Capitulo 6

23 1 0
                                    

La lluvia habia empezado a caer media hora después de que Lena y Chris terminarón sus bebidas. Ahora estaban atascados en la cafeteria.

La charla entre estos era breve. Chris preguntaba, Lena respondia con un simple sí, no y talvés. Era algo abrumador de vez en cuando.

-Sí en un dado caso se detiene la lluvia...- Chris haloneba su cabello de la nuca de vez en cuando, estaba algo nervioso.
-Compré unas cuantas peliculas en el supermercado.- suspiró.
-Te gustaria acompañarme a mi casa y tener tarde de pelis, si quieres. No te estoy obligando.- terminó este dudando en la respuesta que Lena le daría.

-Lo tendré en cuenta. Por ahora debo ir a cambiarme y nose como salir de aqui sin mojarme.-
Chris asintió e hizó señas con su mano llamando a Billy. Este enseguida se acercó.

-¿Tienes un paraguas?- le preguntó al mesero quien lo observaba dubitativo.

-Claro que sí, enseguida lo traigo.- se retiró dejando solos nuevamente a Chris y Lena.
Lena se removia algo incomoda en su butaca. Billy volvió con dos paraguas en mano. Se los entregó a los susodichos, emitiendo un 'gracias' de parte de los dos. Chris pagó la cuenta ya que era el que habia invitado a la chica que yacia afuera esperandolo con el paraguas cubriendole.

Salió dando inicio su caminata a casa de Lena. Erá un silencio un tanto incomodo pero soportable para Chris. La lluvia no cesaba para su gusto, pareciese como si el mundo estuviera en su contra; este día en el que lo dedicaria a su nueva amiga, Lena.

Llegarón a la casa de Lena subierón las escaleras del porche dejando de lado los paraguas ya que este tenia techo. Intercambiaron sus números de telefonos por si Lena decidia ir a casa de Chris. Se saludaron de mano y la chica entró a su casa dejando atrás de la puerta a un Chris con una sonrisa enorme.

Para su gusto su madre aún no se encontraba en casa. Subió las escaleras y llegar a su habitación. Necesitaba algo de descanso, sí es que podria dormir.

Se adentró a esta encontrandose con la sangre que antes habian derramado sus brazos. Ahora esta estaba seca en el suelo. Le entrarón arcadas de tan solo pensar que ella misma se habia hecho eso. Las lágrimas empezaban a salir pos si solas como si ella hubiese dado permiso. Sabia que no era bueno estar ahí. No queria entrar en pánico ni desatar sus demonios interiores. Salió rápidamente de ahí. Tomó su celular y marcó a Chris, sabía que no podría ir muy lejos.

-¿Hola?-  contestarón del otro lado.

-¿Chris?. Soy yo, Lena.- respondió esta sorbiendose la nariz.

-¿Que sucedió?.Dime ¿que pasó?.- al no obtener respuesta por parte de Lena se preocupó.
-Voy para allá.- cortó la llamada y corrió hasta llegar a la casa de Lena.

Al llegar vio a Lena que observaba un punto fijo al suelo.

-Lena, estoy aqui.- la susodicha levantó el rostro y al ver a Chris se echó a llorar. Era demasiado débil y Chris sabia que debia hacerse cargo de los problemas de Lena para poder estar con ella. Al menos como amigos.

Tomó la mano de Lena y acercarla para poder darle un abrazo, pero esta la alejó rápidamente.

-Lo siento.- dijó.- Sí quieres podemos ir a mi casa por un rato.- sugirió. Lena asintió.

Lena secó su rostro, tomarón sus respectivos paraguas que algún día tenian que regresar a la cafeteria. Se dispusierón a caminar a la casa de Chris. Esto era nuevo para Lena.

Chris maldecía internamente por no haber traido su auto.

Faltaba un kilometro para llegar a su casa y ya estaba realmente agotado, de vez en cuando observaba a Lena quien mantenia la vista en sus zapatos sosteniendo fuertemente su paraguas como si fuesen a arrebatarselo.

Al cabo de unos 10 minutos más estaban llegando a la casa de Chris.

LenaPov.

La idea de ir a casa de una persona que conociste apenas hace dos días es lo suficiente raro para mí, ya que no tengo amigos.
Constantemente fruncía el ceño. Los pies me dolían más sin embargo no lo demostraba.

Tenia miedo. Miedo a que pueda ocurrirme algo malo, más una voz en mi cabeza me decía que Chris erá una buena persona y no tenia malas intenciones. Pero no podía entregarle mi confianza tan rápido. En sí él es agradable y lo admito, muy lindo.

Conforme caminabamos olvidaba todo lo que habia sucedido minutos antes en mi habitación. Y es que regresar ahí me traían malos recuerdos.

Según Chris estabamos por llegar a su casa. Es lo que habia dicho hace 2 minutos aproximadamente.

-Es aquí.- escuché decir de su boca. Voltee ya que el indicaba con su dedo la casa que se encontraba atrás de mí.

Abrí mis ojos completamente al ver la casa. No casa no mejor dicho mansión. Esto era el triple a mi casa y demasiado lujosa.

-¿Estas seguro que es esta tu casa?- pregunté dubitativa.

Una carcajada de parte de Chris se hizó presente.

-Oh vamos. ¿No me crees?- arqueó una ceja. Sacó unas llaves y abrió la puerta dejando ver el interior de la casa. -Vamos entra, o te moriras del frio ahí afuera.-

Entré rápidamente al living, si s e podia llamar así a unos sofá grandes. Piso de mármol y una escaleras que supongo conducian a las habitaciones.

-Bienvenida a mi humilde hogar.- ¿Dijó humilde?. Este tipo tenía descaro de decir humilde a esta mansión. Fruncí el ceño. -Digo así ya que no me gusta que me vean como el niño riquillo de mami y papi.- rodó los ojos.-Puedes sentarte en el sofá.- sugirió mientras desaparecia por lo que creia ser la cocina.

Preferí quedarme de pie aunque me dolieran porque tenia miedo a romper algo.

Chris apareció minutos después con dos latas de soda y un tazón de palomitas en una bandeja.

-Hey te dijé que te acomodarás en el sofá.- dijó mirando a Lena.

-Oh sí... lo siento. Tenia miedo de quebrar algo.- dijó.

-Tu solo sientate.- le dijó nuevamente.- Sí hubieses quebrado algo, no creo que mis padres se darían cuenta. Hay demasiadas cosas aquí.- se sentó a mi lado, no muy cerca después de haber puesto la pelicula.

-¿Preparada para ver una tarde de pelis?- preguntó. Suspiré.

-Eso creo.-

Xxx.

Hello it's me.
He aqui otro cap de esta hermosa trama. Espero y les vaya gustando.

Manden mensaje si quieren dedicación para el siguiente cap.

Os amo
-D-

Mistery Girl Donde viven las historias. Descúbrelo ahora