Capitulo 11

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3 semanas después
Desperté un Martes en la casa de los Korsakov, cuando bajé a desayunar me percaté de que recibimos una hoja que parecía escrita con labial de mujer color carmín: "100,000,000 libras es la cantidad que queremos por Emma Korsakova en 7 días a más tardar" estaba escrito en aquella hoja, estaban pidiendo demasiado, eso ni siquiera Dimitri lo conseguiría en menos de una semana, ¿por qué no estaban pidiendo rescate para Jade?
Leo tomó la hoja con guantes de látex y la guardó en una bolsa de plástico que habían dejado los agentes por si encontrábamos algo sospechoso lista para llevarla al ministerio público en donde pudieron encontrar una huella digital.
Recibimos una llamada, eran los "secuestradores" si así se les puede llamar a esos hijos de puta.
-Por favor entiendan, están pidiendo una cantidad exagerada de dinero solamente por Emma, tengan piedad- hablaba con firmeza Katerina al teléfono, esas personas habían pedido hablar con ella y que Dimitri se mantuviera callado.
-Lo que quiero es cobrar venganza- se escuchó una voz masculina algo distorsionada al otro lado de la línea.
En esos momentos nos encontrábamos con los agentes y ellos rastreaban la llamada.
Pronto encontraron la ubicación, Katerina aceptó el trato por órdenes de un oficial y comenzaron a ir patrullas, muy detrás de ellos íbamos solamente Dimitri, Vladimir, Leonti y yo, a lo lejos vimos como los judiciales salieron con un hombre esposado y lo empujaban y golpeaban, por fin agarraron al secuestrador de Emma.
-Soy un simple complice- Dijo cínicamente aquel hombre en el momento en el que cayó.
-¿En dónde están?- le preguntó el oficial Stevens a aquel hombre
Después de un interrogatorio en el que el hombre no quiso confesar lo trasladaron con profesionales, ya había confesado.
Los oficiales fueron de inmediato al lugar donde se encontraban Emma y Jade, era una especie de bodega enorme a las afueras de South Shields, pronto entraron varios policías, a lo lejos me percate de que venían dos hombres con Jade y Emma en sus brazos, traté de correr hacía ellas pero un policía me lo impidió, ellas dos estaban golpeadas y drogadas, tenían muchos moretes, y la sangre fluía por las fosas nasales de Emma, estaban inconscientes.
Llegaron dos ambulancias por ellas y de inmediato las trasladaron, Leonti, Katerina y Dimitri, Kathleen madre de Jade y Grayson su padre, Nora y yo seguimos a las ambulancias, hacia el hospital en donde las internaron, tenían, quemaduras en varias partes del cuerpo, que nos dijeron podrían ser graves, podrían morir y cuando dijeron eso mi mundo se vio completamente abajo.

(~)
Me sentía muy mal, no podía ver a mis amigas así, eran ambas, quizá lo único que tenía, cuando decidí venir a Inglaterra con Jade jamás pensé que algo así iba a pasar, mi vida estaba cambiando y antes de que fueran privadas de su libertad todo era genial, siento que ahora viviría con miedo de que me pueda suceder algo, somos el blanco fácil de alguien que no tengo idea de que tiene en nuestra contra.
-Hola- Una voz masculina interrumpió mis pensamientos
-Hola- respondí mirando a un chico rubio, muy alto, ojos color miel, un cuerpo bastante marcado y una sonrisa preciosa.
-¿Eres amiga de Emma?- me respondió aún con una sonrisa, aunque se veía dolor en sus ojos, y sus dedos notaban los nervios que sentía.
-Si, soy Nora. ¿Tú quién eres?- Me sentí un poco intranquila, pues estábamos pasando por algo muy delicado y yo no tenía idea de quién era aquel chico.
-Soy Cameron, mucho gusto- Estiró su mano y la estrechamos.
-¿Qué haces aquí?- pregunté algo intimidada.
-Calma, soy primo de Emma, llegué hace dos semanas de Rusia porque me quedaré a vivir aquí- Respondió. -¿Tú quién eres?-
-Una de sus mejores amigas- Sentí como mi voz se quebró de nuevo y mis lágrimas comenzaron a brotar, sentí los brazos protectores de aquel rubio rodearme mientras yo me sentía estúpida con todo el miedo que tenía.
-¿Tienes frío?- Ni si quiera le pude responder, realmente me estaba muriendo de frío y creo que el lenguaje corporal hizo más de lo que yo pude hacer. Cameron se quitó el suéter que llevaba y me lo puso.
-Gracias-
-No hay de qué, ¿tienes hambre?- preguntó mirándome a los ojos.
-Un poco- y con esa respuesta me llevó a la cafetería avisándole a Katerina donde estaría.

(~)
-Familiares de la señorita Fleming?- salió una enfermera de piernas largas y cabello negro.
-Nosotros- respondieron Kathleen y Grayson al unísono.
-Jade está estable, pueden pasar a verla a la habitación 326- sonrío aquella amable mujer y se dio vuelta para irse
-Disculpe, enfermera- la detuvo la madre de Emma -¿No tiene noticias sobre Emma Korsakova? Soy su madre-
La enfermera nos miró a todos y agachó la mirada. -No, Emma aún no se encuentra estable, lo siento- y se fue.

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