Maldito amor, maldito tu. (Milo X Camus)

Capitulo XII- Un dia como padres en la playa.Parte II

*POV Milo*

Realmente ese tal Surt comenzaba a ser molesto, supongo que fue una mala idea haber venido aquí, prefiero jugar cartas con Aioria y aburrirme, que estar soportando a este tipo, pero era amigo de Camus... aunque pensándolo bien no estaría mal que le hiciera una broma. El mal clima comenzó a volver a ser el mismo de antes, supuse que el viento se llevo las nubes, y el maldito sol ardiente se manifestó, me detuve y tome a Camus del brazo.

-Creo que debemos volver al departamento, bueno al menos para cambiarnos estas prendas de mas- hacia demasiado calor como poder andar en la calle así.

-Supongo que tienes razón- volteó a ver a los niños y al pelirrojo -Tenemos que volver, hay que cambiarnos, no podes estar con estos ropajes de invierno ahora que el sol ardiente salió.

-Tienes toda la razón Camus- Surt se acerco a al francés y rodeo su cuello con su brazo, debía tener una tolerancia muy alta, de lo contrario ya le habría hecho algo.

-Bien...creo que ya podemos volver- hable entre dientes, voy a tener que morderme la lengua para no decir malas palabras.

Nos disponías a llegar al recinto para cambiarnos y así poder salir a algún lado, en ese momento se me ocurrió una brillante idea.

-¿Y si vamos a la playa?- sentí como mi rostro se ilumino ante lo que dije.

-Si, no seria mala idea- Isaac dio su opinión al respecto.

-Si maestro no seria mala idea- el pequeño ruso se dirigió a su maestro con una sonrisa en los labios.

-Si no estaría mal Camus- el pelirrojo miro al acuariano a los ojos.

-¿Camus?- me acerque a el, no parecía estar de acuerdo.

-...Si digo que no, voy a quedar como el aguafiestas del lugar, así que si, por que no...- no parecía molesto así que tome eso con mas tranquilidad.

-Bueno...oh espera...- me detuve antes de que terminara mi oración, había recordado algo.

-¿Que pasa Nilo?- el pelirrojo me cuestiono de la manera menos agradable posible.

-Es M-I-L-O, MILO- di un gran suspiro después -Lo que quería decir es que no tenemos trajes y mucho menos bloqueador, etcétera.

-Eso no es un problema, podemos comprar eso en la entrada de la playa todo lo que necesitamos- me lanzo una mirada intentando decirme "Tengo mejores soluciones".

-Como sea, sólo vámonos ya-abrí la puerta y espere que todos salieran.

Tomamos un taxi para llegar pronto a la playa de Niza, nos tardamos unas 3 horas, pero logramos llegar a tiempo. Efectivamente había una tienda especial para productos playeros, yo estaba mirando los trajes, a lo lejos están Hyoga e Isaac viendo pistolas de agua, Camus estaba viendo las sandalias y Surt estaba comprando todo lo demás, me acerqué a él peliazul para ver más de cerca lo que hacía.

-¿Ya te decidiste?- me acerqué a su oído.

-No, no veo una que me guste...aunque, sólo la ocuparé un día, así que no veo la necesidad de elegir uno en específico.

-Nadie asegura que no volvamos a venir- le dirigí una sonrisa.

-Tienes razón, de igual forma nose cual comprar- seguía teniendo inquietud, así que decidí ayudarle.

Comencé a buscar un par que le gustará y que le quedará, solo encontré dos pares que eran para los duendes, dejé a Surt a su suerte, pero por desgracia hice lo que creí nunca hacer... pedir ayuda a la pelirroja.

-Esper...ejem...digo Surt- trate de nivelar mis palabras para no provocarlo.

-¿Que pasa Archer?- se volteó a mi con una sonrisa.

-El Milo, arg como sea, sólo lo dices para molestar, da igual necesito tu...- antes de poder terminar mis palabras, una sensación de asco me invadió.

-.....-

-Ufff... necesito tu ayuda...- tuve que hablar entre dientes.

-¿Qué dices, no logro escucharte?- una sonrisa más burlona se manifestó en su cara.

-Que necesito tu ayuda sordo- tuve que responderle más claro.

-Ya te había oído, sólo quería escucharte decirlo-

-Si que eres de lo peor-

-Lo se, gracias, ahora dime para que me necesitas- dejo lo que estaba haciendo para mirarme.

-Te necesito para ayudar a Camus a buscar un par de sandalias- relaje mi ceño, nose como Camus aguanta tener el ceño fruncido, a mi me duele.

-Esta bien, tu busca ahí y yo aquí, de acuerdo- me señaló una estantería que estaba detrás de mi.

-Ya que- me di la vuelta y comencé a mirar por todos lados.

Vi un par que me gustó para mi pero ninguno para el acuariano. Seguí buscando hasta chocar con una persona.

-Lo siento- una delicada voz me saco de mi concentración, era una joven de tez clara y cabello rosa.

-No, discúlpame a mi, estaba distraído buscando unas sandalias jejeje- coloque mi mano en mi cabeza.

-¿Quiere que le ayude?- ella se ofreció muy amablemente.

-Eh? No, no, no te voy a pedir algo asi- levante las manos y las moví de derecha a izquierda.

-Insisto- me sonrió para después buscar un par.

-Pero no son para mi- comencé a rascarme el cuello.

-¿Para quien es?- me miro un poco desconcertada.

Dirigí mi mirada hacía Camus, el cual se volteó inmediatamente después de que yo lo mire, se podría decir que me estaba observando mientras hablaba con la chica.

-Por cierto no me has dicho tú nombre- volví a volverme hacía la joven.

-Que tonta de mi parte, soy Medb, un gusto...- su expresión cambio de vergüenza a extrañeza.

-Yo soy Milo, encantado- le extendí mi mano y ella la acepto, en un momento de reojo vi como Surt aprovechaba la situación para acercarse a Camus.

Sin querer comencé a apretar la mano de la chica.

-Ya...ya puedes soltar mi mano...- su expresión cambio a una de dolor.

-Ah? Lo siento...yo...- di un fuerte suspiro de que seguro lo habrán escuchado el peliazul y compañía.

-No importa, ya estoy acostumbrada- una sonrisa nerviosa se manifestó en su rostro.

Notas del capítulo.

XD hola, ya me había tardo en publicar, pero ocurrieron muchas cosas D:, bueno solo quería decirle que me gustaría responder algunas de sus preguntas o dudas XD así que dejenlas en los comentarios.