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Nada más entrar en el piso me vine abajo, todos los recuerdos con Tay volvieron. Quería no pensar en ello, pero me era imposible.

-Que pasó? -Raquel vino abrazarme aún que me escape.

-Solo quiero estar sola.

Cerré la puerta del cuarto con fuerza. Después de dos horas encerrada pensé en salir, pero no tenía ningunas ganas de enfrentarme a mis compañeras.

-Vamos Am sal.- La voz de Jackson me asustó.- Quiero saber que te pasa, nadie me dice nada y tu llevas encerrada desde que llegué.

-No quiero salir.

-Entonces déjame entrar.

Me levante poco a poco, no quería abrirle, aun que el era mi único consuelo.

-Que ha pasado Amber?

-Tay.- Lo abracé justo cuando empecé a llorar de nuevo.

Entro conmigo en brazos al cuarto y cerro la puerta, estuvimos un ratos sentados en la cama. El me acariciaba la espalda y yo daba pequeños sollozos en su pecho.

-Que ha pasado con don perfecto?

-Lo hemos dejado.- Un hipo vino a mi mientras intentaba respirar con normalidad.- Llevaba engañándome casi un año o yo que sé.

-Y seguías con él?

-Lo quería, bueno más bien no quería pensar en que tu estabas lejos y el me ayudaba.

-Lo siento ratita, sabes que es mi trabajo.

-Lo sé, lo sé pero se me hace duro a veces y hago cosas idiotas.

-Hable con mi manager, puedo quedarme una semana más mientras preparo una nueva gira.

-Pero luego volveré a estar sola.- Lo miré haciendo puchero, por lo que el rió.

-Encontraremos una solución, ahora vamos a tumbarnos y a maldecir a Tay.

-No tengo tiempo para eso, tengo que ensayar.

-El qué?- Me miró raro, así que me reí de su mala memoria.

-Te lo dije ayer, tengo una presentación de baile mañana, es importante porque es posible que acabé siendo la coreografa.

-Cierto, gracias a eso la gente ama mis bailes.-Los dos nos reímos.

Sus fans tendrían que verlo antes de que yo le enseñara a bailar, era un desastre, no sabía ni cordinarse.

-Enséñame el baile.

-No, mañana tienes que venir a verme, sólo entonces lo verás.

-Pero pensaba pasar el resto del día aquí.- Hizo un puchero para luego empezar hacerme cosquillas.

-Vas con Raquel y Celeste.

-Enserio?- Asentí riendo.- Celeste no deja de mirarme mientras Raquel no para de preguntarme por mi dinero.

-Dame medía hora quiero estar segura que me lo sé.

Se levanto de la cama para irse, cosa que agradecí mucho. La presentación de mañana era importante y no quería que nada saliese mal. A pesar de que amaba mi trabajo lo que de verdad quería era bailar, aún que de alumna no era muy buena porque faltaba a muchas clases, así que decidí presentarme a las pruebas para profesora.

Después de medía hora de ensayo, salí para ver que hacían y efectivamente Celeste no dejaba de mirar al pobre de mi amigo, mientras Raquel le preguntaba sobre finanzas.

-Déjenlo un poco chicas.- Me reí de ellas yendo al sofá.

-Vayámonos tengo una sorpresa.

-Vas hacer la misma frase?

Las ganas de llorar volvieron, pero Jackson no me dejo, antes de poder reaccionar está en su espalda dirección a mi cuarto.

-Te elegiré algo bonito que ponerte, tendremos una salida como las de antes.

-Se elegir mi ropa Jack.

-Uh alguien se enfado.- Me señaló una maleta y yo sonreí.- Traje ropa y ayer dejé aquí un poco más elige.

Me dispuse a mirar todo lo que había. Antes cuando salíamos el escogía mi ropa y yo la suya. Nos gustaba vestirnos el uno al otro, porque si estábamos enfadados hacíamos que el otro se vistiera feo, en cambió si estábamos felices íbamos como reies del baile.

-Acabé.- Le di su ropa y el me dio la mía.

Mientras me duchaba para poder salir, empecé a pensar que ahora no sería como antes, la fama de Jackson era superior a la del colegio, mucho más.

Una vez recuerdo que una de sus admiradoras quiso graparme a un árbol porque pensó que yo era su novia. Por suerte llego mi madre antes de encontrarme grapada al árbol de casa. Ni siquiera se como se coló en mi casa.

-Vamos Am quiero ducharme yo también.

Salí de la ducha con una toalla envuelta, mire de nuevo el conjunto y pensé en salir, pero si me arreglaba antes le pondría más furioso.

-Que haces ahí dentro, a caso estás fabricando agua?- Me reí por su desesperación. Abrí la puerta y el se quedo con la boca abierta.

-Cierra la puerta que te entrarán moscas.

-Que bien elijo.

-Que bien me queda todo.- Le guiñe un ojo y los dos nos reímos.

Fuimos con un chofer y un guardaespaldas hasta el lugar, era el restaurante barato de siempre. Cuándo no teníamos citas nos íbamos aquí y yo pagaba, porque a comparación de Jackson yo siempre tenía dinero.

-Es la primera vez que voy a pagar.- Se río mientras bajaba del coche y aguantaba la puerta para mi.

-Creó que si será la primera vez.- Nada más salir una manada de flashes me cegaron y tuve que cogerme a él.

-Por favor, solo vengo a cenar. -Me guiño un ojo y yo sonreí, todo iba a estar bien con él al lado.

El guarda nos ayudo a entrar, escuche las cosas que preguntaban y todas ellas me parecían una estupidez. Una vez dentro del restaurante pude respirar con tranquilidad, porque con tantos empujones, flashes y preguntas no podía hacerlo.

-Lo siento, no pensé que me seguirían.

-Jacksom Roll el famoso es mi mejor amigo, tengo eso asumido, no lo sabías? -Los dos nos reímos dejando atrás todo lo que acababa de pasar.

La cena iba a ser perfecta solo él y yo como mejores amigos, haciendo el tonto y riéndonos de todo. Como antes.

Querido mejor amigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora