capítulo 7 : enterándose de lo sucedido

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— siento no haberlo hecho más romántico — dijo abrazándola.

— para mí es perfecto — dijo con las mejillas de tono carmesí.

——★★——

— ¿enserio lo hiciste? — preguntó flash, sentado en una banca de la plaza central.

— sí — respondió el peliazul.

— ¿por qué?.

— por que cuando se entere que esta embarazada, le dirá a sus padres y no quiero meterme con sus papás. — explicó. — ay que ser inteligente mi amigo.

— bueno, digamos que nuestra apuesta no fue muy inteligente que digamos.

— si pero quiero tu guitarra — respondió soarin con una sonrisa engreída

— yo tendré tu auto. Además tengo una duda.

— ¿cual?.

— ¿que pasaría si los dos salen varones? ¿o las dos mujeres? — preguntó flash.

— se anularía la apuesta y nadie ganaría.

— aaaah ok.

——★★——

3 meses después....

— ¿me ayudan con esto? — dijo twilight entrando a la casa de su hermano. Entró arrastrando una cuna de color amarilla.

— ¿twilight? ¿qué haces aquí? — preguntó shining ayudando con la cuna.

— solo vine a traerles un regalo — respondió con una sonrisa y la respiración entre cortada.

— no te hubieses molestado — dijo candace.

— descuida es un regalo, ya seré tia por segunda vez, lo minimo que puedo hacer es consentir a mi sobrina — dijo revisando su cartera — sin descuidar a la otra — continuó sacando un pequeño oso de felpa dándoselo a flurry.

— muchas gracias twi — agradeció shining — ¿quieres quedarte a comer? Ya serán las 13:00 y hay que almorzar.

— claro, solo le mandare un mensaje a flash para decirle que se compre comida de afuera.

  (...)

Twilight ayudaba a candace a preparar la comida, mientras shining estaba en el sofá durmiendo y su pequeña hija rayando su rostro.

— twi, ¿puedo hacerte una pregunta? — dijo candace cortando unas verduras.

— claro.

— ¿estas embarazada? — fue directo al grano.

— no ¿por que lo preguntas?.

— es que tienes cambios de humor muy repentinos, además, siempre estas comiendo algo dulce.

— mis cambios de humores se deben a el estrés que estoy pasando por un caso que tengo, de una pareja con hijos y estoy comiendo de más por que no como casi nada en mi trabajo.— explicó.

— bueno... Esto te pondrá en dudas ¿cuando fue la última vez que tuviste tu periodo? — sonrió de lado. La peliazul se quedo un rato mirando a la nada, pensando en que responder.

— soy irregular, aveces se me atraza y aveces no — respondió mientras seguía cocinando.

— twi ¿quieres apostar? — mostró su dedo meñique.— vamos a comprar una prueba de embarazo.

Twilight tomo su dedo meñique y salieron de la cocina.

— ¡flurry! ¡no! — reprochó candace alzando a su hija — a papá no se le pinta.

  La llevó a la farmacia junto con twilight, donde allí compraron lo que necesitaban. Volviendo a casa, la Ojivioleta se entro a el baño, cruzando los dedos esperando el «negativo» del test.

Paso unos minutos y salió del baño, llorando, llendo directo a Abrazar a candace.

— tenías razón — dijo entre sollozos. — e...estoy embarazada.

— ya calmate twi. Mira, voy a darle de comer a flurry y luego hablamos de esto.

——★★——

— 20 de abril, 20 de abril — decía la peliarcoiris en su habitación marcando la fecha en su calendario — 20 de abril, tercer mes y nada. ¿qué me estará pasando? ¿sera que estoy enferma? ¿podría ser que tengo algún problema? — decía dando pequeñas vueltas a su cuarto. — ¿ o sera que...? Soarin — dijo con los ojos entre cerrados tomando el teléfono marcando el número de su prometido.

— madita sea pendejo veni para acá ahora mismo por que te cortó hasta las pelotas — dijo a través de la línea telefónica, para luego cortar. Dejando a el peliazul con pudor.

  Llegó a la casa de la peliarcoiris, tocó el timbre y le abrió la nombrada. Con los brazos cruzados, una mirada fría y una prueba de embarazo en su mano.

— explicame esto — le mostró el test que se divisaban dos líneas.

— es una prueba de embarazo — tragó saliva.

— ¡si! ¡es exactamente lo que es!— gritó.

— hija ¿sucede algo? — preguntaron sus padres desde adentro.

— no para nada — dijo en un tono más calmado. — a y para colmo — saco una pequeña bolsita de su bolsillo trasero — ¿qué es esto? — le mostró un preservativo.

— ¿es un condón?.

— ¡si! ¡es exactamente eso!.

— dashie, estas muy alterada, mejor entremos antes de que sigas así. — pasó y la peliarcoiris lo tomó de la muñeca llevándolo a su habitación.

— ahora sí dime ¿qué es esto?.

— ya te lo dije un condón — respondió el peliazul.

— es eso, lo encontré en tu auto el otro día, así que solo había dos opciones 1 me estas engañando con una cualquiera o 2 la vez que lo hicimos en tu auto siquiera lo usaste — tomó aire — dime que es la primera.

— no, realmente es la segunda.


















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