Mi Sexy Novio Lobo.

♥Capítulo 2.

Terminé de comer y llamé a mi madre por teléfono; después de haber compartido platicas armoniosas y divertidas decidí tomar mis cosas para salir a nadar. Tomé mi mochila y en ella heché mi toalla, bañador, repelente de insectos y mi celular, ah, y una navaja. Estaba listo para salir cuando revise miles de mensajes de mi novia. Realmente eran treinta y todos con reclamos, decidí ignorarle y apagar mi celular para respirar la tranquilidad que me brindaba el bosque. En cada rincón se podía oler las ramas de los pinos, era deliciosamente fresco y relajante, oír a las aves cantar, todas de diferentes tipos: Cardenales, Azulejos, Carpinteros, águilas y muchas más, era relajante, también escuchar el agua del lago era relajante, el viento en mi cuerpo era relajante, relajante, relajante, relajante, no había otra palabra para describir aquel hermoso lugar. O tal vez sí. Daba igual, hay que disfrutar. Llegue al lago y fui a una orilla dónde el agua no fuese muy profunda, y al encontrar un lugar perfecto para nadar, tendí mis cosas en el suelo y me desvestí lo más rápido que pude para ponerme el bañador. No había rastros de que haiga más personas, pero aunque tuviese todo el bosque para mí solo y poder correr desnudo sin preocuparme por que nadie me viera, me sentía incómodo. Metí primero un pie al agua,p y estaba tibia entre fría, después me moje el cabello con las manos y me metí todo completo. Nade sin cesar toda la mañana hasta que sentí algo de hambre, entonces recordé que tenía unos cuantos sándwiches y agua en mi mochila. Nade hasta la orilla y me seque para después cubrir mi cuerpo con la toalla. Me senté y busque la comida en mi mochila. Bingo. No había olvidado la comida, incluso había llevado una manzana, que bien. Comencé a comer todo lo que pude cuando sentí picaduras en mis piernas, eran mosquitos. Saque el repelente y me lo vacíe en las piernas y brazos. Ahora si, podía comer sin ser molestado, o al parecer no. Escuche ruidos de entre los arbustos, pisadas humanas. Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, decidí no mirar a ningún lado y seguí comiendo, hasta que sentí detrás de mi unos movimientos como de un oso, no, mas bien de un canino. Con tantos años estudiando estos animales sabía que no debía moverme. Me quedé quieto mientras que el animal me olfateaba, sentía mi corazón desbocado y estaba a punto de llorar. Que estúpido era yo. El animal se puso enfrente de mi y se puso a urgar en mi mochila, para mi sorpresa no era un animal. Era...un chico. Un muchacho, un muchachito con orejas y cola de lobo, tenía también las piernas y los brazos cubiertos de pelaje aterciopelado gris y estaba completamente desnudo, su cuerpo estaba completamente trabajado. El miedo me abandonó para que la curiosidad e impresión ocuparan el lugar por el. Lo miraba curiosamente, nuestras miradas se cruzaron. Tenía unos grandes ojos azules, eran hermosos, y raro a la vez, se me quedo viendo y empezó a acercarse a mi. Estaba nervioso y no sabía que hacer, así que le dije un "hola". Eso basto para asustarlo y hacerlo que salga huyendo en cuatro patas lejos de mi. Se había ido, lo había espantado. Era como haber visto un unicornio, o a una criatura mitológica. Tal vez estaba cansado y alucine. Pero era tan real...mejor voy a descansar a la cabaña. Al llegar a la cabaña, me di una ducha con agua caliente en la tina. Me puse un pantalón de pijama y una camiseta negra. Fui a la sala y prendí la pantalla, que para mi sorpresa tenia contratado un sistemas de entretenimiento para ver películas y series. Me puse a buscar alguna película y encontré una llamada "Twigligth" en la cual, la imagen de presentación de la película había un vampiro, una chica guapa y un...hombre lobo. Eso me recordó a lo sucedido en la tarde. Mire el reloj de la pared y eran ya las siete treinta y uno de la tarde, aún así no sentía ganas de cenar. Terminé acurrucandome en el sofá de piel y puse play en la película de X-men quién sabe quién. La película no llevaba más de cincuenta minutos cuando me entró el sueño y me quede dormido en la sala de nuevo.

❁ ❁ ❁

Me desperté, era agradable, no tenía que ir al instituto y no haría nada complicado. Pensé que esto del intercambio sería en una universidad, pero tengo que estudiar la naturaleza y aprender de las formas de vida. Aún así no me escape de los estudios, porque llegando de nuevo a Escocia tendré que presentar proyectos y exámenes. Sabía que tanto descanso no era en vano. Mire el reloj de la sala y eran las diez y algo de la mañana, me senté en el sofá y prendí mi celular, al estar ya encendido, había una llamada perdida de mi mejor amigo Henrry. No quería hablar con el porque siempre terminaba en un caos sin entender, así que preferí enviarle un mensaje, así sería mas claro lo que queremos comunicarnos.

Trevor: Hola, Henrry, vi tu llamada perdida pero no puedo devolvertela. ¿Qué se te ofrece?

Contesto al instante. Que irritante.

Henrry: Hola, Trev, ¿POR QUE JODIDOS NO ME AVISASTE QUE TE IBAS DE INTERCAMBIO? Maldito idiota, iré en un día a visitarte.

Trevor: Ok, aquí te espero.

Le dí la dirección y le envíe dinero a su cajero por mi cuenta de banco en el celular.

Henrry vivía en Holanda, no le quedaba muy lejos llegar aquí, pero si me oponía a sus planes, seria tiempo perdido. Cuando quiere algo lo consigue, y nadie, ni siquiera yo, puede detener a ese tonto. Realmente no tengo ganas de ver a nadie, quería la cabaña para mi sólo. Pensé que me libraría de todos mis problemas, pero Henrry era un pesado y desordenado, tal vez tiraría abajo la cabaña si lo dejó sólo aquí. Mierda, tengo que esconder las buenas cosas, no se por cuanto tiempo se quedaría aquí. Pero, pensé en contarle lo del chico lobo que vi en el lago, seguro que el me creería.

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Muy buenas a todas y todos, gracias por continuar hasta aquí, se los agradezco de corazón, les prometo que habrá algo bueno...algo muy bueno wajajajaja. ;)
XOXO~♡

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