fuego y hielo

Capítulo 3

en ese momento no estaba pensando en nada, quizás fue la costumbre de estar cuidando de mi madre, y de vigilar que cosas puede comer y que cosas no

- perdón, fue una falta de respeto hacer eso sin su consentimiento

- no pidas perdón, la verdad es que no sabíamos como hablar tampoco y justo tu lo hiciste por nosotros - hablo Emy

- si, muchas gracias, pero normalmente las mujeres de tu edad no son tan detallistas - Dice el señor Robert

- pues pase un largo tiempo cuidando de mi madre, así que creo que fue la costumbre - les digo mientras recuerdo a mi madre

- tiene que ser una gran persona para hacer podido criar a una hija tan buena

- lo fue, desde que tengo memoria siempre fuimos mi madre y yo, pero tuvo una enfermedad a muy corta edad, tenía tan sólo 45 años pero tenía enfermedades de personas de 70 u 80 años

- que le ocurrió? - preguntó la señora Emy

- tenía un problema al cerebro y se volvió lentamente una persona vegetal, perdió lentamente la vista, la audición, lo perdió todo lentamente, y a pesar de ser joven, tenía que ser cuidada como una persona mayor, y como no teníamos dinero para contratar a una enfermera, yo cuide de ella durante ese tiempo

- y tú padre?- esta vez habló el señor Robert

- es una historia algo triste

- estamos esperando la comida - insiste el señor

- bien...mi madre me dijo que ella creció como una princesa, siempre lo tuvo todo respecto a lo material, pero sus padres estaban siempre trabajando, por lo que no pasaban mucho tiempo con ella, ella no conocía a muchas personas, hasta que un día se escapó de su casa para ir a una fiesta en donde conoció a ese hombre, en fin...se enamoraron pero sus padres nunca lo aceptaron por lo que ellos decidieron escaparse

- y ahora donde está tu padre? - preguntó el señor Robert ya que la señora Emy estaba en lágrimas

- no creo que sea buena idea, señora, esta bien??- le pregunto a la señora Emy

- si, sigue contando, que ocurrió despues?

- pues...estuvieron juntos un tiempo, hasta que mi madre lo oyó conversando por teléfono con quien al parecer era su esposa, en el cual decía que no la soportaba, que era una ingenua, y que sólo estaba por ella porque quería su herencia

a lo que mi madre reaccionó un tanto mal, haciéndolo enojar, la maltrató, la violó, le hizo muchas atrocidades, y al final mi madre cuando ya perdió todo amor y esperanza por el, le dijo que el sólo hecho de haber huido de casa, le quitaba todo derecho a herencia

y ese hombre se fue, dejando a mi madre sola, ella pensó muchas veces en acabar con su vida hasta que se dio cuenta que venía yo en camino, y ahí recobró todas las esperanzas perdidas, y comenzó a luchar para sacarme adelante a mi

- y tus abuelos? - preguntó esta vez el señor Müller

- no he sabido nunca de ellos- le respondo normal

- y porque tu madre no los ha buscado?- pregunta el señor Robert

- ella dijo que se sentía apenada por todas las cosas que hizo y que no tenía derecho a volver

- pero los quería no?- preguntó denuevo el jefe

- los quería mucho, nunca me dijo como se llamaban, pero siempre me hablaba de ellos, y de cuanto los extrañaba

- y no te gustaría buscarlos?- preguntó de nuevo

- nose, pero yo soy de las que piensan que el mundo es pequeño, y que algun día estaran frente a mi

- como se llamaba tu madre? - preguntó la señora Emy con la voz cortada

- Abigail Morton

- no puede ser - la señora Emy estalla en llanto

-senora Emy esta bien??- me levanto de mi puesto para ir a consolarla

- nose se decir esto aquí y ahora pero...Alana, mi señora se llama Emily Morton, ese es su nombre de soltera, y abigail es el mombre de nuestra hija, por lo que hay muchas probabilidades de que tu madre sea nuestra hija, más la historia que nos relataste es exactamente lo que nos ocurrió con ella

en ese momento de verdad me quede muda, no sabía que decir o que hacer y justo llega el maître con los platos nuevos, y todos por reflejo comenzaron a comer silenciosamente

al terminar de comer fue el señor Robert quien habló primero

- Lukas, respecto al acuerdo que teníamos, he decidido que ha llegado mi hora de jubilarme, sabemos que eres un empresario derecho, así que si estamos dispuestos a colaborar con el proyecto, respecto al resto, hay que verlo más en el futuro, tengo intenciones de solucionar primero mis asuntos familiares

- okay, no tengo ningún problema - le respondió el jefe

- le podrás dar el día libre mañana a esta señorita? - preguntó Robert

- si, conversen tranquilos mañana, yo no tengo ningún problema, justo mañana tenía libre también - sonríe, pero yo extrañada lo miro, el mañana tenía todo copado, porque las cosas de hoy las había movido para el día de mañana

pero decidí no decir nada, luego se lo consultaria a el 

- Alana, que te parece si mañana salimos los 3? - me pregunta esta vez Emy

yo no sabía que responder, así que mire a mi jefe, luego a los señores así como 3 veces

- puedes ir tranquila, me las puedo arreglar un día sin ti - sonríe

- no te sientas presionada, es sólo una pregunta, no una orden, estas en toda tu libertad de elegir si quieres ir o no - habló el señor Robert

-bien...ire

y así acabó la cena, la cual supuestamente era una cena de trabajos, terminó como algo totalmente distinto

en el camino devuelta le pregunté a mi jefe

- señor porque dijo que no tenía nada mañana??

- para que ellos se sientan tranquilos, y para que tu puedas ir, ahora que ya sabes que no estás sola en este mundo, no te entusiasma querer conocerlos mas?

- es extraño...

- mañana ve tranquila, yo estaré bien