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capitulo 6

Emma lo beso y se despidió de él, Graham no la siguió, solo la observo irse y entrar a la cafetería nuevamente. Se fue con las manos en los bolsillos caminando despacio hacia su edificio. A unos pocos pasos de llegar se encontró con el Sr Gold que lo esperaba en la puerta.

—Señor cazador, que gusto tenerlo de regreso. – esbozo una de sus risas perversas.

—Hola Gold ¿Qué quiere? – Graham respondió con fastidio, ciertamente encontrarse con el mismísimo oscuro no era lo que esperaba en ese momento.

—Simplemente un favor de su parte.

—Usted no pide favores – Graham se cruzo de brazos y lo miro con los ojos entrecerrados — ¿Qué desea a cambio?

Gold sonríe, era verdad él era famoso por sus tratos, solo que ese día necesitaba un favor y al ser testigo del despertar del forastero que tenia al pueblo revolucionado, decidió aprovechar la oportunidad.

—Es muy sencillo, necesito que la Srita Swan traiga de vuelta a mi hijo.

—El se fue por una razón y usted y yo sabemos cuál es.

—Lo sé, pero lo que él no tiene idea es que su vida depende de que regrese.

— ¿Y eso por qué? ¿Qué hizo para que la vida de su hijo este en peligro?

—Digamos que hay alguien que está molesto conmigo y se la cobrara con él.

—Entonces vaya y dígaselo usted, no me meta en sus problemas o a Emma. – Paso junto a él sacando las llaves de su bolsillo – Buenas tardes.

Rumple no estaba dispuesto a quedarse con esa negativa por parte del cazador y decidió hacerle una oferta que lo hizo detenerse.

—A cambio podría decirle la razón por la que aun sigue vivo y el porqué que ha regresado a Storybrooke.

Esa oferta lo tentó mucho, aquella pregunta era la que estaba intentando contestar desde hacía un año, pero ahora tenía sus recuerdos y no lo quería demostrar, pero de verdad necesitaba saber el porqué. Giro y lo observo, el estaba allí esperando su respuesta con una sonrisa realmente malvada en el rostro.

—Ok tu ganas ¿Qué necesitas que haga? – pregunto resignado.

Comenzó a sentirse otra vez atrapado a merced de un ser poderoso, primero fue la Reina Malvada y ahora el Ser Oscuro, por lo menos ahora conservaba su corazón.

—Es muy sencillo, debe inventar una excusa para sacar a la Srita Swan del pueblo, llevarla con usted a Chicago y así traiga a mi hijo a casa.

—Espere un momento ¿No se supone que este en New York?

—Ya ve que no.

— ¿Cómo sabe exactamente donde esta?

—Tengo mis métodos.

—Pero no me ha respondido ¿Cómo se supone que haga lo que me pide?

—Eso – se adelanto un par de paso y quedo a escasos centímetros del rostro de Graham y lo miro de modo amenazante – corre por su cuenta, usted es un hombre inteligente piense en algo. Buenas tardes.

Gold hizo su salida y desapareció en una nube de humo gris. Graham se quedo allí rumiando el estúpido trato que había acabado de hacer con la persona equivocada.

— ¿Qué más podría pasarme hoy?

—No lo sé dímelo tú.

Frente a él apareció un hombre con una sombrilla a modo de bastón que llevaba un perro atado a una correa.

—Hola Jimmy - se agacho y acaricio al perro - ¿Cómo estas Pongo?

—Eres uno de los pocos que no me llama Archí, veo que ya recuperaste tus recuerdos.

—Sí, bueno no todos.

— ¿Quieres hablar de eso?

—Pero que no sea en una sesión. Te invito un trago.

—Claro siempre es bueno relajarse de vez en cuando.