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Masky estaba tenso, debía admitir que el lugar era imteresante.

Las luces rojas parpadentes alumbraban el clandestino lugar, montones de cuerpos cubiertos en sudor, chocando entre si con sonidos acuosos y las paredes del lugar cubiertas de humedad. El ambiente era sensual y el olor a alcohol y marihuana era muy notorio.

En cuanto llegaron Toby se acerco a una muchacha y desde lejos Masky pudo ver como las manos de su compañero ya estaban perdidas en la blusa de la chica. Hoodie por otra parte comenzo a beber y unas cuantas chicas se acercaron a conversar.

Masky se arrincono contra la pared más lejana a la masa de personas que chocaban unas contra otras; trataba de alejarse de todo y en eso vio a un chica. Cabello corto a la barbilla, anteojos gruesos y un abrigo enorme. Nada llamativo, solo que estaba buscando alejarse de la gente, igual que él, y que no encajaba con nada en el lugar.

Toby besaba el cuello de una chica diferente y al ver como Masky observaba a una chica que parecía fuera de lugar, pensó que quiza se llevarían bien. Dejo un último beso en la mano de la chica y se acerco a Masky.

- No es mi tipo -Inicio Toby haciendo que Masky le mirara- No me gusta su corte de cabello, y creo que ese abrigo no va con la ocasión, pero para coger cualquiera así que deja de mirarla y acercate a hablarle.

Masky le miro mal y volteo a otra parte, asi que Toby llamo la atencion.

- ¡Oye! -La chica volteo y Toby se le acerco- Seguro te ves mas sexy sin todo eso que llevas encima.

La chica se encogio de hombros y le dio la espalda.

- No seas tan fría muñequita -Toby hizo un puchero falso y luego se acerco a susurrarle- la verdad no eres mi tipo, demasiada ropa, pero, a mi amigo le agradas.

La chica se extraño y giro a ver a Toby.

- Ese chico que esta de aburrido recargado en la pared, ¿lo ves?, es castaño y tiene ojos azules.

Ella miró discretamente a donde Masky estaba recargado, e inconcientemente se sonrojo; ¿un chico así la miraba?, ¿de verdad?.

- Podrías hablarle, solo se tu misma, no nos gustan las mismas chicas y como tu no me gustas, seguro le gustaras.

Toby se burlaba, pero la chica ya lo ignoraba. Junto fuerza de voluntad y camino.

Toby se quedo solo y estaba a punto de carcajearse, pues, la chica caminaba temblando y directamente a Masky.

- ¡Este! -ella empezó a hablar y Masky la miro- ¡Hola!.

- Ya y ¿por qué gritas? -Masky le miraba serio-.

Era cierto que ella le llamo la atención, pero no le gustaba como mujer, ella lucía extraña en ese lugar y su voz temblaba mientras la alzaba demasiado.

- Lo siento -ella se relajo y sonrrojada siguio- es que tu amigo dice que te gustaria hablar conmigo.

Masky se golpeo mentalmente y buscando apoyo, giro a ver a Hoodie, pero este estaba ocupado, es decir boracho y con una chica sobre sus piernas. Aun más desesperado Masky miro a Toby y el estaba sin camisa sobre una mesa, haciendo una especie de baile.

- Tal vez no debí acercarme.

Con esas palabras ella iba a despedirse, pero, se detuvo con la voz de Masky.

- La verdad no te ves comoda aquí y yo tampoco lo estoy -se encogio de hombros- vamos a salir.

Las mejillas de la chica se iluminaron y siguío a Masky hasta la salida.

Era de noche y el barrio era peligroso, así que ella se agarro del brazo de Masky.

Él temblo un poco, no le gustaba, pero, si todos se divertían ¿por qué el no?.

Masky agarro a la chica por la cintura, acorralandola y beso bruscamente sus labios.

Ella se retorcío entre los brazos de Masky, estaba asustada y lo empujaba. Masky se alejo un poco y pudo ver los ojos verdes llorosos de la muchacha.

- Lo siento -se iba a ir-.

- Me llamo...- ella iba a peesentarse, de verdad Masky le parecía atractivo y penso que quiza en otras circunstancias las cosas resultarían distintas-.

- No me lo digas -corto él- Ven mañana y yo vendre.

- ¡Si! -dijo ella y corrio a otro lugar-.

Masky se quedo quieto y reflexiono ¿por qué quedo de ver a esa chica?.

Es cierto que Masky es un loco, asesino y que pierde el control si no toma sus medicamentos, pero, tambien entendía lo cruel que es jugar con los sentimientos.

Al final ¿qué mas da?, mañana trataría de divertirse.

Para eso me entrenaron LIBRO #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora