Akatsuki [NaruSasu]

•Capítulo 1•

▪5 años.▪

Mi nombre es Naruto Uzumaki, y cuando con tan sólo 5 años, me conciencié de que soy odiado por todo el mundo.
Día a día recibo comentarios de gente desconocida, me llaman "cosa", "monstruo" o "asesino", y siempre que hablan de mí, dicen que es un tema tabú.
Simpre ignoro esos comentarios, aún que muchas veces me cuesta. Evito problemas con las personas, pero siempre los comienzan otros.
No puedo hablar con nadie, ni con niños o niñas de mi edad, porque si inicio una conversación, vienen sus padres y los alejan de mi diciendo "te dije que no te acercaras a ese niño".

▪8 años.▪

-La academia...-
El sonido del despertador me sacó de mis pensamientos.
Me preparé, desayuné y me dirigí hacia mi destino.

Por el camino seguía sintiendo esas miradas. Las mismas de cada día.

Pasaron los días y conseguí adaptarme. Hice "amigos", hacíamos las mismas travesuras y ellos no me evitaban, por lo que nos llevábamos bien.

Pasaron los meses y yo ya vagaba libremente por la academia, perdí la vergüenza e inseguridad.
En ese momento yo tenía un objetivo, el cual se llama Sasuke. Oí que es del clan Uchiha, y parecía estar orgulloso de eso y de su familia.
Días más tarde su sonrisa desapareció, dejando una expresión sin vida.
El me avergonzaba delante de toda la clase, llamándome perdedor y noqueadome (cosa que ya hacía, solo que con un poco de inocencia). Me enfadaba tanto que me hervía la sangre, pero cómo cualquier otro niño, mi manera de defenderme eran las peleas verbales o huyendo de la situación.

Después de este "resumen" de mis primeros ocho años, empezará mi historia.

-Oye, ¿has oído lo de el clan Uchiha?-.
- Si... Dicen que sólo ha quedado un superviviente.-.

Esas palabras me desconcentaron. Se supone que nuestro compañero es de ese clan, y está aquí.
Lo miré. Su aura es tan oscura cómo él mismo. Es muy notable que ha perdido a toda su familia.
Me senté en mi pupitre.
Entró el profesor, que ya lleva unos cuantos días aquí. Y no es una excepción de la gente que me desprecia.

Después de calmar a la clase, explicó lo que haríamos hoy.
-Bien, chicos, hoy haremos un combate amistoso. Saldremos al patio y lucharán, será un uno contra uno.-.
No faltaron las quejas.
Salimos todos al patio y Iruka empezó a explicar lo que teníamos que hacer.
- En una pelea entre ninjas de la misma aldea, siempre se tiene que hacer este sello...-. Cerró su mano, sacando los dedos corazón, índice y el dedo gordo. - Es una forma de decir que es un combate amistoso. Diré los nombres de dos personas, estas lucharán y tendrán que hacer ese símbolo antes de comenzar a pelear.-.
Nombraron los nombres de dos de mis amigos, Chuoji y Shikamaru.
Entre esos dos hay un lazo indestructible. Son muy buenos amigos y se defienden el uno al otro. Es difícil imaginar que van a pelear entre ellos.

- Que fastidio...- La frase célebre de Shikamaru.
Ambos salieron y hicieron el sello.
-Buen combate, Shikamaru.-.
-Igualmente Chuoji.-.
- Bien... ¡Comiencen!- dijo Iruka.
- ¡Me rindo!-. En menos de un segundo Shikamaru abandono.
- ¿Cómo?-, preguntó Iruka-sensei.
- ¿Por qué, Shikamaru?- siguió Choji.
- Simplemente prefiero perder a tener que pelearme con un amigo... Sino, sería un fastidio...-.
- Esas palabras han sido muy bonitas de tu parte, Shikamaru. Recordad chicos, los compañeros están por delante de todo. Y bueno... No hay remedio... Chuoji, Shikamaru, haced el símbolo de amistad. Juntad ambos vuestros dedos índice y corazón y estrechadlos.
Y así hicieron.
- Gracias.- dijo Chuoji con una sonrisa.
- Solo he dicho la verdad.- le respondió de la misma manera.
Ambos salieron "de el campo de batalla".
- Muy bien. Entonces ahora les tocará enfrentarse a Sasuke Uchiha y Naruto Uzumaki.-.
Ambos fuimos a nuestros respectivos sitios.
Siendo yo, le gritaría "te voy a machacar" o algo similar, pero en verdad dudo que quiera que alguien empiece a molestarle después de la exterminación de su clan.
-Rindete, perdedor.-.
-¿C-Como? ¡El perdedor aquí eres tu! ¡Estaba pensando en ser mas blando contigo, pero has hecho que cambie de opinión!-.
-Venga, chicos.- Iruka intervino.-Hagan el símbolo.-.
Ambos hicimos lo que nos mandaron. Nos miramos con odio, yo por lo que me dijo, y él por su clan.
- Muy bien... ¡¡Comiencen!!-.

No pasaron ni cinco segundos cuando yo me encontraba debajo de él, mientras me apuntaba con su puño.
Todos los presentes quedaron boquiabiertos, incluido nuestro profesor, y como es de esperar, las chicas empezaron a gritar como locas alabando a Sasuke.
Yo en lo único que pude fijarme es su mirada. La misma con la que me miran todos los de la aldea, ojos que desprenden odio.
-Ganador, Sasuke. Ahora hagan él símbolo de la amistad.-.
N

os levantamos, pero ninguno de los dos tiene intenciones de hacer él "símbolo".
-¿Por que...?- todos me miraron preocupados porque empecé a llorar.
-Hmph, que mal perder tienes.-.
-¿¡¿Por que todos me miran mal?!?-. La preocupación creció, y Sasuke se preguntaba que me pasaba. -¡¡¡Incluso tu, que te vi como un igual!!!-.
Lo único que pude hacer es secarme los ojos, y por acto, salir corriendo.
Salté la valla, y mientras se escucha a Iruka llamandome.

▪11 años▪

Ya son los exámenes para ser genin, cosa que me preocupa...
El examen consiste en hacer un clon, si lo haces a la perfección, te aprueban y te dan la placa.
El problema es que no se hacer clones, pero yo quiero ser ninja, o más bien, necesito serlo...
-Naruto Uzumaki, entre a la sala.-.
Mi vida aún no ha cambiado. Desde que me quejé de las miradas de odio, mis compañeros se alejaron cada vez mas, y mi maestro empezó a evitarme.
Aquellos que se reían de mi, ahora lo hacen más que nunca.
-Voy.-.
Entré en la sala.
Ahí estaba él hokage y Iruka.
-Naruto, ya sabes lo que tienes que hacer. Comienza cuando quieras.-. Dijo el Hokage. El siempre me habla con una sonrisa, incluso cuando me meto en líos. Muchas veces me pregunto que habría hecho sin él.
-¡Bien!-.
Y como fue de esperar, salió él peor clon que podría haber existido.
-Naruto...-.
Lo único que pude hacer es poner cara de pena. Se perfectamente que no vale la pena intentarlo más.
Salí por la puerta y me fui del edificio.

En la sala:

-Iruka, ¿tu has intentado que Naruto aprenda?-.
-Claro que si, Hokage-sama, ¿por?-.
-Pues porque simplemente todos los alumnos han podido hacer un clon perfecto, pero Naruto es él único que no lo ha hecho.-.
-Perdone, pero enseñé a todos mis alumnos por igual.-.
-¡¡¡No mientas!!! Desde mi despacho se ve perfectamente él patio de la escuela. Pude ver como ayudabas a todos los niños excepto a él.-.
Se formó un gran silencio.
-Perdón...-.
-Iruka, no puedes tenerle rencor a un niño... El no hizo nada.-.
-Lo se, pero cada vez que lo veo, no puedo evitar recordarlos.-.

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-Tsk, no lo entiendo, siempre me sale todo mal...-. Me encuentro en él bosque, caminando para despejar mi mente. -Todos me odian y además no puedo ni siquiera hacer un simple clon... Ahg, que asco de vida...-. Paré en seco y dejé de hablar cuando un sujeto apareció frente a mí de la nada.
-¡Hola!-.
-¿¡Eh?! ¿Cuando...? ¡Donde...!-.
-Te preguntarás de donde he salido, ¿no?-. Yo solo asentí. -Pues eso no importa. He venido aquí porque no he podido evitar ayudarte en tu situación.-.
-¿Cómo?-.
Aquel hombre con una mascara en espiral empezó a decirme que debía hacer.

-... ¿Entendido?-.
-¿Seguro que si le digo eso, me lo contará?-, mis dudas crecían, no se si hacerlo o no...
-Si, estoy seguro, ah, por cierto, un hombre te pedirá que robes él pergamino prohibido. No aceptes, ¿vale? O sino él plan no saldrá bien.-.
-V-vale...-.

°•Tres estrellas para el capítulo 2 •ω•.