Kidnapped [Hyungwonho]

Parte 3

Hyungwon estaba recostado boca abajo en la cama, tenía su cabeza apoyada sobre sus brazos y su cabeza en dirección a Wonho. Se supone que ambos se habían quedado dormidos, pero ahora que su visión había vuelto, veía que el rubio tenía sus ojos abiertos y lo observaba en total silencio. Hyungwon a veces abría los ojos, trataba de mirar hacia la nada, y luego los volvía a cerrar, todo solo para comprobar que Wonho seguía observándolo.

-¿Wonho? ¿Estás dormido?

Volvió a abrir los ojos y esta vez decidió hablar, tenía una duda. A su lado el hombre se movió un poco y fingió que se acababa de despertar. ¿Cuántas veces no habría hecho lo mismo antes? Fingir que no estaba o que estaba dormido, pero en realidad lo estaba observando.

-Estaba... ahora ya no, ¿no puedes dormir?

Hyungwon sonrió, el maldito era un buen actor, hasta fingía la voz de dormido.

-No, tengo la mente llena de cosas.

-¿Qué piensas?

El más alto se giró hasta quedar boca arriba, era tan agradable poder moverse con libertad ahora que sus piernas y manos no estaban unidas.

-Pensaba en ese hombre, ¿sabes por qué está tan enojado con mi padre?

-No lo sé, y si lo supiera no te lo diría.

Hyungwon rodó los ojos.

-¿Hay alguna cosa que puedas decirme?

Wonho rió y Hyungwon se derritió con la vista.

-Puedo decirte aún muchas cosas, solo pregunta y alguna podré responder.

-A veces te odio tanto.

A Hyungwon le gustaban estos momentos, era como si estuviera hablando con un viejo amigo, o con su pareja; momentos en los que ambos se notaban relajados.

-Deberías odiarme siempre, te tengo secuestrado.

Hyungwon no respondió. Wonho tenía razón, debería odiarlo siempre pero no podía, su mente no se lo permitía, incluso se habían besado y habían tenido sexo , era imposible negar que se sentía atraído por su secuestrador. Se estaba volviendo loco, no debía permitir estas cosas, pero se había salido de sus manos, a veces llegaba a un punto en que desearía no ser soltado y así pasar más tiempo con Wonho, era la forma en que lo cuidaba y se preocupaba por él lo que lo hacía sentirse querido, y cada vez estaba más convencido de que Wonho sentía lo mismo. Tenía que sentir lo mismo. Un secuestrador jamás sería tan agradable con su víctima si no fuera así, ¿verdad? No podía ser solo su mente.

Hyungwon a veces se preguntaba que iba a pasar en cuanto fuera liberado, ¿podrían seguir viéndose? ¿Lo buscaría? No quería dejar de verlo, en todos los sentidos, porque ahora que sus ojos al fin veían, la atracción era más fuerte, Wonho era totalmente su tipo, deseaba poder conocerlo más, salir, tener una vida normal, ¿por qué no se habían conocido en una situación menos extrema? Donde su familia se enterara, seguramente estarían muy decepcionados.

-¿En algún momento me hablarás sobre ti?

Hyungwon rompió el silencio que se había creado.

-¿Quieres saber sobre mí? ¿No usarás luego esa información en mi contra cuando me denuncies? Es peligroso.

Wonho estaba sonriendo mientras decía aquello.

-Si prometo no denunciarte, ¿me hablarías sobre ti?

-¿Y por qué no me denunciarías?

"Porque me gustas" respondió Hyungwon en su mente, sintiendo un ligero calor en sus mejillas.