese buscando alguien que se asemejara a ti, pero que equivocada estaba, lo que menos debía hacer era buscarte en otro ser.
Tiempo después finalmente lo logré, ya no te quiero, ya no te extraño, si hoy te escribo es porque todas mis heridas han sanado, y si hoy te pienso es porque espero que el amor hayas encontrado, y te agradezco por todo lo que me llevaste a reflexionar, porque me señalaste perfectamente al tipo de persona de la que no me debo volver a enamorar.

ESTÁS LEYENDO
Hace tanto que no se de ti©
Storie breviHace tanto que no te veo, hace tanto que no te escribo. Hace tanto, amigo mio, que no necesito de ti para sentirme bien.