EL PRECIO DE AMAR

Capítulo 1

Eso fue amor a primera vista.

Desde que lo vio descender del automóvil con su rostro tímido, de frágil sonrisa y grandes ojos marrones, y ese cabello castaño desordenado que le cubría las orejas, supo que lo amó.

Desde ese instante no hubo nadie más para Cesar.

Siempre había sido un joven arrogante, caprichoso, irritable y malhumorado, acostumbrado a tener todo y a todos a sus pies, y cuando vio al delgado hijo del jardinero llegar a vivir allí, con su sencilla apariencia y delicados rasgos, sabía que tenía que tenerlo.

De eso ya habían pasado seis meses.

-¿Estás nervioso? -preguntó Cesar.

-Sólo un poco... es mi primera vez, pero confío en ti.

-No te tocaré si no estás seguro.

-No. Yo quiero hacer esto.

-Te amo. ¿Lo sabes, verdad?

-Te creo. Por eso estoy aquí.

Aquel hermoso y frágil muchacho había cambiado por completo la vida de Cesar, la había llenado de colores, de alegría, de vida, y lo había hecho pensar, por primera vez, en alguien más que no fuera si mismo.

Cesar More, el único hijo del multimillonario empresario Demian More; el industrial más poderoso de la región, era un muchacho de 22 años, alto, de cabello negro ondulado, tez bronceada y cuerpo trabajado, siempre elegante y orgulloso, frío y petulante; Un arrogante y presumido estudiante universitario, que en solo seis meses había sido transformado por el poder del sentimiento más hermoso del planeta: el amor.

Para él, Ryu era el tesoro más preciado que hubiera podido conseguir; sentía que nada más lo completaba tanto como él. Y no le importaba que fuera un simple hijo de jardinero, aunque deseaba fervientemente, ayudarlo a continuar sus estudios y no verlo dañando sus manos mientras aprendía el mismo oficio de su padre en los jardines de la mansión More.

Ryu era un chico de 18 años, inteligente, reservado, y había encontrado en Cesar un buen amigo y confidente, además de un protector y de quien le entregaba todo el cariño que nunca había tenido en su vida. Por lo que no le fue difícil dejarse invadir por ese cálido sentimiento en su pecho y poco a poco se fue enamorando de Cesar, sobretodo porque él nunca lo forzó a nada, lo conquistó, lo cuidó y lo esperó hasta que estuviera seguro de querer unir su cuerpo completamente al suyo.

Y ahora había llegado ese momento.

-Eres exquisito -le dijo Cesar, observando a un sonrojado Ryu, que yacía desnudo sobre la cama. -No sientas vergüenza de ti mismo, estoy complacido de contemplarte.

-Yo estoy complacido en que pudieras haberte fijado en alguien como yo, que soy tan poca cosa -respondió con timidez- pudiendo haber tenido a quien quieras a tus pies.

-No digas eso. Cómo tú no hay nadie más -dijo dándole un beso- Además, toda esta apariencia que ves, es sólo una carcasa que paga el dinero; pero nadie me conoce verdaderamente más que tú.

-Me enamoras, Cesar... ¿Qué puedo hacer para compensar todo tu amor?

-Sé mío.

-Soy tuyo. Aquí, ahora, siempre.

Cesar besó a su amado, primero con delicadeza, como siempre hacía, y luego con intensidad, con pasión, con ansias, había esperado ese momento por mucho tiempo, y ahora finalmente  lo tenía, completamente  entregado a él.

Ambos se envolvieron en la ardiente pasión que los consumía, ryu dejándose llevar por las expertas caricias de su amado, que lo envolvían, y lo colmaban de placer, Cesar sabía exactamente donde tocar, como hacer que su cuerpo respondiera en una ola de espontáneo placer, el que jamás había experimentado.

La habitación se llenó de gemidos y ambos se unieron con pasión y anhelo, colmados del éxtasis de completarse uno junto al otro.

N/A: Hola chicas y chicos, aquí estoy otra vez, presentando esta pequeña historia BL, no tan densa como la anterior, jajaja, esta vez hecha más desde el punto de vista del seme. Espero que les guste y la disfruten como lo hice yo al escribirla. Actualizaré todos los sábados, aunque son super pocos capítulos, jejeje. Votos, comentarios, criticas y todo lo que quieran, es bien recibido, muchos abrazos y besos para todo el que lea, y es que me siento muy feliz, y estoy creativa nuevamente, y voy a poder seguir escribiendo mis novelas grandes que las tenía botadas en el Word desde hace mucho. Nos estamos leyendo :)