Lucas*
Estar en este plano cada vez me debilita más, es muy complicado tener dos vidas a la vez.
Cuando conseguí que Candy regresara tirando aquel cofre al lago me sentí muy bien, la verdad la extrañaba mucho, pero no me di cuenta que ya había formado una vida acá, tantos años buscando a mi chica, pensé que todo volvería a ser normal pero no es así.
Soy Lucas y Chris a la vez, y ahora vive lo peor me gustan dos chicas.
—En qué lío me he metido?.
—Qué dijiste?—pregunto aquella chica de cabello negro, con la cual me siento todos los días en la cafetería y no habíamos pronunciado ninguna palabra hasta ahora.
—Lo siento, hablaba conmigo mismo—dije algo nervioso.
—Bueno —respondió tan seca y fría como siempre.
—Me gusta tu libro, lo puedo ver? —Necesitaba ese libro para saber como estaba Candy y que hacía mientras estaba sola (para los que aun no la tienen clara, el libro es un portal que nos lleva a otra dimensión, de la que sólo Candy y yo logramos salir) ella es muy curiosa y no quiero que se entere de cosas que todavía no puede saber debido a su amnesia.
—Ahora no puedo, pero cuando lo termine de leer te lo presto, quiero saber que pasa con Candy, al parecer encontró algo en un cofre.
—Mierda! —Exclame —luego hablamos.
—Pero si nunca hablamos.
— Tú igual —grite sin razón alguna.
Esta chica me va a volver loco, necesitó regresar lo más pronto posible, antes de que vea todo y se desmaye.
La campana sonó, dejando me en medio del pasillo completamente solo.
Sara*
Que chico más raro este. El timbre sonó y corrí como nunca a clase de Biología, tenía que llegar antes que la profesora y antes de los chicos, odio entrar de última y que todos me vean. Es como si me acuchillaran con sus miradas.
Entré y para mi suerte aun no había nadie, procedí a tomar el asiento de atrás, puse mi cabeza en el escritorio mientas la rodeaba con mis brazos, cerré mis ojos y quede dormida por un momento hasta que...
— Señorita Sara, aquí no se viene a dormir, despierte.
—No estoy dormida —dije mientras levantaba la cabeza, y observe que todos me estaban viendo y se reían.
Me hice bolita en mi asiento, me dio mucha vergüenza.
—Este va hacer un largo día.
Lucas*
Llegue lo más rápido que pude y entre a mi habitación pero ya era tarde.
—Qué es esto Lucas?.
—Yo te puedo explicar.
— Qué me vas a explicar?, me dirás que esa no soy yo, que tengo una gemela pero con el cabello oscuro?.
—No Candy, es muy largo el tema, por favor no te alteres.
—Quién es ella?.
—Se llama Cat y es tu mejor amiga.
—Me dijiste que no sabías quien era ella!.
—Calma, no te alteres ya te voy a explicar, en su debido tiempo, ahora dame eso y olvida lo que viste —le quite en cofre y las fotos que tenía en sus manos salí lo más rápido que pude, llegue a la otra habitación y cerré la puerta con seguro. Estaba muerto sin duda
—Lucas habré la puerta ya!.
— Ve a descansar.
—Mierda, no lo haré!.
¿Qué voy hacer ahora?.
Abrí la puerta, la tome de los hombros y la bese.
