Señor Papá Marco.

En la mira.

Los días que siguieron a ese desastroso día fueron los más agotadores de toda mi vida.

No podía bajar la guardia ni por un momento, Jean se la pasaba insinuando sé, ni siquiera parecía escucharme cuando le explicaba algo y cada que veía que estaba demasiado distraído me besaba. ¡Me robo demasiados besos! Quiero decir, no es que besara mal o algo así, pero joder ¿Qué era lo que este muchacho quería de mí?

—Papá, se te está quemando el almuerzo..

Solté un gritito cuando note que lo que según yo había sido un huevo estrellado, ahora estaba más que quemado. Solté un suspiro pesado, tirando con todo el dolor de mi corazón la comida, e intente de nuevo con un nuevo huevo.

—Papá, últimamente vas mucho al trabajo—comento Armin, mientras terminaba de comer su cereal—¿Paso algo?

—¡Es cierto, papá! Es que no puedes vivir sin ver a tu novio—comento también Ymir.

—Te he dicho muchas veces que no me gusta NADIE—le dirigí la mirada más amenazante que pude a Ymir y solo obtuve una mirada aburrida de regreso—En cuanto a lo que preguntaste Armin, en realidad si paso algo.

—¿Algo malo, papi?—los ojitos de mi pequeño rubio se llenaron fe preocupación.

Sonreí, poniéndome a su altura para poder limpiarle los restos de cereal que tenia en su cara. Cuando termine me levante dejando un beso pequeño en su frente.

—No te preocupes, campeón. Solo es que mi jefe me encargo algo importante, que requiere que vaya seguido al trabajo.

—Señor Papá Marco...

—¿Hm, que pasa pequeño?

—No soy pequeño...—contesto inmediatamente, con un pequeño puchero en los labios—Señor Papá Marco, ¿por qué usted no tiene novio?

Bueno, eso me había tomado por sorpresa.

—Vaya, no sabia que te interesaba mi vida amorosa, Levi.

—No lo hace... Solo tengo algo de curiosidad.

—Bueno...

No podía decirles que nadie querría salir con alguien que ya tenía hijos y tres además, porque aunque en este momento de mi vida yo de verdad no tenia un interés romántico y disfrutaba de pasar tiempo con mis bebés, en algún momento de mi vida había deseado encontrar a alguien "especial" y no se, casarme. Además de que sabía que ellos no iban a estar para siempre conmigo, algún día harían su vida aparte y yo me quedaría solo como un perro...

—¡¿P-papá?! ¡¿P-por qué e-estás llorando?!

—Solo pensar que van a dejarme, me pone tan triste—jale a los tres a un abrazo grupal y los llene de besos. Ymir y Levi hacían cara de "asco", Armin solo reía suavecito—¡Los encerraré para que nunca se vayan de mi lado!

—¡Papi, que cosas dices!

Entre una que otra tontería más seguimos desayunando.

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Es cortito, lo se.

¡Pero es por una buena razón! Ya lo verán ;v

Iba a actualizar ayer, pero PERO mi siempre confiable computadora estaba con sus jaladas :D

En fin, ¡Aquí esta el capítulo que escribí con mucho amor! Como todos de hecho :'v porque yo, adoro a esas personas que se toman la molestia de leerme.

¡Nos leemos después!