Sentados, doce chicos de entre 16 y 19 años de edad, que hacemos aquí esperando? Bueno, por mi parte, espero a mi turno, mi turno para que exactamente? Para demostrar mis habilidades, ganar una calificación y finalmente obtener un lugar dentro de las lineas de defensa en esta guerra, ganarme pertenecer a un escuadrón formado por los chicos que están sentados en este mismo lugar conmigo.
-Riley estas nerviosa?
Y junto a mi, como siempre y desde los siempres que llegué aquí esta chica, conocida por estar apegada a mí. Si, yo soy Riley Ohomel y la chica a mi lado, la rubia de grandes ojos azules, mirada e intenciones inocentes es Rebeca Shulz.
Pero, como es exactamente que estamos aquí? Como fue que llegué hasta aquí, a punto de entregar mi vida a la guerra por la humanidad? Como es que alguien tan inocente esta a mi lado en las mismas circunstancias y voluntades que yo tomé?
Quizás recordar unos ayeres...Diez años, recuerdo aquel día hace diez años atrás, yo tenía tan solo 8 años y habitaba con mi familia, madre, padre y un par de hermanas mayores quienes habían sido prácticamente quienes se encargaron de mi crianza hasta esa corta edad, ya que mis padres trabajaban duro para darnos una vida, no éramos una familia adinerada, al contrario, había días que mi madre lloraba por miedo a que faltase la comida, sin embargo no recuerdo haber pasado hambre. Luego vino aquel día, el día que mi vida cambió, la guerra comenzó y mi familia entera murió.
Recuerdo perfectamente sus rostros antes de morir, recuerdo los suaves susurros de mi hermana mayor suplicando por que me quedara escondida en aquella alacena vacía, mientras mi otra hermana mayor molía a golpes y balas a mi, a su, a nuestra familia...al momento en que la vi, con esos ojos vacíos y pupilas altamente dilatadas supe que no era ella quien estaba haciendo aquella atrocidad, la conocía lo suficiente para saber que no eran sus intenciones, y al parecer mi familia lo sabía igual, ya que no se defendió. Desde mi escondite podía ver que ocurría fuera de mi casa, por un agujero que seguro una rata había hecho para poder escapar con nuestro alimento; fuera de mi hogar todo era un caos similar, la gente, mis vecinos del sector 34, mi sector, el lugar donde nací, se atacaban unos a otros, familias que esa misma mañana había visto pintar su casa juntos, atacaba ferozmente a sus familiares, a sus hijos, a sus padres, iguales contra iguales, no supe que era lo que ocurría, sin embargo tenía muy en mente que pasaba algo malo y que debía permanecer ahí como había dicho mi hermana, mas no debo negar que las pisadas de mi "hermana" aún viva pero con conciencia de otro me ponían la piel de gallina, pensando desesperadamente que haría si me encontraba... luego un silencio aterrador...solo pisadas, de mi hermana y de mis vecinos..o lo que creía que eran ellos.
Pero el sonido de las balas me distrajo, había soldados afuera, dando órdenes, corriendo, tratando de buscar algún sobreviviente, tirando a la cabeza de aquellos que asesinaron a sus iguales, cortando sus yugulares con cuchillos alargados y curveados, la sangre que brotaba era de un color negro y espesa...de algún modo u otro comprendí a esa corta edad que esas ya no eran personas...
Entraron a mi casa, derribaron en dos disparos a mi hermana, mi mente estaba funcionando bien sin embargo recuerdo no poder moverme...hasta que un soldado me encontró.
"Hay una niña" me apuntaba con su arma y en seguida, apuntaron con una linterna a mis ojos, cegándome en un principio
"Esta intacta" recuerdo que dijo antes de cubrirme con una manta y sacarme se ahí..de mi hogar, en un pequeño agujero que tenía aquella manta pude ver a mi familia tirada en el piso, muerta, deshecha, todos con aquella aureola roja al rededor de sus cabezas con excepción de mi hermana mayor, su pequeño charco era de un color negro...
Tengo recuerdos borrosos de lo que ocurrió después, solo se que terminé en un tren, con sobrevivientes de otros sectores que habían tenido el mismo caso, nos habían puesto un brazalete a cada quien, con un color diferente y número del sector, recuerdo que el mío, rojo, con un gran "34" escrito en medio en letras negras. A mi alrededor nadie tenía el mismo brazalete que yo, a mi lado un par de señoras compartían uno de color verde claro, con el número "31" estas conversaban..
"Atacaron en todos los sectores, se que el 35 y 24 estan casi ilesos...el nuestro solo tuvo unas bajas..seguro tu hermano esta en el otro vagón..podríamos estar como el 34, ese sector ya no existe.."
Así escuché que ya no tenía lugar actual pertenecer, así escuché que lo que llamaba "hogar" ya no existía, me dieron ganas de llorar, pero luego visualicé a alguien que ya había roto en llanto, una niña de mi edad, con el cabello largo y rubio, enmarañado, su ropa tenía manchas de sangre y aquel fluido negro, las lágrimas caían de sus grandes ojos, estaba cubierta de lodo, lagrimas y mocos en su rostro, sollozaba y pedía a gritos a su madre y a su padre...
"Esa chiquilla lleva llorando todo el tiempo, alterará a los guardias"
Comentó alguien a mi lado; un soldado entró en en el vagón, con un gran rollo de papel en sus manos
"Silencio!"
La mayoría de la gente obedeció, sin embargo, la niña hacía caso omiso
"Dije..silencio!"
Su llanto no paraba, ahora que lo pienso quizás era su estado de shock, el soldado se acercó a ella y pareció que iba a golpearle, sin embargo algo reaccionó dentro de mi corrí a cubrir su boca, para guardar sus llantos dentro de ella.
"Leeré el nombre de los sobrevivientes de los sectores 20 al 36, posteriormente arrancaremos a una zona segura"
Abrió su lista y comenzó a leer, mientras que con mi pequeña y sucia mano cubría los llantos de la niña y ella solo permanecía quieta...mientras miraba abajo y sus lágrimas salían despacio. A medida que leía los nombres, se escuchaban suspiros de calma, suspiros de dolor, resignación, se escuchaban llantos, sollozos, y algunos solo se quedaban callados. Había sido una masacre...luego mencionó mi sector
"Sector 34..."
Guardó un gran silencio a medida que leía la lista y miraba los nombres de los difuntos
"Riley Ohomel"
Era yo...luego otro intervalo de silencio
"Rebeca Shulz"
La chica a mi lado levantó la mano como si fuese un pase de lista en la escuela...ella era de mi sector..solo quedábamos ella y yo..
Cuando el soldado se retiró y el tren comenzó a moverse, ahí fue cuando quité mi mano de su boca y ella seguía llorando..aún me impresiona de donde sacaba todas esas lagrimas.
Luego recuerdo como fue que comenzó todo. Ella volvió a sollozar por su madre.
"Ya no esta, ya nadie esta, somos lo único que queda, nosotras somos el sector 34 ahora..así que deja de llorar que nos meterás en problemas"
En ese momento y hasta ahora no se si ella era inmadura para nuestra edad o yo era bastante madura..Y así, desde aquel día la chica comenzó a seguirme, a cada lugar que yo iba, cada decisión que yo tomara, la chica estaba detrás de mi. Claramente nos volvimos amigas pero a mala gana mía ya que me parecía alguien molesta, sin embargo con el tiempo me fui acostumbrando a su presencia...a su excesiva presencia.
Tiempo después de lo ocurrido en nuestro sector, nos fue revelada la situación de nuestra sociedad...
Antes se creía que los seres de otros mundos eran objeto de la ciencia ficción, lamentable no lo son, existen y y habían llegado a nuestro planeta, copiando nuestra imagen y semejanza para declararnos la guerra...se veían como nosotros, como conocidos sin embargo, una vez que invadieran tu cerebro no había forma de sacarlos y ahora eras uno de ellos.
Habían tomado la mitad de nuestra especie, sin embargo...a humanidad se defendía con todo lo que tenía y así había sobrevivido.
Al conocer con detalle la situación me anoté para ingresar a las líneas jóvenes de defensa...y por consiguiente, la chica inocente que me seguía a todas partes igual..
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Lo Único que Queda
Science FictionEn medio de este desastre, esta guerra ocasionada por al ambición humana y las intenciones desmedidas se otra raza por conquistarnos, ¿cabe un amor como este? o simplemente ¿cabe el amor aquí? El ser humano esta hecho y basado en emociones y sentimi...