° 3

31 4 0
                                    

Antes de ir a su primer caso de campo junto a los detectives, Linna tuvo que hacer una especie de entrenamiento en el cual le enseñaron cosas básicas, por si surgiese alguna emergencia o como podía reaccionar ante una de ella, aunque solo fuera a fotografiar o tomar evidencias para ayudar a la investigación, tenía que tener una preparación para ello. Se le había mencionado que debía de tener una mentalidad fuerte, por que se encontraría con escenarios muy desagradables, pero confiaba en si misma y sería fuerte para ello.

Durante todo una semana estuvo en completo entrenamiento, primero fue orientada en el uso de armas a cargo de Jean Kirschtein, quien enseño lo básico del uso de las armas, y con quien congenio rápidamente, aunque descubrió que él y Eren no se llevaban bien del todo. Después estuvo con Armin Arlet, quien la instruyo en los primeros auxilios y le enseño tácticas de investigación que le servirían en su investigación, Linna dedujo que Armin era muy hábil tanto en la medicina forense como en las investigaciones, pero este se inclinaba más por lo primero. Después al último repaso acerca de reglas y derechos con Eren por que era Perito auxiliar en las investigaciones, a pesar de su juventud era alguien que destacaba en su campo, pero seguía siendo un aprendiz. 

Después de que pasaron trabajando bajo presión todos estos días, finalmente llego el viernes y con eso daba paso el tan ansiado fin de semana, todos decidieron  ir a cenar y beber unas cervezas para darle la bienvenida a Linna al equipo.

—¡Bienvenida al Equipo Linna!—dijo Eren alzando su tarra de cerveza.

—Espero que no te fastidies de nosotros, en especial de este tipo—dijo Jean apuntando a Eren.

—¡Cierra la boca maldita cara de caballo!— exclamó molesto Eren.

—No te preocupes por ellos Linna, así los verás discutir todo el tiempo, pero espero que nos llevemos bien todos durante este tiempo, cualquier duda que tengas no dudes en decir—dijo amablemente Armin, en eso se alguien más se sienta en la mesa.

—Así es mocosa, no hagas nada por tu cuenta, siempre pregúntanos a cualquiera de nosotros, una vez empecemos a ir a investigar debemos andar con cautela, ¿entendido?—dijo el inesperado capitán Ackerman.

—Claro que sí capitán, y chicos... Gracias a todos, y daré lo mejor de mi durante el tiempo que este trabajando con ustedes—dijo Linna con una sonrisa.

Así después de un rato, Eren acabo ebrio al igual que Jean, estos fueron llevados a su casa por Armin, al final se quedaron Linna y el capitán solos.

—Disculpa a esos idiotas, siempre terminan así—dijo mientras sacaba una cajetilla de cigarros-

—No se preocupe—en eso timbra su celular y era una llamada de Eliza.—¿Donde te encuentras? ¡Eliza! ¡Espera! Iré enseguida, por favor no te muevas ¿si?—dijo con preocupación.

—¿Todo bien mocosa?—pregunto el detective.

—No... al parecer Eliza esta ebria en una discoteca, tengo que pasar a buscarla, disculpe me tengo que retirar—en eso se alejo corriendo y se fue rumbo a la parada de autobuses, su carro se había descompuesto.

—¡Oi! ¡Mocosa espera!—en eso la siguió hasta la parada de autobuses y esta se encontraba de pie, sin ninguna de señal de un autobus cercano y de ningún taxi, estaba desesperada.

—¡Capitán! ¿Me siguió hasta aquí? Pero...¿su rodilla? ¿esta bien?—dijo con sorpresa la chica.

—si esta bien, pero al parecer tu no, yo iré contigo por la otra mocosa—dijo sin más el pelinegro.

—Lo siento, pero no quiero quitarle su tiempo—dijo algo tímida.

—Tsk, no me quitarás nada, pero es muy tarde para que una mocosa como tu ande sola por las calles, así que yo te llevaré en mi auto, ¡Sígueme!—la tiro del brazo y esta accedió sin decir ninguna palabra.

Una vez en el la discoteca, ambos se separaron y acordaron encontrarse cerca de la entrada, en eso Linna comenzó su búsqueda por alrededor de 15 minutos, hasta que llegó a una mesa donde estaban algunos compañeros de la universidad de Eliza.

—Hola chicos, ¿Saben algo acerca de Eliza?—preguntó a los chicos.

—Estaba con nosotros bebiendo, pero se acerco un tipo que la invito a bailar y se fueron juntos hacia la pista— dijo una chica.

—Ya veo... Gracias—en eso se dirigió a la pista para ver si la encontraba, todavía sin ningún éxito, decidió ir a los sanitarios tal vez si tenía suerte, podía encontrarla.

Una vez dentro de ahí, aprovecho para retocar un poco su maquillaje, en eso ve que una chica que intenta entrar a un cubículo, y decide ayudarla.

—Esta atascada la puerta—dijo mientras intentaba abrirla.

—¡Oh mira! Ya se ha hecho desocupado uno, gracias—dijo la chica.

En eso recibe una llamada del capitán, preguntando si la había encontrado y esta negó. Decidió llamar de nuevo al celular de Eliza, fue ahí cuando escucho que timbraba uno cerca de ahí. Su expresión cambió al darse cuenta que provenía del baño que intentó abrir hace unos minutos.

Decidió armarse de valor e intentó abrir sin éxito, cuando se acerco donde se encontraba un extintor y golpeó la puerta, mientras que seguía timbrando el celular, no podía dejar de temblar por el miedo, pero recordó que debía ser fuerte en cualquier situación.

En en eso unas chicas le decían que se detuviese y hasta que finalmente la abrió y encontró a Eliza cubierta de sangre, en eso todas las demás chicas que se encontraban dentro del sanitario, salieron corriendo del lugar y prontamente se propagó el pánico y la noticia por todo el lugar.

Se quedó en shock al verla así, no se explicaba como pudo terminar ahí de esa manera. En eso entro el capitán Levi y observó la escena.

—¡Oí mocosa! no te quedes así, llama a una ambulancia, todavía respira... —dijo mientras revisaba a la chica que yacía en el suelo.

—Cla..claro capitán—reaccionó inmediatamente e hizo la llamada.

No tardo en llegar la ambulancia al lugar, en eso el capitán llamó a la agencia para que enviarán algún equipo disponible, ambos se fueron al hospital lo más pronto.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 29, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

El Pretendiente ESTADO: EN PAUSA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora