v; crónicas de amoríos, tercera y última parte.

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¿Acaso te gustan

las chicas buenas?


Es que ella es

de las que solo dejan

sus colillas machacadas

en la ventana.


De las que besan

las heridas

que alguien más hizo,

e igual

nunca sanan.


Del día que corrió de ti

hay un rastro de labial;

lo hizo al tú pedirle

su compañía

por una pequeña eternidad.


Del lobo malo

vive huyendo,

y tapa las heridas

con sus tacones rojos

y ese vestido negro,

pero no ve que en verdad lo carga

en el pulmón izquierdo.


Le duele su existencia

cada vez

que respira,

y en sus palabras

susurradas

solo hay ira.


Y un su desesperación

agarró una de las rosas

y se la clavó

en el costado.


Con la sangre que brotó

te escribió su primer sincero

te amo.


Hoy estás durmiendo en el mueble

sin almohada,

porque en tu cuarto

descansa un hada,

y ahora le preparas

el desayuno

para la cama.


No la encierres,

dulce Peter,

oh, mi Peter Pan,

es que Tinker solo quiere

dejar de ser su propio Garfio

y acompañarte a luchar.


Así que vas

y te recuestas

a su lado,

y le das

de regalo

un cuento de amor

y un café

para dos.

Como no querías flores.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora