CAPÍTULO 2: LOCURA, SEGUNDA PARTE

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Antes que nada tengo que decir que Magi no me pertenece sino a Shinobu Ohtaka. Solo me pertenecen los OC y la historia.

Edad de Kouen: 24 años.

Edad de Koumei: 22 años.

Edad de Alice: 18 años.

Edad de Kouha: 14 años.

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"La vida te pondrá obstáculos, pero los límites los pones tú."

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PRIMER DÍA

CAPÍTULO 2: LOCURA, SEGUNDA PARTE

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[ALICE POV]

Levantándome del suelo poco a poco dejando la bolsa de los regalices a un lado y seguido por las extrañas mariposas a mi alrededor que se movían alrededor de mí como si me encontraran interesante y mi presencia placentera. La verdad en este momento solo quería saber porque esa maldita broma de cámara oculta estaba pasando mientras ella estaba en pijama además de descalza, porque en ese momento se estaba estremeciendo con cada paso que daba por la roca fría, ignorando ese hecho por cosas más prioritarias.

Me fui acercando al que estaba disfrazado de Kouen, mientras las personas que estaban a mí alrededor empezaron a hablar en algún idioma que desconozco. Cada vez me iba acercándome más para aclarar las cosas o algo, porque la verdad no pensaba quedarme esperando a que algo pasara, mejor confrontar las cosas de frente, porque la verdad, las cinco personas que estaban alrededor mío en los bordes de lo que parecía un altar, como también eran las que estaban hablado en un idioma que no entendía o que estaban tan cansados supuesta mente que no podían pronunciar palabra correctamente hasta el punto de que pareciera que estaban hablando en chino, parecía que se iban a caer inconscientes en cualquier momento, para ser actores lo hacen increíblemente bien, tan bien que no me extrañaría que uno se tiraría al suelo para hacerse el inconsciente por el supuesto esfuerzo por el que se ha quedado así, el cual desconozco. Pero bueno yo pregunto al que va disfrazado de Kouen el cual las mariposas blancas le rodeaban como abejas a la miel, pero a una distancia prudencial no hay que olvidar que a uno de sus lados se encontraba el que iba disfrazado de Kouha, y la verdad no quiero lanzarme a él para abrazarlo como oso de peluche. Pero la verdad después de mi casi muerte me he dado cuenta de hacer las cosas cuando quieres hacerlas, así que en un segundo estaba enfrente suyo a unos dos metros de distancia y al siguiente estaba agarrando al mini Kouha el cual era más bajito que yo, entre mis brazos mientras que restregaba mi mejilla contra la suya, haciendo que el pequeño se tensara por la sorpresa, haciendo que los otros dos me miraran incrédulos.

- Ah~ tienes las piel tan suave a pesar de ser un chico estoy tan celosa~ - murmure mientras continuaba frotando sus mejillas, las cuales hubiera continuado si no fuera porque al hablar desperté al mini Kouha de su parálisis por la sorpresa, haciendo que con sus manos intentara empujarla lejos de él. Y la verdad para un cuerpo tan pequeño tenía una increíble fuerza pero claro, aunque tuviera esa fuerza yo lo tenía bien agarrado, haciendo difícil soltarlo lo cual es algo que no quería. Haciéndolo que se juntara más a mí. Y por lo que pude notar un pequeño sonrojo apareció en su cara, "ah~ que monada como voy a soltarlo ahora si me muestra esa cara".

- "¡¿Q-qué estás haciendo?! ¡Suéltame!" - gritó la mini copia a la cual no le entendí ni una mísera palabra de lo que dijo. Pero con sus intentos de que me separara de podía hacerme a la idea. Así que solo por esta vez le hice caso, pero no antes de coger su sombrero azul verdoso y alejarme de él. El cual al darse cuenta de que le quite el sombrero empezó a seguirme gritando algo que seguramente era que se lo devolviese pero como no entiendo lo que dice, era escusa suficiente para que no tenga devolvérselo, mientras que yo empecé a dar vueltas con un solo pie como apoyo alrededor mío "lo que es ir a clases de ballet cuando eras joven, te dan increíble flexibilidad y equilibrio, para algo sirvió esa tortura en la cual sentías que se te romperías todos los huesos" pensé para mí misma mientras lagrimas invisibles surcaban mi cara al recordar esas torturas, lo cual también ayudaba el que estuviera descalza, girando alrededor de mi cambiando de apoyo el pie cuando no podía dar más vueltas por falta de impulso o por esquivar al mini Kouha que quería recuperar su sombrero el cual me lo había puesto en la cabeza agarrando los bordes de este con mis manos para que no se cayera por que seguía con mis dos coletas y se enganchaba un poco dificil, además de que ayudaba al equilibrio, mientras observaba al mini Kouha y sus intentos fallidos de recuperar lo, lo que es una monada achucable, ya me estoy arrepintiendo de haberlo soltado pero bueno esto también es divertido, pensé para mi mismo mientras me reía dando vueltas por la sala mientras que debido a la diversión del proceso al parecer las mariposas les pareció también divertido porque empezaron a dar las vueltas del baile detrás de mí haciendo que pareciera que tenía una capa blanca y negra la cual se ondulara en el aire, mientras recibía una mirada fulminante de cierto pequeño príncipe y numerosas miradas de sorpresa por las acciones tan infantil que estábamos realizando Kouha y yo. Y así continuamos durante un rato por el que las mariposas seguían aumentando por querer divertirse también y yo me reía de los intentos fallidos de Kouha, hasta que me di cuenta de que el pequeño se había detenido de repente por alguna extraña razón el cual me estaba mirando como si me abría salido una segunda cabeza y al mirar alrededor me fije de que los demás también, haciendo que los mirara interrogantes mientras paraba de dar vueltas e inclinaba mi cabeza para darle más entendimiento a mi desconcierto. ¿Qué demonios les pasaba a todos? ¿Tal vez hice algo sin darme cuenta? La verdad no sabía lo que estaba pasando y la verdad no me importaba solo quería que dejaran de hacerlo, era incomodo. Así que me fui acercando poco a poco a Kouha, al cual le pase por delante de la cara la mano para ver si reaccionaba, pero aún así seguía mirándome de esa extraña manera haciendo que frunciera el ceño por ello, haciendo que cogiera el sombrero de mi cabeza y se lo pusiera en la suya con un poco de fuerza haciendo que este espabilara por fin y que parpadeara por la sorpresa llevando las manos al sombrero para verificar lo que estaba llevando, y yo le sonreí. Haciendo que al percatarse de la situación y se sonrojar, "Aw~, que monada, me da miedo que alguna vez lo secuestren, bueno si eso ocurre solo tengo que traumar a los secuestradores por hacerlo después de todo solo yo puedo secustra...ejem, nadie debe secuestrar a nadie, sí, eso mismo."

Adiós a mis vacaciones de veranoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora