PAIN [Billdip] [Rewritten Version]

CER0

3:45 PM

Respiré hondo, observando mi alrededor mientras el viento mecía las hojas de los árboles. No había nadie en la cabaña hoy, por eso decidí quedarme afuera y pensar un rato, necesitaba hacerlo.

-No quiero hacerte daño- susurró acariciando mi mejilla

De alguna manera lo había logrado, bebí de la soda que tenía a mi lado y subí las piernas a la vieja y oxidada banqueta, cruzándolas como indio. Cerré los ojos un rato, mientras me dejaba llevar por los sonidos de mi alrededor.

-Bill, sé que estás ahí - hablé en tono tranquilo al sentirlo mirarme.

-¿Que haces aquí?

-La verdad es que no lo sé, sólo quería un rato de tranquilidad y paz- Abrí los ojos lentamente y lo encaré

Me observaba con una intensidad impresionante, como si hubiese encontrado un paraíso en mí. Tenía el cabello rubio revuelto y los ojos con ojeras e hinchados. Alcé la mano lentamente y acaricié su mejilla.

-Pine Tree... -susurró apretando los ojos y tomando mi mano

-Dime Bill

-Volvamos a empezar -dijo, ahora mirándome fijamente

Me quedé frío. Mis mejillas se encendieron en un rojo estoy-muriendome-de-alegría

-Bill.... Claro... Claro que me gustaría empezar de cero, pero necesito que tú seas totalmente sincero conmigo

-¿Sincero en qué? ¿que necesitas saber? -habló esperanzado

-¿Como... Como es eso de que eres... Adicto al dolor?

-Yo... ¿de verdad estás listo para escucharlo?

-Sí

-Entonces vamos a tu habitación

Una pequeña llama se encendió en mí en ese momento, le tomé la mano y lo guié por la cabaña hasta mi, ahora, solitaria habitación. Cerró la puerta a sus espaldas y se abalanzó sobre mí, besándome el cuello y la mandíbula.

-Dipper... Muerdeme- susurró en mi oreja

¿Qué?

Me aparté de él para mirarlo fijamente, sus ojos estaban llenos de pasión y lujuria. Esto lo excitaba. Acerqué temeroso mis labios a su cuello y empecé a chuparlo y mordisquearlo, mientras él gruñía en voz baja. Alcé mi cadera para encontrarme con su apresada erección.

-No sabía la existencia de ese lado tuyo

-Callate Bill

Tomé su rostro entre mis manos y encontré nuestros labios, Dios mío, hacía tanto que no lo besaba, tenía tantas ganas de comérmelo. Abrí mi boca para que su lengua pasara y explorara mi cavidad bucal, sonreí contra su boca y enrollé mis brazos alrededor de su cuello. Poco a poco fue levantando mi camisa y me la sacó.

¿¡Que denonios crees que haces!? Habló mi subconsciente con cara de espanto

-Te dejas seducir por mí - respondió Bill

Entonces reaccioné a lo que estaba ocurriendo. Con todo el esfuerzo y voluntad que pude me separé de él.

-Bill, sabes a qué vinimos