A la deriva

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Todo lo que pensaba era el, en besar sus labios, tocar su cálida piel bronceada, manosear su cabello color miel que tanto anhelaba. Pero adivina que se acabó, se fue con otra, me ha olvidado hace más de un año, aunque ya no es como antes, ya no lo quiero, ya no. Solo lo extraño.

-Pasajeros del vuelo 453, última llamada para abordar-. Dice un señor por la bocina, sacándome de mis pensamientos. Guardé mis audífonos por un momento y me dirigí hacia la puerta.

Cuando me monte en el avión me cubrió una manta de sueño profundo, por lo cual le dije a la señora alado mío, que me avisara cuando pase la aeromoza con la comida.

La señora me despertó pero no para la comida, sino, porque ya hemos llegado a New Jersey.

Cuando salí del avión esto no se parecía en nada a mi destino, ni siquiera la gente se veía igual. Estas visten de un tanto raro, todas de un mismo color beige con diferentes collares y añillos de colores, son personas neutras, elegantes, sin algún rasgo de imperfección; no como las personas de New Jersey ellos usan vaqueros, una franela y botas negras todo colorido, son imperfectas, son humanos.

Vi a un hombre atractivo- bueno acá todos son atractivos-, me llamo la atención, se veía natural no como todos los demás, a pesar de que si tiene la misma absurda vestimenta.

Estaba acostado sobre una pared, le llega un inmenso rayo de sol en toda la cara pero no muestra incomodidad alguna. Me acerqué a preguntarle donde me encuentro y porque las personas están tan raras hoy.

-Hola...- Dije sin saber que decir.

-¿Hola?- Dice confundido- ¿Por qué hablas conmigo?

-Pensé que podría preguntarle algo...porque veras me monte en un avión con destino a un sitio, pero esto definitivamente es lo opuesto a ese lugar. Así que nada más quería preguntar adonde estoy.

-¿Como que no eres de acá?, estas en Lowingtown.- Anunció.

-¿Dónde queda Lowingtown?-. Pregunto apenada por saber muy poco de geografía.

-En la región Viento, para ser más exacto limita con las regiones Nieve, Calor y Húmeda.

Genial, ahora solo estoy segura de dos cosas; primera esto no queda en la Tierra y segunda estoy remotamente perdida.

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Mientras sueñas... Escapa!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora