Desde hace ya unos años atrás el cumpleaños dejó de ser una gran fiesta, donde todos nos reuníamos a festejar, la rutina y el trabajo nos ha hecho olvidar aquellas fiestas...
Sin embargo, este año, algo ocurrió, una "grata" sorpresa llegó... una inesperada pero “muy” buena...
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27 de mayo, 11:45 am
Solo 15 minutos y el ensayo de ese día comenzaría. Pero este no era un día como otros, hoy es el cumpleaños del gran bajista Akira Suzuki...
Para él era un día más, nada importante ocurría y sentado en un banquito de la sala donde está afinando su bajo lo demuestra, sin embargo tiene más que claro que 2 de sus mejores amigos y compañeros harán el mismo teatro de todos los años.
Se sienten voces a lo lejos, hablan tan alto que desde allí se oyen con claridad; 2 personas vienen discutiendo sobre qué regalo sería el mejor; ante ello el rubio bajista suspira, sabiendo lo que se viene, más una pequeña risa hace que deje su concentración a un lado y observe al dueño de aquella risa el cual relajado fumándose un cigarrillo casi acostado en un cómodo sofá le mira aguantando estoico las ganas de burlarse.
—Anda, disfruta, sé que te mueres por molestarme.
—¿Hay alguna razón del por qué debería burlarme? Claro, aparte de tu pelo y tu trapo-ante ello los dos ríen un poco.
—Me sacarán de quicio.
—Ponlos en aprietos.
—¿Y cómo haría eso?
—No sé, pídeles algo que jamás podrían comprar o hacer... ¿Qué tal un baile stripper?
—Ruki lo haría, dalo por hecho.
—Tienes razón... bueno, algo se te ocurrirá.
—¿Y tú no me dirás un "Feliz Cumpleaños" Aoi?
—¿Con besito incluido?
—Mejor déjalo así y haces mi día menos pesado.
Las voces se han ido acercando poco a poco, la puerta se abre de golpe y un gracioso Kai con cara de molestia ingresa a la sala llamando la atención de los presentes.
—¡Diles lo que quieres para que se callen! —Le dice el líder a un sorprendido Reita para luego dirigirse a su batería.
En eso, casi corriendo, los 2 únicos integrantes que faltaban hacen acto de presencia, ambos van directo hacia su objetivo, inclinándose para que sus rostros queden a solo centímetros de su "presa", mirándolo fijamente.
—¿Qué les pasa? —pregunta Reita sintiéndose levemente intimidado ante esas serias miradas sobre él.
—¿Qué quieres de regalo? —Casi gritan aquellos dos hombres, regresando la respuesta con una pregunta.
—Le dije a Uruha que podríamos ir todos un fin de semana a algún spa o algo así pero dice que no es cool —habla el vocal casi indignado.
—Opino que deberíamos comprarte algo que en serio necesites, ¿cierto que es mejor? —Refuta Uruha, seguro de que la verdad la tiene en su boca. Así los 2 "contrincantes" se miran, dando por iniciada la guerra.
—¡Tiempo de calidad!
—¡Algo que necesite!
—¡Egoísta!
—¡Tacaño!
—¡Qué!
La discusión sigue, Reita solo los mira sin saber siquiera si entrometerse está bien, Aoi enciende su segundo cigarrillo sin dejar de sonreír y Kai frota sus sienes con los ojos cerrados buscando paz en su alma.
