CELOS

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-Quienes son y como los conoces- Dijo en tono autoritario Alfred mientras miraba a Arthur, el cual sabía que Alfred estaba molesto por la declaración del indo, mientras ellos estaban hablando Gilbert trabajaba como mánayer, ayudando al club de natación para la competencia de la tarde

-El moreno se llama Kalu fue mi compañero y novio cuando estudie en india y Howard era mi mejor amigo en Inglaterra, decidimos salir, pero al final solo parecíamos dos hermanos así que terminamos-

Alfred solo dio un fuerte suspiro miro al menor y solo le dio un beso en la frente – Arthur recuerda que eres mi novio- decía dulcemente – Así que el único que puede tocarte soy yo ok? - este solo asintió y se fue a ser sus deberes de mánayer

Pero había algo que le molestaba, o mejor dicho le preocupaba, Kalu nunca se rinde y cuando ellos estaban, era porque este siempre insistía y por qué sabía que él era un omega muchas preguntas se vinieron a su mente y como si fuera arte de magia un mensaje de Kalu el cual le pidió una cita para verse

Este solo al ver su mensaje le contesto con un ok, Arthur sabia lo posesivo que él era en el pasado y antes de irse -Gilbert quiero que me hagas un favor...............

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Ya eran las 2 y tal como dijo Kalu, Arthur fue a la cita, quería decirles que lo olvidara, que ahora tenía a otro, pero cuando quería tocar el tema este siempre lo cambiaba ya habían pasado 1 hora y a las cosas seguían igual hasta que Kalu hablo

-No crees que sería mejor si regresamos-

-Ya te he dicho estoy saliendo con Alfred y no me gustas-

-Hay mi Arthur tan lindo y leal como siempre y que tal si te compartimos-

-Estás loco, creo que no fue idea venir adiós- Agarro sus cosas y salió del lugar, pero Kalu lo agarró del brazo y se lo llevo – Que te pasa suéltame-

-No, ya te perdí una vez y no lo are otra vez- Arthur estaba asustado jamás lo había visto tan serio, pero aun así salió del agarre de este, pero Kalu esta vez lo lanzo con fuerza contra el muro – No te dejare así que mejor rinde- No pudo terminar la frase ya que alguien de atrás lo golpeo

-No me agradas, aléjate de mi novio- Decía un americano furioso que lo estaba agarrando del cuello al pobre hindú, dio un vistazo a su pareja la cual aun seguía en el piso por el shock, lo vio bien y pudo notar como de sus cabellos rubios había marcas carmesíes, marcas de sangre que fueron ocasionadas por el golpe -Maldito-

- No Alfred, te votaran del grupo de natación- Corrió lo más rápido para detenerlo, Alfred lo miro enojado, porque lo defendía, es que ¿aún tenía sentimientos por él? Eran preguntas que se Asia a si mismo soltó al moreno y cogió a Arthur para salir de allí - ¿Porque estaba contigo?

-Solo íbamos a hablar-

-Pues qué lindo hablan, vamos a lavar esa herida –

En el rostro de Alfred se notaba la amargura y la ira, eran celos o es que estaba molesto por que no confió en el para decirle que venía, sin duda alguna eran las dos.

-Dame tus muñecas- Decía al ver como estas estaban, rojas y marcadas por el duro agarre de Kalu, Arthur no quería enseñarlas ya que capaz este volvía y golpeaba al tipo – No are nada peligroso solo enséñamelas –

Sin más Arthur le enseño las muñecas estaban rojas, y este estaba rojo de la vergüenza, jamás nadie le había puesto un dedo encima y que Alfred las viera era peor cerro los ojos al sentir como Alfred las tocaba, pero al sentir los labios de su pareja este los abrió de golpe

Alfred empezó a dejar marcas en las muñecas de Arthur -Recuerda yo soy el único que puede dejarte marcas- Lo agarra de las manos y se lo llevo a su cuarto, donde lo tiro en la cama y empezó a besar, al principio Arthur se resistió, pero poco a poco se dio por vencido

Las ropas empezaron a estorbar y el mayor empezó a quitarle la ropa, este al notarlo se sonrojo, tenía vergüenza, quería pararlo, pero al mismo tiempo quería ser tocado por él, Alfred por el contrario empezó a dejarles marcas notorias en el cuerpo del pequeño, su piel era tan blanca que estaba seguro de que estas seguirían aquí

-Hey parejas de tortolos- Esa voz era la de Gilbert -Dejen el sexo que ya va a comenzar la competencia- en ese instante Alfred se paró se cambió y le dio un bezo en la frente

-No te preocupes lo masacrare en la competencia – Dijo con una sonrisa y salió de la habitación 

NO LE TEMAS AL AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora