Tengo puesta una camisa floja, color blanca con unas arcas como botones, sonrío por que se que es mi camisa favorita. Estoy recorriendo un camino descalzo y siento un poco de frio. El camino parece un poco largo, pero no me importa por que puedo recorrerlo tal y como lucia antes. Volviendo a tocar mi cabello y un poco más de carne en mi cuerpo, asi que realmente no importa cuanto debo caminar.
De repente salgo de ese camino y soy interrumpido escuchando unas voces y despierto en la habitación 333 luciendo como siempre sin cabello y delgado con mis ojos apagados viendo a pápa y a máma llorando a un lado mio.
Tengo una idea de lo que paso, pero aun asi me pregunto ¿a donde me llevaría ese camino?, ¿azul o calor? o tal vez silencio...
Vuelvo a dormir y despierto, no se cuanto tiempo ha pasado, pero se que no queda lo suficiente para perderlo, sobre todo aquí viendo como detienen en la puerta a mi amigo el cual al mirarlo de frente y escuchar de nuevo su nombre completo el que este tan aferrado a mi, me indica que ya es hora y se que es lo que debo hacer.
Con las pocas fuerzas que tengo me levanto, máma y pápa se acercan a mí y por primera vez siento que puedo decirles lo que yo quiero sin importarme su respuesta, sin pesor en mis labios y dolor en mi cabeza.
"¡oh!, deberíamos de sentirnos siempre así." "tan libres"... y no solo hasta el final.
Los tomo de las manos y hablo con mi inesperada fuerte voz.
-Se que los días no volvieron y no volveran hacer iguales, asi como se que ustedes no lo fueron y no lo seran.
Sus lagrimas empiezan a caer, justo lo que no quería, pero a la vez necesitaba. Si, necesitaba saber que mis padres no estubiesen vacios como siempre lo aparentaban.
Así que empiezo a contarles la historía, la historia de mi preciado atardecer y ellos escuchan detenidamente.
Ahora lo se, mi atardecer fue algo infantil, pero al final de cuentas siempre fui muy joven.
Ahora puedo hablarles naturalmente de mi preciado atardecer que es asi como nombre el día en el que me detectaron cáncer, osteosarcoma.
Ese día en el que perdí no solo mi salud, si no tambien a mis padres que insistian tanto en negar todo, pero ahora es demasiado tarde para más de eso.
Los estoy recuperando y se siente tan bien, no es coincidencía que el atardecer este por llegar otra vez, la diferencía es que esta vez es para llevarme a su lado.
Cuales serian mis ultimas palabras a ellos, no tenia ni las mas remota idea de que decirles, pero algo llamo mi atención.
Era el chico solitario el aparecio, ahora cerca mio y podía verlo el estaba a lado de su famoso libro la "llave azul" como le suelo decir el la llamaba (biblia) y la estaba tocando , siempre odíe ese libro.
Entonces entendí, si lo comprendí todo, sabía cuales debían ser mis palabras.
Asi que ví a mis padres a los ojos, esos ojos tan llenos de amor que pense nunca más volvería a ver.
Pero era el momento.
"Siempre que haya un atardecer yo estare ahí saben ¿por que?...
Por que hoy he descubierto y sé que somos eternos".
Fin.
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Somos Eternos
Espiritual¿Crees en el cielo?, ¿Crees en el infierno?. Yo solo creo en la eternidad. 27/04/2017 #193 10/12/2017 #225