Secrets

Capitulo 12

Saa-kun, Saa-kun...
Primer día y ya bobeaba por un chico.

¡Que lindo! La sonrisa de tonta nadie me la quitaba.

Era ya la salida y todos me esperaban en la limosina, alguien me tomo del brazo y cuando me di cuenta era Saa-kun. Sonrei.

— Quería despedirme de ti Kazu-chan—

— Aquí me tienes... T-tengo que subir, se enojaran conmigo si-...—

—¡Kazuki! — gritaba mi padre.

R-rayos...—Tengo que irme— Le dije.

Subí y todos estaban en lo suyo. Menos mi padre quien me miraba enojado.

— No tienes mi consentimiento para socializar con otros chicos. —Dijo.

— Solo...es un amigo...—

—No me interesa—

—Reiji-kun~ que duro eres~ —

Yui P.O.V

Agh... Estos dias han sido difíciles. Empiezando por Kazuki, y para variar parece que ya se enamoro de alguien. Que ilusa, pero bueno. Que haga lo que quiera.

Desde la ultima vez que vi a Karura me he sentido algo rara... Como si  no fuese yo al cien por ciento.
Algo esta pasando, estoy segura...

—Yui—

Voltee al escuchar que me llamaban. Era Ruki. —¿Que Pasa?—

No dijo nada. Solo se acerco a mi y bebió de mi sangre. No me opuse, me excitaba un poco él tener sus colmillos dentro de mi...

Esperen. ¿Dije excitar?

¡Que!

Después de tomar lo que él necesitará me abrazo. —No quiero que seas de ese Sakamaki Yui, te necesito...—

Esto suena interesante.

¿Porque parar con Karura? ¿Porque no tener a Ruki también? Siempre y cuando él no se entere no habrá problema.

Que empiece él teatro.

Correspondí él abrazo. —Yo también quisiera a Ruki-kun...pero...Reiji...además, le daría muchos celos ya que tu fuiste él primer padre de Kazuki...— Murmuré aferrándome aun mas a él.

—No me importa. Aun así te quiero para mi, él no se enterara. — Me miro a los ojos y pude ver aquellos orbes grisáceos que alguna vez me hicieron sentir segura y amada. Y sin mas, nos fundimos en un tierno beso. . .

Y así otro mas cayo rendida a mi

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Él tiempo seguía pasando. Kazuki en la cena no paraba de hablar de ese tipo que la trae loca y Reiji claro, le prohibió verlo.

Era Sábado por la tarde. Desperté de mi cama y note que ese cuatro ojos seguía durmiendo, llevo días sin ver a Karura y mi cuerpo pide a gritos verlo, sentirlo dentro de mi. ¡Agh!
Con cuidado de que no me escuchara Reiji intente salir de la cama, oh si, intente. Cuando me di cuenta sus brazos me tenían aferrada.

—¿A donde vas?— Pregunto seductoramente.

Agh.

— A dar una vuelta — Murmuré.

—¿Y si te quedas aquí?—

Que asco.

Me levate de la cama y me cambie de ropa ignorándolo por completo. — Regreso en una hora o menos- le dije con una sonrisa para fingir.

Estaba cerca de un parque cuando de pronto sentí un enorme golpe en la cabeza que me hizo caer. Me sostuve de un árbol como pude, gemía de dolor. Sentía que algo se apoderaba de mi.

Karura.

Lo necesito.

Deje a un lado la caminata y simplemente me aparecí en su mansión, me recibió Shin y casi me tumbe en sus brazos.

—Oi, ¿Que tienes?— Preguntaba Shin desconcertado.

—Karura...—

—¿Nii san? —

Sentía impaciencia, como si algo oscuro brotará de mi y no lo pudiese controlar.

Mi vista se nublo, lo ultimo que creo que vi fue la silueta de Karura...