♠BROTHERHOOD♠ |Zianourry|

Capitulo III. La hermandad.

Capitulo III. La hermandad.

Un balde de agua fría le reanima, su cuerpo entero tiembla ante la horrible sensación, suelta un gruñido y despabila.

-¿Qué dem...?

Y no, nada ha sido un sueño como deseo, está atado de manos a un árbol recubierto por lo que parece una manta con cuatro pares de ojos sobre si; el muchacho que sostiene el balde vacío es rubio con pupilas azules, rasgos extranjeros, quizás de Irlanda, después un delgado joven de pelo negro azabache y facciones en extremo afiladas, ojos avellana y expresión de fastidio, luego está un fornido de pelo y ojos color miel con algo de barba, y por último, alto y estilizado, un oji verde, su cabello color chocolate cae en su espalda como rizos medios debido al largo. Todos visten camiseta blanca y jeans desgastados, a excepción del rizado que además porta un abrigo de piel curiosamente del mismo color que su pelo, ninguno lleva zapatos.

-Quiero mis gracias por escrito.-habla el de pelo oscuro.

-¿Tus...?

-Te salvamos el trasero.- concluye el rubio.

A Louis de pronto le duele la cabeza, tras el recuento de sus recuerdos. -Pe... pero no, yo no... ¿Qué es lo que son? ¿Por qué me seguían? ¿Por qué estoy aquí? ¡Déjenme ir...!

-Voy a golpearlo...

-¡Zayn! -el acholatado sujeta al chico de rasgos y acento pakistaní, este se suelta de manera violenta.

-Bien, cuando pase la etapa de duelo, pueden avisarme. Dice, para luego desaparecer por la vereda a grandes zancadas.

-Niall...- el rubio asiente y, sin ganas, deja el balde apresurado por alcanzar al moreno, entonces solo quedan los dos castaños y el chico de ojos verdes quien se pone en cuclillas y le mira directo. -¿Te sientes enfermo?

-¡¿Eh?!-De acuerdo, las cosas no podrían ponerse peores, ahora sus propios delirios le cuestionan la cordura.

-¡Responde lo que te pregunte...!

Harry resopla, atareado, al final ese pequeño oji azul le está causando jaqueca. -Mira, en primera, tú eres el que está atado así que tú respondes nuestras preguntas. En segunda no es lo que son sino lo que somos por que déjame decirte que tú también eres uno de nosotros y cuando digo de nosotros hablo de nuestra manada.

Aquello no le aclara nada a Louis, el joven que hasta ese momento se había mantenido en silencio toma aire para unirse a su compañero, impulsado por la expresión de confusión del recién llegado, Liam era una persona compasiva y siempre lo había sido. -Harry, déjame a mí. - hace una mueca-Hagamos un trato, Louis, -hace énfasis en el nombre que el muchacho les soltó ayer antes de caer desmayado. - Tratare de explicarte el orden de las cosas y lo que te pasa, y luego será tu turno de responder.

Se lo pensó antes de abrir la boca puesto que cada vez que lo hacia las cosas se enredaban más y más, pero en su condición ese trato era lo mejor que podía obtener. -Bien.

El rizado de nombre Harry y el castaño intercambiaron una rápida mirada antes de asentir. -Anoche tu naturaleza salió a flote, el clan Yamak te reclamo y luego tú nos llamaste...

No, definitivamente no había ayudado a nada. -¡Yo no los llame! Yo estaba... -sus cejas se curvan a compas con su boca. -Corriendo porque, estaba en una fiesta y luego Tommas forzaba a Tina y yo no sé, solo recuerdo estar corriendo pero ya no eran mis pies, eran patas y la boca me sabía a sangre y... Las caras de impresión y hasta fascinación que adornaron los rostros de sus compañeros fueron épicas, ambos desconcertados con las palabras del atado.

-¿Estás diciendo que... de verdad no sabes que paso ahí? ¿Ni siquiera te lo imaginas?

-Uh, ¿sí? A Louis de todas maneras no le sorprendía, era obvio que esas cosas que vio anoche no eran humanas.

-¿Dónde creciste?

-En Cheshire. -mordió su labio inferior. - ¿Por qué me convertí en un monstruo?

Harry rio con amargura. -¿Verdad? A ninguno nos gusta pero es lo que hay. Recibió una mirada acuchilladora por parte de Liam antes de que éste hablara.

-Louis, nosotros no somos monstruos.

-Eso es... ¿Cómo?

-Hombres que... describen mejor su naturaleza salvaje.

Hubiera preferido morir la noche antes que escuchar la sarta de tonterías que decían esos locos porque no podía ser cierto, los hombres lobo no existían, como leyendo su pensamiento Liam prosiguió. -Y, somos tan reales que ayer te convertiste en uno, olías a sangre así que seguramente tus instintos salieron como defensa, escucha, la primera vez que te transformas es...

-Pierdes noción, como si hubieses estado dormido. -continua Harry. -Eso explica porque no sabía transformarse cuando le dije que lo hiciera.

-Bien, bien, bien. -Los acallo Louis. -Ya se eso ahora déjenme volver a casa, soy humano otra vez así que...

-Tú nunca has sido humano, y si crees que vas a volver como si nada...-dijo Liam haciendo uso de todo su tacto, el chico le provocaba algo de lastima.-No sé cómo terminaste con ellos pero no perteneces ahí, perteneces aquí, con nosotros.

Y Dios sabía que había querido escuchar eso toda su vida, escuchar que para él había más que un pueblo en medio de la nada pero aquello era ridículo, un mundo fantástico en el que hombres se convertían en bestias y mataban al prójimo...-¿Con ustedes? Murmuro incrédulo.

-Un lobo pertenece al clan que gobierne la zona en donde nace, Louis. -explicó Liam-Anoche los Yamak seguramente te escucharon pensando y fueron por ti.

-Y luego huiste con nosotros. -Harry sonrió, evidenciando un par de delicados hoyuelos a los lados de sus mejillas. - Así que eres un fugitivo.

-Pero ellos querían matarme, ¿Cómo que era parte de su clan?

-No querían matarte, querían probarte, un clan no es cosa de juego, todo el que entra en ellos tiene un cargo y eso se determina al principio, después de que el lobo nace.

Aturdido entre cerro los ojos y regularizo sus respiraciones. -Si era así, ¿Por qué se entrometieron?

-Ya te dijimos que tú nos llamaste. -Era evidente que la paciencia se le estaba acabando al rizado. -Y no, no sabemos cómo es que te escuchamos pero lo hicimos y nos estabas pidiendo ayuda.

Louis se echó atrás, recargándose por completo en el árbol al que estaba sujeto. -¿Gracias?

-¿Sabes Louis? No ayudamos a gatitos perdidos a menudo, tenemos suficientes problemas propios como para echarnos a los hombros los de los demás.

-Pues no se mucho pero estoy seguro de que los compañeros de clan no atan a otros a árboles.

-Nosotros no somos un clan. Un signo interrogatorio apareció en la cabeza de Louis, ya estaba harto de preguntar y los chicos de responder, aun así lo hicieron. -Somos como tú, fugitivos de manada, no tenemos un líder ni una reserva, más bien somos algo así como una hermandad.

-Y ahora soy parte de su club.

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Para ti baby; Gabriela_Stylinson28

Dedico el siguiente también.