Después de mis últimas palabras reino un silencio incomodo
-entonces, ¿qué pasa?
Porque este silencio - dije parándome al frente de el
-nada, solo que estoy feliz por haberte conocido y además no sé qué decir- dijo bajando el rostro
-no, no por favor no te coloque así, es que han pasado 10 años y no sabemos que decir- le dije algo apenada- y además soy un desastre en actuar de esta forma lo siento enserio lo siento es la primera vez que actuó nerviosa en años y siempre tú has sido la causa- decía caminado en los alrededores de la gigantesca habitación-y ahora te estoy abrumando con esto enserio perdón...
-marinette, princesa tranquila si, ven siéntate- dijo aquel rubio con una voz tranquila y me senté- lo siento por no haber hablado es que, es raro decirlo, es que estaba recordando la primera vez que te vi.
Con tú gran sonrisa, tú cabello azabache suelto hasta los hombros, y ese hermoso vestido rosa con motas blanco perla.
Recordé la primera vez que te dije lo que sentía, la primera vez que te bese, pero eso no importa- concluyo aquel rubio para que aquella chica de cabellos azabache se recostase en su pecho...
-y me extrañaste.
-"te extrañe"
Como siempre y como nunca- menciono aquel chico, la azabache se acercó de nuevo peligrosamente al rostro del rubio pero fue interrumpido por el sonoro de la puerta y los llamados detrás de ella, la azabache le dedico una sonrisa y se separó del él y dijo- adelante...
-disculpe la interrupción joven Agreste- dijo Meghan manifestándose al frente de nosotros
-no pasa nada Meghan que necesitas
-su padre, contrato a la señora Carmen para hacerle las terapias, si no inconveniente me retiro...
-mucho gusto joven... "dijo la arcaica"
-bueno, gatito creo que me tengo que ir- dije para levantarme de la cama y darle un beso en la frente...
-¿mañana regresaras?...- pregunto y asentí con una sonrisa y salí de la habitación
(..............)
Estaba a punto de irme, pero me dirigí a la oficina de Meghan empecé a tocar la puerta de esta, escuche un "pase" así que entre...
-señorita Cheng, que necesita- dijo levantándose de su escritorio
- Meghan, necesito que le lea esta carta al joven Adrien después que termine sus terapias por favor – dije sacando la carta de mi bolso y entregándosela – y eso es todo me retiro
Salí de la morada para entrar a la cochera observe detalladamente en la entidad
Los coches.
Limosinas pero solo uno llamo mi esmero, un hermoso convertible color rojo joya supuse que era de él así que me acerque, note que fue personalizado a su gusto, asientos de cuero blanco perla y grabado con su inicial, volante aconchado, y todo su interior inteligente note por la forma del auto que su motor era de un deportivo este le daría proporción y ligero al menos consumo de gasolina menos desgaste de las bugías eso significaba menos peso más velocidad...comencé a pasar mi mano por las aletas de cambio de velocidad, observe sus cauchos eran hechos en Italia todo en aquel auto era hermoso estaba viendo las entradas de ventilación hasta que sonó mi teléfono...
Niña, niña cuando me ibas a decir que llegaste a parís
Alya; que gusto son mis oídos en escucharte, y para responderte la pregunta fue hace dos semanas- Alya es una amiga que conocí cuando vivía en Italia
Niña, a las 20:00 horas en el museo te necesito ahí sin falta
De acuerdo nos vemos ahí......-colgué la llamada
Me dirigí a mi motocicleta, la prendí para que calentara el motor mientras tanto me instale mi casco, arranque y salí del establecimiento para recorrer las calles de parís en un punto que el crepúsculo empezaba a reinar, me detuve en la torre Eiffel la observe por unos minutos y pude capturar dos niños corriendo y divirtiéndose en unos segundos recordé cuando Adrien y yo éramos pequeños y jugábamos así; saque mi teléfono de bolso y observe que faltaba muy poco para encontrarme con Alya así que arranque de nuevo mi motocicleta y dirigirme a mi apartamento; <<es hora de despojarme lo de niñita buena>> pensé y comencé a quitarme la ropa para colocarme una a mi gusto unos leguis negros junto a una ombliguera blanca muy corta una chaqueta de cuero negro junto unos botines maquillaje y mi joyería (zarcillos decorativos alrededor de sus orejas)... salí y ya me encontraba en el punto donde me encontraría con Alya... mientras esperaba me quede mirando al vacío, observar las luces que decoraba la cuidad, las parejas tomadas de la mano, observando todo lo que me para mi es cursi... seguía criticando todo al mi rededor, en realidad no entendía porque tanto amor en este lugar; hasta que sentí una mano tocando mi hombro...
-niña, niña siempre de distraída- dijo la castaña de lente sacando a la azabache de sus ideologías
-y tu retardada- dije con una sonrisa y abrazando aquella chica morena- me has hecho esperar
- y te diré que baldra la pena
-porque no regresaste, porque no visitaste...
-niña, crees que en solo en Italia se hacen carreras prohibidas, pues mi vida no es así- dijo arreglándose los anteojos- aquí en parís también no es solo la cuidad de la cursilería- carcajeamos sarcásticamente a sus últimas palabras- y hay una corrida en unos minutos, te anotas...-y empezó a encender su motocicleta...
-mi vida, tú sabes si hay una corrida debo estar ahí... - dije e imitando la acción de mi amiga...
Empezamos a acelerar- ¿y cuál es la actitud?- dijo la de los anteojos
-¡Que se jodan!- gritamosa unisón y nos dirigimos a la carrera....
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¡Tú y Yo!y un amor entre ruedas y motores
FanfictionEra una día normal para el parisino Adrien Agreste, hoy sería su primer día como estudiante universitario del instituto École Polytechnique y se re contraria con el amor de su infancia Marinette Dupain-Cheng ; hasta una fatal accidente automovilíst...