El embarazo de NamJoon || JinNam (En edición)

Prólogo

La casa Bangtan es un lugar peculiar, tiene la característica de que las cosas siempre están de cabeza, incluso lo que no puede ser tan enrevesado termina como si fuese un cableado eléctrico de ciudad, pero nadie se sorprende por eso. Se escuchan risas estridentes en medio de todo el salón, el ruido de los videojuegos y lo que probablemente era el microondas terminando de hacer unas palomitas, los siete miembros de la banda amaban los días en que tenían poco qué hacer, les daba tiempo de compartir y entretenerse como una familia, caótica y llena de energía, sin embargo, NamJoon no estaba exactamente sintonizado con esa emoción ese día. La cabeza del rapero estaba echada hacia atrás, recargada en el cojín afelpado del sofá, su semblante era enfermizo y sus manos descansaban sobre su estómago inconscientemente, no tenía pinta de sentirse bien.

Jin lo miró fijamente, era rápido para darse cuenta cuando uno de sus chicos no se sentía precisamente bien. Caminó hacia el rapero más alto, interviniendo en el camino para que TaeHyung le devolviera su PSP a JungKook antes de sentarse junto al líder. NamJoon sudaba frío, estaba pálido y su expresión se arrugaba, compungida entre momentos.

—¿Namie? Nam, amor, ¿te sientes bien? — Preguntó Jin, colocando su mano en la frente del rapero para ver si tenía fiebre, pero para su sorpresa no era así.

—Me siento mareado, Jin-Hyung. — Respondió NamJoon con un tono bajo y cansino.

Abruptamente NamJoon empujo a Jin un poco, alejándolo de sí, y se arqueó hacia adelante, vomitando con fuerza en arcadas sonoras que denotaban dolor. Los dos menores que los acompañaban en la sala no pudieron evitar poner expresiones de asco ante la situación, pero claramente igual estaban preocupados, NamJoon se había puesto más pálido en cuanto terminó de vomitar.

—¡Asco, Hyung!— Gritaron los dos menores. Jin volteó a verlos con el ceño fruncido y negó hacia ellos de forma reprobatoria.

—¡En vez de que se quejen de lo asqueroso, tráiganme el trapeador y una cubeta para poder limpiar esto! Debería preocuparles, tontos. —Jin recriminó a los menores y ambos chicos se levantaron para ir por lo que se les pidió.

Una vez que desaparecieron por los pasillos de la casa, SeokJin volteó de nuevo hacia NamJoon quien estaba nuevamente recargado hacia atrás en el sillón, con un brazo sobre su rostro tapando la luz de sus ojos, respirando pesado y temblando.

—¿Cómo te sientes ahora, Joonie-ah?

—Hyung...— Chilló NamJoon con dolor y miedo, odiaba vomitar, odiaba la sensación de sentirse tan enfermo y definitivamente su estómago no estaba dando tregua alguna, sentía la clara necesidad de vomitar nuevamente, se sentía muy mareado y demasiado asqueado, había un olor que no le gusta en esa habitación, y claramente no era el vómito, ese sólo se sumaba a lo que inicialmente lo asqueó.

—Está bien, Joonie-ah, ya ensuciaste el piso, sácalo. — Aseguró Jin con cariño, acariciando la espalda de NamJoon cuando nuevamente se hizo hacia adelante, vomitando algo que ya ni siquiera tenía su estómago.

TaeHyung y JungKook llegaron poco después de que NamJoon dejara de vomitar, traían dos cubetas en mano, con una recogieron todo el vómito del suelo y con la otra limpiaron el trapeador y se encargaron de dejar reluciente y fuera de mal olor la sala. Jin los dejó terminando de arreglar el lugar y lo que se había salpicado, y ayudó a NamJoon a caminar hacia el baño para que pudiera lavarse los dientes y luego volver a la cama.

Posiblemente algo le había caído mal así que no había de que preocuparse, una sopa de algas le ayudaría a pasar todo el malestar y un poco de medicamento, no había nada de qué preocuparse.

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