La Luna Tiene Dos Caras

《Capitulo 2》

"El chico nuevo."

- ¿Que has dicho? - Mi voz también temblaba.

- Perdón, creo. ¿Dije algo malo? - Me miro como tratando de descubrir la respuesta en mi rostro, me percate de ello y moví la cabeza negando.

- No, es solo que... olvídalo, nos vemos luego

Me di media vuelta aun con la respiración agitada. No podía ser, últimamente estaba mas paranoica de lo normal, aquel chico no tenia nada que ver a menos de que... claro, eso debía ser, debió escuchar algo en los pasillos, las noticias o debió leer lo que ocurrió en algún diario y estaba burlándose de mi. Demonios. Comenze a caminar, enrolle mis dedos en mi mochila y trate de regular los latidos de mi corazón.

- ¡Hey! - Aquel chico se puso a mi izquierda y disminuyo el paso

- ¿Que es lo que quieres? - Me detuve pero no le mire

- ¿Que te ocurre? ¿Por que en un momento bromeas conmigo y al siguiente te molestas y te vas?

- En ningún momento bromee contigo, creo que estas confundiéndote - Comenze a caminar de nuevo.

- Bueno, entonces lo de las gracias. Lo lamento, has sido amable, creo...

- ¿Por que has dicho lo del disparo? -Le interrumpí - ¿Acaso crees que es muy gracioso? ¿Crees que es muy divertido burlarte de mi? - Estaba molesta, nadie tenia el derecho de bromear conmigo de lo que sucedió, era un completo idiota.

- Disculpa, pero no tengo ni la mas mínima idea de lo que me estas hablando... oye - me tomo del brazo y me hizo detenerme - ¿Por que te afecta tanto? No estaba hablando en serio y ¿porque estaría burlándome de ti? - No le mire, veía de nuevo mis zapatos

- Si es verdad que no sabes nada, entonces tampoco te has ganado el derecho a saberlo. ¡Vaya! Ni siquiera se por que rayos sigo hablando contigo, solo me ofrecí a mostrarte la escuela.

- No deberías ser tan grosera, ya me disculpe y eso que no tengo ni idea de por que lo hice.

- Y debo suponer que el comentario que hiciste fue mera casualidad - Miraba a ambos lados pero evitaba su rostro, y ni siquiera sabia por que lo estaba haciendo.

- Lo fue, es solo algo que dije. Pero si te moleste, discúlpame no fue mi intención. Vamos, soy el chico nuevo y eres la única chica... bueno la única persona que conozco aquí, no habría bromeado de esa forma contigo si supiera que te afectaría tanto.

- ¿Realmente no sabes nada de nada? - Esta vez use un tono de voz mas bajo y tranquilo.

- Definitivamente no se la razón de tu reacción, pero si me lo permites, no volveré a mencionarlo. No diré nada de nada si eso te hace sentir mejor. - Solo asentí. - Entonces, ¿eso quiere decir que ahora seremos amigos?

- ¿Hablas enserio? ¿Amigos tu y yo? Nos acabamos de conocer - Esboce una leve sonrisa y la quite tan rápido como me di cuenta.

- Es un buen comienzo ¿No?

- Vaya, realmente no te callas nunca - Mire hacia las mesas vacías - ¿Quieres sentarte?

El chico sonrió y asintió. Comenzamos a caminar y nos sentamos en una pequeña mesa para cuatro, el se sentó frente a mi y coloco su mochila el el respaldo de la silla. Seguía sin mirarlo, me fije en la mesa metálica y coloque mis manos sobre esta.

- ¿Me hablaras del por que te puso tan mal mi comentario?

- No, no ahora.

- Bien.