El embarazo de NamJoon || JinNam (En edición)

Asimilación

Su cabeza dolía, las luces eran molestas mientras intentaba abrir sus ojos por completo y había un zumbido molesto en sus oídos, aún estaba aturdido, los recuerdos comenzaron a llegar poco a poco a su cabeza y su corazón se aceleró nuevamente. Madre... Iba a ser madre, eh, padre, lo que sea que aplicase en su caso. ¿Cómo mierda se digería algo como eso? No podía entenderlo bien, le estaba costando mucho aceptar que esta era su realidad, y si a él le costaba... ¿Qué estaría pensando SeokJin al respecto? ¿Él aceptaría algo como eso? ¿Lo abandonaría? ¿Le daría...asco?

Se incorporó en la camilla lentamente hasta que estuvo perfectamente sentado, mirando hacia la nada. Todo sería diferente, eso era lo único que podía asimilar. Miró a su alrededor, se dio cuenta que estaba solo, pero podía escuchar voces en un bajo tono hablando tras esa puerta, lo que sea que fuese a encontrar, para bien o para mal, debía encontrarse ahí. Se levantó despacio, fue un verdadero esfuerzo titánico no caer de nuevo al suelo, estaba aún aturdido, pero consideraba sus opciones realmente, incluso pese al miedo de abrir y descubrir que SeokJin se había ido, que lo despreciaba por ser una especie de fenómeno de la mala evolución, sintió ganas de llorar, dio una respiración profunda y se armó de valor, abrió la puerta de golpe.

SeokJin no estaba ahí, estaba vacío, se dio cuenta entonces que no estaba en el consultorio de la doctora, no sabía dónde estaba, pero estaba solo. Sus labios temblaron, las lágrimas que había tratado de retener se desbordaron por cuenta propia y no pudo evitar comenzar a hiperventilar, pegándose a la pared del hospital y deslizándose hacia el suelo en el pasillo desolado para poder abrazar sus rodillas y ocultar sus sollozos del mundo. Estaba solo, solo con un problema enorme con el que nadie más le ayudaría, nadie cuerdo se atrevería a enfrentarse a eso, lo que lo llevaba a dudar de su propia estabilidad. Se sumió en un mundo caótico de oscuridad y autodesprecio mientras lloraba en sus propias rodillas.

No se dio cuenta de la mano cálida que se posó en su cabello hasta que se fue deslizando, haciendo que su rostro se levantara para poder acariciar su mejilla empapada en lágrimas.

—¿Por qué está llorando aquí afuera, mi niño precioso? — SeokJin le cuestionó con una sonrisa tenue, pero llena de amor.

NamJoon lo miró un momento antes de asimilar que SeokJin estaba ahí, se había quedado con él, no lo abandonó. Lo abrazó con fuerza, obligando a SeokJin a agacharse a su altura.

—Joonie-ah, ¿qué pasa, mi amor? —SeokJin preguntó suavemente.

—Pensé que me habías abandonado. — Confesó NamJoon entre sollozos.

— ¿Por qué haría eso, amor mío? — Jin le cuestionó preocupado. Sus manos nunca dejaron de acariciar la espalda de NamJoon.

— Porque estoy embarazado, SeokJin-Hyung, incluso con todo y lo raro y anormal que es, significa que tendremos un hijo, tendremos que dar explicaciones, es probable que me saquen del grupo... ¿Estás listo para eso? Porque yo no lo estoy. — Respondió NamJoon separándose de SeokJin.

SeokJin suspiró. Sí, todo lo que vendría a raíz de este descubrimiento no pintaba para nada bien, ya sentía su estrés crecer desde el fondo de su cabeza, la prensa se los iba a comer vivos, Bang PD-Nim probablemente sí sacaría a NamJoon, y no se dejaba atrás, pero no eran sus mayores preocupaciones, tendría un hijo, NamJoon está embarazado y significa que tendrá cambios físicos que pueden poner en riesgo su vida, el estrés podría ser una de esas cosas. Además, no se consideraba apto y maduro para ser padre, pero era el mayor y debía ver por su novio, su precioso NamJoon quien siempre estaba acomplejado por su cuerpo, inseguridades que seguramente incrementarían con el embarazo, tenían que prepararse mentalmente para ser padres de tiempo completo, juntar su patrimonio e invertirlo en conseguir una verdadera casa, en las cosas que ese bebé iba a necesitar. En no dejar de ser un apoyo para Joon.