- l-lo siento-o -sollozó el menor, evitando la mirada del mayor.- no-o de-debí...
- Jyugo, no... por favor no llores -suspira, no quería verlo de esa manera- soy yo quien lo siente, en serio, pero... yo no te amo...
El chico de los grilletes lloró con más fuerza.
Aquella era su realidad, su cruel y triste realidad. Amó, no, sigue amando con intensidad, como nunca lo hizo. Amaba a aquel hombre de largos cabellos amarrados en una trenza; a aquel hombre de ojos azules como el cielo, llenos de vida; a aquel hombre que siempre se preocupaba por él y daba su vida por él.
¿Cómo no enamorarse de él?
Por el contrario, el mayor le miraba solo como un amigo, su mejor amigo. Siempre estuvo para ayudarle y viceversa. Quería ayudarlo en esos momentos, pero no le mentiría de sus sentimientos.
El azabache se secó rápidamente y alzó la mirada para verlo. Tenía sus ojos rojos y por estallar nuevamente en lágrimas
- o-olvída-alo por favor... -pidió con una triste sonrisa.- no-o te preocupes, estaré bi-ien...
Y damedia vuelta y comenzar a caminar a la puerta de su celda, dispuesto a salir, a correr lejos de allí, de la realidad, de aquel lejano y platónico amor.
Uno pensaba a toda velocidad, alguna solución para aquello. No podía estar tranquilo, no quería romper tan fuerte sus esperanzas.
No sabía que decir pero debía hacerlo. Solo... Cualquier cosa.- Jyugo, -paró de caminar al escuchar su voz- enamorame...
Y no lo pensó, solo lo dijo.
- ¿ah?
- bueno... todo puede cambiar ¿No? -habló nervioso.- te daré tiempo para que me enamores, ¿Qué opinas? -terminó de hablar y el menor se giró a verlo con un brillo en los ojos, uno lleno de esperanza.
- ¿Cuánto tiempo?
- déjame pensar... -colocó su mano en su mentón, pensando en algún número especial- bueno, soy el recluso once, tú quieres al recluso once... así que te doy... once días para enamorarme, ¿Sí?
-lo haré -habló decidido.
Continuará

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Enamórame En Once Días - [1115]
Fanfiction"Te amo" Nunca esperó escuchar aquellas palabras de un hombre, mucho menos de su mejor amigo. Creyó que de una broma se trataba hasta ver como saladas lágrimas desbordaban aquellos hermosos ojos. Sus sentimientos no eran lo mismos, y no le mentiría...