Lyna

Capítulo 3- A veces la calma es peor que la tempestad

-¿COMO QUIERES QUE TE ENTIENDA? ME DIJISTE QUE ESTABAS BIEN- grita Cynthia , llevándose las manos a la cabeza- ¿Que se te pasó por la azotea?-

-Tantas cosas... Tantos momentos. Veo que no podéis comprenderme- se gira con cara de tristeza hacia Kirsht, que sigue con expresión inflexible mientras la observa- eres gilipollas. Ve a por la pizza antes de que te golpee. - El se encamina cogiendo la cartera que hay en la entrada mientras abre. El pizzero tiene dos cajas en las manos e intenta mantener una expresión de indiferencia, pero se nota que ha escuchado los gritos.

-Serán 45, 70 - dice, mientras Kirsht saca el billete de 50 y se lo ofrece. Cuando coge las pizzas el repartidor acepta el billete y saca una pequeña bandolera

-Quédate el cambio- el chico farfulla un gracias mientras Kirsht cierra la puerta, y vuelve a tirar su cartera en la entrada. Aprieta los dientes y vuelve a la sala, donde Cynthia da vueltas por la sala mientras Lyna está con la cabeza gacha acariciando al gato muy lentamente. 

-Tu no sabes lo que es enamorarse, nunca lo has sentido, nunca te has atrevido a hacerlo ,¿ y me quieres dar lecciones sobre ello?- parece que le susurra al gato, pero se escucha claramente.

-Tristemente crees que es amor, y el amor es correspondido por ambas partes- Cynthia mira a Kirsht, como si quisiera culparlo de todo. Se muerde el labio al ver como ambos la miran con ironía .

-Es la tontería mas grande que jamás podré oír- Dicen casi al unísono, para Lyna girarse dándole una rápida mirada a Kirsht y levantándose apartando al gato suavemente y cogiendo una de las cajas- 

-Ahora dejadme sola. Ambos- cierra tras ella la puerta de su habitación. La abre a los pocos segundos- Después de comer os quiero fuera de aquí, no hay objeciones- vuelve a cerrar la puerta, esta vez definitivamente.

Cynthia suspira irritada y se tira en el sofá, mientras repara en la presencia de Kirsht

-¿Traes la pizza? Gritar da hambre