•Change Me• [TERMINADA] [EN EDICIÓN]

Wow.

  

   Me desperté a las 6:30 am y me fui a bañar. Tomé una ducha rápidamente y luego me vestí con una camisa de  cuadrille en tonos rojizos y un jean ajustado. Me puse mi tobillera y encima de ella me puse mis vans rojas. Bajé la escalera lentamente ya que me dolía cada apoyaba el pie. Desayuné tranquila y luego mi madre me llevó hasta el colegio.

    - ¿No necesitas ayuda para entrar?-me preguntó mi madre cuando abrí la puerta para bajar del auto.

   - No, tranquila, creo que estaré bien.- le dije y luego terminé de bajar.

   - Nos vemos a la salida.- me dijo y luego se fue.

   Cuando me di la vuelta me encontré con un sonriente Chase esperándome en la puerta de la institución. Se acercó hacia mí y me abrazó.

    - ¿Necesitas ayuda caminando?- me preguntó.

   - No, creo que puedo manejarlo.-dije

   Caminé renga hasta que llegué a la escalera que estaba delante de las puertas de entrada y me detuve enfrente de ellas.

   - Déjame ayudarte.-me dijo Chase mientras me levantaba hasta el primer escalón.

    - Estoy bien, puedo caminar, sólo necesito un poco de ayuda subiendo la escalera, no es nada.-dije.

   - Súbete a mi espalda.-dijo dándose la vuelta.

   - No hace falta Chase.-le dije.

   - Dale, hazlo, te aseguro que no es nada.-afirmó él.

    - Bueno, lo haré, pero sólo te voy a decir que soy pesada.-me dijo él.

   - Okay.-dijo y yo me subí a su espalda.

   Subió los escalones de dos en dos y entramos al colegio.

   - No pesas nada Lia, eres como una pluma.-me dijo sosteniéndome en su espalda.

   - Bájame, ya puedo seguir sola.-le dije.

    - No, no hay problema, no pesas nada.-me dijo y caminó por él corredor.

    - Todo el mundo nos está mirando-dije en su oído-. Bájame.

    - Agárrate fuerte.-me dijo y antes de que yo pudiese hacerlo ya había empezado a correr por el corredor.

   - Para, por favor para.-le dije.

   - En un momento.-me contestó y se metió en el armario de la limpieza.

   - ¿Qué haces?-le pregunté cuando cerró la puerta y me bajó suavemente al piso.

  - Shh, no hables.-dijo él.

  - ¿Qué haces?-le pregunté nuevamente.

   - Me parece que querías un lugar donde nadie nos viera.-dijo él sonriéndome.

  - Tenemos que ir a clase.-le dije tratando de abrir la puerta, pero él me lo impidió.

   - No todavía.-dijo él y se acercó un poco hacía mí.

   - Vamos Chase, no tengo ganas de llegar tarde.-le dije moviéndome pero él me cerró el paso.

   - Sólo un poco más.-me dijo y cerró la distancia entre nosotros, e hizo lo que yo pensé que no sucedería de nuevo, pero que en verdad anhelaba, me besó.

   Fue un beso tierno, para nada desesperado, pero si completamente inesperado. Luego de unos segundos se alejó y me miró sonriente.

   - ¿Qué fue eso?-le pregunté aún sorprendida.