- ¡dash! ¡regresa! - gritaba soarin bajando a toda velocidad las escaleras. Pero al salir se encontró con el auto ya a dos cuadras de distancia. - no te vallas - susurro Cayéndose de rodillas en el piso.
Habían pasado ya dos meses luego de lo sucedido. Según flash y soarin, las chicas deben estar entrando al noveno mes de embarazo.
Buscaron en la casa de el hermano de twilight; no estaban. Donde los padres de rainbow, tampoco estaban ahí. Una angustia se formo dentro de los dos hombres, dos meses sin noticia sobre sus esposas, bueno, en este caso de la esposa de flash y la prometida de soarin aunque ella ahora no quiera nada con él y lo dejo bien en claro cuando se marcho.
En canterlot, se encontraban las dos amigas. Caminando de lado en lado, pensando.
- ¿qué haremos twi? - decidió romper el silencio.- La única opción es pedirle ayuda a mis padres o a tu hermano.
Entraron en un estado critico a la escasez de dinero por la que estaban pasado. En un pequeño cuarto vivían las dos, y en esos dos meses el alquiler fueron pagados por twilight, quien tenia sus ahorros en el banco. Mientras rainbow no tenia nada, apenas termino sus estudios y debía buscarse un trabajo apenas de a luz y devolverle así el gran favor que twilight le esta haciendo, sustentando estos dos meses en canterlot.
- ¡no! Nos obligaran a regresar y shining le dirá a flash que se haga cargo de su hijo, aparte que lo lastimaría hasta que llegue al hospital. Puede ser un mal hombre que apostó sobre mi jurisdicción, pero aun así es el padre de mi hijo y no quiero que nada malo le pase.
- te entiendo - dijo posando una mano en el hombro de su amiga. - pero debes darte cuenta que nosotras no podemos sustentarnos en estas condiciones. Necesitamos algo de ayuda y creeme que odio admitirlo.
- no, estoy decidida a avanzar por mi cuenta ¿estas conmigo? - la peliazul miro fijamente a su amiga de ojos magenta quien dudaba cual seria su respuesta.
- hasta el final - decidió a hablar. Un abrazo sello esa promesa que tendría que cumplirse. - bien, te mostrare algo. - la guió hasta su habitación donde allí sacó una caja de bajo de su cama.
— rainbow ¿qué es esto? — pregunto intrigada por esa pequeña caja de zapatos.
— son mis ahorros — lo abrió y mostró el dinero que llevaba. — lo estaba ahorrando para comprarme una guitarra eléctrica, pero esto es mas importante.
— ¿como conseguiste esa cantidad?.
— trabaje en una cafetería, mis padres no querían que trabajase pero aún así lo hice. Toma — le entregó ese dinero — tengo calculado que son aproximadamente 5.000 dolares paga el alquiler y fíjate si puedes hacer algo más.
— pero... ¿y tú guitarra? — pregunto con el dinero en la mano; confundida por el acto de su amiga
— no importa, esto tiene mas importancia que una guitarra que nobpodre tocar ya que habrá que hacer ruido para que duerman los bebes.
Los brazos de la peliazul envolvieron por completo a rainbow dash. Unas lágrimas cayeron de parte de twilight.
— ¿estas llorando? — pregunto en un tono confuso la peliarcoiris.
— en mi estado todo lo tomó con mas sentimentalismo que antes — dio una breve explicación.
Al paso de de un mes, la puerta de su departamento fue golpeada con brusquedad. Rainbow fue a abrirla, para encontrarse con soarin.
— ¿qué haces aquí? — pregunto confusa.
— dashie, mi vida, mi corazón te busque por tanto tiempo y al fin te encontré.— la abrazo con toda su fuerza — vamos a casa.
— ¿qué? Espera... ¿que te sucede? crees que puedes venir hasta aquí solo para decirme que me buscaste y pretendes que valla contigo ¿Es enserio? .
— te pido mil y un disculpas, ya arregle el tema de la apuesta con flash y ya no hay arreglo puedes olvidarte de eso, no volveré a apostar contra ti.
— ¿rainbow sucede algo? — pregunto twilight al acercarse a la puerta.— soarin ¿porque estas aquí?.
— vine a suplicar el perdón de quien amo.
— pues nunca te perdonare y te rogaría que te vallas no quiero ver tu rostro en mucho tiempo. Ah y por tu estúpida apuesta, te diré si es hombre o mujer para que ganes esa maldita guitarra que ni se para que la queres.
— ya te dije que la apuesta ya no esta en pie.
La peliarcoiris al estar a punto de decir su siguiente palabra, un fuerte dolor se hizo presente dentro de ella. La llevaron al hospital, pues, daría a luz a su bebe.
Unos gritos se escucharon en la sala donde la peliarcoiris se encontraba, un bebe yacía en los brazos de la peliarcoiris llorando dando sus primeras boconadas de aire.

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apostando
FanfictionFlash y soarin apuestan. Flash sobre su esposa, twilight y soarin sobre su novia y futura prometida. esta apuesta podra llevarlo a algo bueno o malo... fanfic 2017