Robot

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Aún recordaba la eufórica sensación recorriendo su sistema como los peces en la cristalina agua de los ríos, aún sentía la vibración de su buster cargándose y el calor del disparo que estaba a punto de soltar hacia aquel hombre.

"¡Espera! ¡¿Olvidas que un robot no puede dañar a un humano?!"

"YO SOY MÁS QUE UN ROBOT ¡MUERE WILY!"

El deseo de libertad que llenó su cabeza y el as de luz que avanzó lentamente iluminando el rostro del viejo que esperaba aterrado su muerte.

Fue cuestión de milisegundos para que el disparo le atravesara y lo asesinara al instante arrebatándole su último suspiro, haciéndolo golpear el suelo con fuerza dejando menos que una mirada muerta.

"¡Wily!" exclamó nada más ni nada menos que su némesis que simplemente no había llegado a tiempo para salvar a su creador y padre.

Con su trabajo hecho, dio media vuelta sin importarle a quien dejaba atrás y lo que había hecho hacía unos segundos junto a los sollozos del otro robot que se había presentado.

Había vuelto a casa pero no recibió la bienvenida que había esperado.

Su hermana lo observaba con terror, temblando cuando lo veía acercarse, con lágrimas recorriendo sus mejillas.

"Roll, escúchame" rogaba abriendo los brazos.

"¡Alejate!"

Su padre, Thomas Light protegió a la pequeña mientras dirigía su azulada mirada a lo que aún era su hijo.

"Rock, hijo, sabes que... Sabes que no puedo permitir esto"

"Pero hice lo correcto"

"No..." respondió entre lágrimas

¿Existe un dolor más grande que ver a tu padre desmoronarse ante tus ojos por tu culpa?

"Sabes que te amo Rock" dijo acercándose lentamente al pequeño "Eres mi hijo y nunca he dejado de amarte" lo tomó entre sus brazos, lo abrazó con fuerza llevando su mano a la nuca del menor "Pero no puedes seguir..." Buscó con delicadeza el interruptor que apartaría de su lado a su hijo para siempre "Lo siento"

"Yo luché por ti..." dijo su hijo entre lágrimas.

Thomas se alejó para verlo a los ojos sintiendo el más grande dolor que alguna vez sintió mientras su perfectamente blanca bata se manchaba de carmesí.

"Yo luché por ti ¿Y así me pagas?"

El hombre no pudo hacer más que alejarse viendo la imagen borrosa de su hijo apartar la mirada, el aire poco a poco faltaba y no pudo mantener el equilibrio por lo que cayó y trató de sostenerse con su mano en el suelo.

Podía ver la sangre manchar tanto el suelo como sus ropas sintiendo la fuerza abandonar su cuerpo.

"¡Maldito!" gritó la rubia corriendo hacia su hermano levantando su escoba dispuesta a acabar con la vida del bombardero azul.

Sin embargo, el chico sostuvo la escoba y se la arrebató para lanzarla lejos, luego, golpeó a su hermana con la mayor fuerza que su brazo le proporcionó haciendo que la chica cayera.

"¡No me obligues a hacer esto Roll" exclamó apuntando su Mega Buster hacia su hermana cargando su arma para acabar con ella de un solo golpe.

La rubia observó con terror como su hermano estaba dispuesto a asesinarla ahí mismo sin piedad.

Pero para suerte de la chica, el Dr. Light no había perdido toda su fuerza aún, lo poco que le quedaba lo usaría para salvarla. Corrió hacía el chico de armadura azul y se lanzó sobre él desviando el disparo que destrozó parte del techo.

"¡Corre Roll!" gritó mientras luchaba con su hijo.

La rubia apartó la mirada, se levantó y salió del lugar abandonando a su padre.

Avanzó por los pasillos lo más rápido que sus pies le permitieron consciente de a quien dejaba atrás.

Light sonrió al saber que con un poco de suerte, su hija estaría a salvo y con eso en su mente cayó al suelo dejando que el aire escapara de sus pulmones y las lágrimas de sus ojos.

Rock se puso de pie y contempló el cuerpo de su padre en el suelo y frunció el ceño.

Se acercó a él para limpiar la pequeña lágrima que recorría su mejilla.

Le dedicó una última mirada sin resentimiento y abandonó el lugar sin preocuparse por todo lo demás.

El eco de sus pasos resonó por los silenciosos pasillos, dejó huellas rojas a medida que caminaba, en el fondo se preguntaba si volvería a ver a su hermana algún día, se preguntó también si esta le mostraría el mismo terror en su rostro combinado con la impotencia de no poder defenderse.

No lo sabía en realidad, sin embargo, si podía ver un rostro similar, entonces valía la pena continuar.

×××

La chica había llegado finalmente con ayuda de Rush.

Tropezó y cayó sobre el lodo que se había formado por la incesante lluvia que caía esa noche y que la había empapado completamente.

Se levantó con su vestido completamente sucio y cruzó el extenso jardín hasta llegar a la puerta principal.

Se paró de puntitas para alcanzar el timbre y esperó abrazándose a sí misma no solo por el frío, sino también por el miedo que de repente sentía.

La puerta no tardó en abrirse y una chica rubia de cabello rizado apareció completamente sorprendida no solo por la repentina visita de Roll, sino también por su aspecto.

-Roll- exclamó -¿Qué sucedió?- cuestionó invitando a pasar la chica junto a su acompañante canino.

-Kalinka, ¿Donde está el Dr. Cossack? Necesito hablar con él-