Mis lindas intros dislexicas.

Introducción: Mansión K-pop.

Choi YoungJae

Nacido en Mokpo, Jeolla en Corea del Sur, un hermoso 17 de Septiembre del 96.

Mi vida no fue la "Gran" cosa, lo básico, ser perseguido por un malandro, trabajar porque mis progenitores no tenían economía para que estudiará cómodamente mi sueño de ser un príncipe de Disney, ser trainee por solo 7 meses lo que a todos nos pasa, obviamente.

Con mis putos de Hot7, digo amigos de Got7, vivi una vida tranquila, golpeaba al Wang Kong al menos 3 veces al día, contaba a mis 16 lunares antes de bañarme, besaba a coco cada que tenía la oportunidad, no olvidar a mis jermosas sunshines (si, con jota, como Sho.) y sobre todas las cosas huía como el macho que soy (comprobado con mis 91cm de espalda de leñador.) cada que algo me "intimida" porque obvio nada me asusta.

Como mi tipo de sangre lo marca, yo tengo metas y cuando me propongo algo ¡Lo hago!

Como en este momento, Me iré a dormir otros 10 min....

*Pausa Comercial.*

Bueno ya dormí, podemos continuar con esta porquería de introducción que tengo que hacer...¿Ah? ¿Ya estamos al aire? Avisennme.

Bueno, Bueno, que decir, soy una persona adorable, puedo tomar una botella de gaseosa en tan solo 10 segundos, tengo una preciosa eye smile, sin contar que me gustan todas las comidas, menos el pepino.

Lo odio.

Porque luego me da hambre. -guiño, guiño.-

En Fin.

Un día como cualquier otro...

—Mierda... Esperen, no prendí la máquina de flashbacks.

...

...

...

—Ah ya listo ahora si.

Comentó mientras aclaraba su garganta.

×∆× Flashback para nada idiota y 100% real ×∆×

El joven Choi se encontraba tranquilo contando nuevamente aquellos lunares en su piel, cuando el vibrar de su teléfono lo sacó de tal concentración, Concentrada, Concentradamente...

Podría jurar que escucho a dios susurrarle al oído : "Vamos Jae, contesta el puto teléfono que no me dejas dormir." Después descubrió que en realidad dios, si no su hermano que estaba gritándole desde el sofá.

"Un pequeño error, las voces se parecen."

Pensó mientras se levantaba de su silla a contestar su teléfono que se encontraba cargándose.

—¡Oh! Seunghoon-Hyung ¿Qué pasa? ¿Lo han vuelto a confundir con una Celebridad?

Preguntó al mayor que se encontraba de el otro lado de la linea telefónica.

— Nada de eso YoungJae, ¿Recuerdas aquella empresa? ¿La *censurado*? Bueno, resalta y resulta que Got7 tiene que presentarse en dicho programa, ese en donde tendrás que vivir con otros famosos.

Se escucho de el otro lado de la linea mientras el joven cantante sonreía ampliamente al aparato que unía la conversación.

—Entonces...¿Podre conocer a Bruno Mars?

Preguntó honestamente ilusionado de poder conocer a "su ídolo".

— No seas pendejo, solo serán idols de grupos como Got7, pasaremos por ti mañana en la mañana, ten todo listo para entonces.

Lo reprimió el mayor antes de cortar aquella llamada.

—¡Uy! Así que chiste...

Se quejó mientras se dirigía a hacer sus maletas.

×∆× Fin de el Flashback para nada idiota y 100% real ×∆×

Y esa es la historia de como conocí a vuestra madre... ¡Oh!

Digo de como termine contando esto, encerrado en esta apestosa camioneta.(realmente no esta apestosa, calmen sus dedos shunshines.)

¿The End?

...

Not...

Bajo de aquella camioneta, con sus maletas, un corazón vacío(te extraño coco) y unos sueños destrozados(me dueles Bruno...).

—Así que aquí es donde tendré que estar los próximos meses...

Suspiró mirando a su alrededor la estructura de aquel lugar. Adentrándose sin saber que le esperaba en tan enorme lugar, solo una cosa sabía, al menos aquí, Jaebum no lo abrazaría mientras duerme para evitar que se mueva como pez fuera de el agua por la cama, ósea... Esto era casi el paraíso, solo que sin coco y sin Bruno.