Venus

Capítulo 1

Llega la noche y se muy bien lo que tengo que hacer, tomó mi toalla y entró a la ducha. Luego de 30 minutos decidí a vestirme, puse mi ropa interior negra de encaje, un lindo liguero y un vestido tinto pegado a mi cuerpo.
Los hombres son tan fáciles de seducir, un cuerpo bonito, maquillaje perfecto y linda sonrisa. Sólo es cuestión de mover un poco mi trasero para que muchos ojos se posen sobre mi; dar unos cuantos guiños para que me deseen y oh no, aunque soy una prostituta jamás vuelvo a acostarme con el mismo tipo a menos que sea muy bueno en la cama y yo lo disfrute mucho.
Al llegar al club me gano unas cuantas miradas y aprovecho para acomodar mis pechos de forma que resalten un poco más. Al terminar de hacerlo levanto mi mirada y descubro que un joven bastante atractivo me veía directo a los ojos así que decidí jugar un poco y sonreír mientras me "sonrojaba"; él sólo me guiño el ojo y yo seguí mi camino.

Narrador omnicente:

Venus se fue directo a su habitación pues tenía quién le llevaba al mejor postor sin que ella tuviera que hacer más que acostarse con él elegido y disfrutar de una buena noche de placer.
Mientras tanto afuera muchos hombres discutían por la cantidad que estaban dispuestos a pagar por una noche con Venus hasta que un joven apuesto grito $10, 000 pesos y todos decidieron parar de gritar. Venus tenía un buen postor esa noche, guapo y dispuesto a pagar una buena cantidad por una sola noche.

Venus

Estaba observandome al espejo cuando escuché que la puerta se abrió de repente y al voltear me sorprendí al encontrar un muy apuesto joven pues la mayoría de los hombres eran feos y un poco gordos o viejos, tampoco negaré que han habido muchos guapos y hábiles en la cama porque he gemido de placer debajo de esas sábanas.

-Hola, soy Venus. Mucho gusto tenerte aquí conmigo esta noche, te garantizo que esta será la mejor de toda tu vida.-
-El gusto es mío guapa, realmente es lo que todos dicen al nombrarte y no lo pongo en duda.-Sonríe hacia Venus-

Narrador omnicente:

Y sin más Venus se lanzó a sus brazos, comenzó a besarlo apasionadamente mientras que con sus manos tocaba su cuello, él dirigió sus manos al trasero de Venus y ella lo levanto un poco por instinto, lentamente el comenzó a besar su cuello y a subir su vestido; al quitarlo por completo admiro el cuerpo de Venus unos segundos para después comenzar a besar sus pechos, se deshizo de su brazier y sus bragas, la recosto sobre la cama para comenzar a besar todo su cuerpo, Venus sólo jadeaba de placer pues era bastante bueno y sabía como excitarla sin embargo ella no jugaba de esa manera. Rápidamente hizo que el se parara para quitarle la ropa y tomar su pene entre sus manos, sin perder tiempo comenzó a masturbarlo viéndolo a los ojos, así estuvo hasta que su cliente de esa noche estaba a punto de correrse, en ese instante se detuvo cortandole la excitación para después incarse frente a él y comenzar a chupar su pene, lo metía y lo sacaba, daba pequeñas lamidas y succionaba sin lastimar hasta que el le avisó que iba a correrse; Venus sacó el pene de su boca y dejó que el se corriera sobre sus pechos.
Le sonrió coquetamente y lo recosto sobre la cama, se subió encima de él y comenzó a frotarse viendo la cara de placer que ese joven atractivo ponía, después de unos segundos más así levanto un poco su cuerpo para proteger el pene de su cliente y después montarlo de arriba a abajo, gemia de placer y comenzaba a sudar un poco y ni hablar de su cabello que estaba más alborotado que un adolescente lleno de hormonas. Se bajó del cliente, este se levanto y la posicionó contra la pared para después penetrarla duro y rápido hasta que se corrió y salió de Venus.
Al darse cuenta ya era la 1 am así que tomó su ropa, se vistió y le dio las gracias a Venus asegurandole que era la mejor noche de su vida. Ella estaba acostumbrada a que fuera así siempre, sexo, placer y adiós.