UN TOMATITO DE AMOR

CHAT NOIR

 

- nath... Deberías descansar-

Observando al joven que le miraba sin decir nada desde que se despertó.

-¿ nath?- pronuncian la azabache mientras se acercaba lento a el

- no puedo creer que estés aquí-

La azabache comenzó a ponerse algo nerviosa y mirando aún lado solo atino a aclararse la garganta

- es que..... Bueno...laidybug me conoce.... Y ella me trajo- le miro preocupada-pero ahora me doy cuenta que .no.. Eh podido hablar con tus padres por que no se tu numero o donde vivas ... así que....decidí quedarme a tu lado-

El pelirrojo solo sonrió leve tomando una de sus manos  mientras sorprendía a la azabache  y comenzaba a sentarse resiviendo ayuda de esta

- gracias, por estar a mi lado- prosiguió suspirando por el dolor que su cuerpo ahora cargaba - no debías- le miro, notando aquellos ojos que ya estaban rojos por las lágrimas que viera derramado

- nathaniel... - le susurro mientras posaba su mano en la  de el, sintiendo una culpa tremenda en su interior y volviendo a dejar caer lágrimas mientras agachaba la cabeza-...perdón...-

Aquellas palabras se escucharon de la joven que ahora era consolada por un pelirrojo herido.

Mientras en la mansión agreste.

Adrien estaba de un lado al otro, no había podido dormir pensando en lo que hizo, mientras su kwami le miraba algo enojado

- los poderes que te doy no son para lastimar - volando hasta posarse enfrente - no es la primera vez que te lo diga adrien, si sigues así los perderás

Escuchando aquello el joven de ojos esmeralda solo alzo una ceja en forma de burla

- sabes que no lo hice por maldad, lo hice por mi princesa, porque si ese pintor trata de hacerle  algo de nuevo yo...

- basta niño- prosigio plagg callando al peli rubio - últimamente te encuentras tan sumergido en tu realidad que ya no sabes que no es verdad lo que piensas de ese muchacho, admitelo estas celoso por que te esta ganando a  la niña - decía cruzando sus pequeños brazos

- sabes aveces eres muy lengua floja, pero eso no quita que solo me hables cuando te conviene y no me avises o actúes - evadió a su kwami  para sentarse en su escritorio y abriendo una carpeta donde  tenia varias fotos de marinette sonriendo y tomadas por sorpresa.

- eres un ciego niño, tuviste tres años donde ella estuvo perdidamente enamorada de ti y los desaprovechaste ahora no vengas a quitarle a otro la oportunidad - dijo el pequeño sentándose en su hombro

- no me tienes que restregar lo maldito que fui plagg, si ahora lo trato de reparar es por algo y eh decidido no dejarla en paz - sin ningún remordimiento dijo el muchacho que ahora estaba embobado con las imágenes.

A decir verdad el sabia que aquel error de años atrás le estaba carcomiendo y es que desde que comenzó a ver a su compañera de clases,  un sentimiento de obsesión se instaló en el, arraigandose  y dividiendo su corazón por dos amores que le estaban siendo imposibles de obtener

- solo te digo que la obsesión no te llevará a nada bueno   chico y si no te detienes no sólo perderás esa amistad,  también serán tus poderes por los sentimientos egoístas que estas guardando dentro de ti- mencionó por último el kwami qué se metió a su cajón con un pedazo de queso dejándolo pensativo.

Salio de esa habitación al mirar que plagg ya se encontraba dormido, caminando por los pasillos hasta llegar a aquel cuarto donde se encontraba el retrato de su madre, admirándolo por un momento