Se acabáron las clases,nadie se imaginó que tan rápido pudieron pasar esas clases escolares,excepto _______,sufrió mucho,por segunda vez,en su colegio le aplicaban el típico bullying.Ya le había pasado anteriormente,pero la única salida que encontrába en esos momentos trágicos,erá cortarse las manos.
Aprendió que eso estaba muy mal,ya que hacia daño a su cuerpo,a si misma,y de nada le servia.Esta vez,ella ya estaba mas guardada a volver hacer eso,ya que lo que entendió,lo aprendió de por vida.Dirigió un camino hasta su auto y vió como Carlos y una chica peliroja se empezaban a besar.Eso había sido muy fuerte para la chica de ojos grises,ya que aún sentía algo por aquel chico.______ se fue acercándo un poco más a la escena,ya que su auto estaba cerca de ellos.
La chica se quedó viendo con un sentimiento a carlos,se le resbaló una lágrima por su suave mejilla.
-Eres muy lindo Carlitos,acépto que besas muy bien,ehh!-.Dijó la peliroja mientras se besaba apasionadamente y miraba a Carlos con lujuria.
-Entonces...Hoy nos vemos en mi casa,no?-.Respodió Carlos a aquella peliroja.
La chica abrió la puerta de su auto,haciendo que Carlos y la chica peliroja volteáran a ver.
-Hola ____!-.dijo Carlos con una mirada que ______ no soportaba ya que era mirada de un nuevo plan...
-Quien es esa amor? Ahh,a de ser la estúpida esa a la que Caroline tiró,jajaja,me fascino eso-.dijo la peliroja en tonó de burla hacia la chica de ojos grises.
-No soy ninguna estúpida,al contrario,eres tú,eres una zorra! Y Carlos,nunca dude que hicieras esto,encerio-.Subió a su auto y lo encendió.Carlos soltó a la peliroja de un golpe y se dirijió hacía la puerta del auto de ________.Abrió y jaló a la chica de ojos grises.La llevó hacia la peliroja llamada Sussy.
-Sussy,dile que lo sientes!-.Dijo Carlos agarrándo a _______ fuertemente del brazo dejando rojo.
-Jajaja,yo? Pedir perdón? Jajaja lo siento,pero no nací para eso.
-Suéltame Carlos! Sueltame-. Esta empezó a agitar su brazo para así lograr escapar de Carlos.
-No,no te soltaré,eres una estúpida Sussy!
-Mi carlitos,me llamas estúpida aún así cuando me invitaste a tu casa y pudimos entrar a tu habitación,y...Ya sabes lo demás,cierto? Algo que esta chiquita zorra no debería saber!!!
-Qué? Carlos,tienes algo que decir?
-Vete Sussy,LARGATE!.-Exclamó Carlos con enojo.-Vamos,sube al auto,yo manéjo-. Carlos queria llevar a ________ a su departamento.
La chica se subió con desánimo.Carlos no arrancó el auto,se le quedaba viendo a aquella chica de ojos grises.
-Ya! Dale!-.Dijó la chica con tremenda desesperación.
-Vale,ya voy!-.
-Cómo pudiste hacer eso?Cómo?-.Preguntó la chica con lágrimas en sus ojos grises.
Carlos se detúvo y volteó a ver a la chica,le acarició su mejilla roja y húmeda.
-(Susurró) Ya llegarémos,ehh!-.
Llegarón al apartamento de Carlos y la chica entró rápidamente pero Carlos logró atraparla.
-Qué quieres? Para que me quieres aquí,?
-Dejame entrar,porfavor,es mi apartamento!
-Okey,entra,rápido.
Carlos se sentó en el sofa y vió como la chica daba mil vueltas alrededor de la sala.
-Qué sucede?-.
-Na..nada-.La chica se sentó a un lado de Carlos y prendió el televisor,está volteo a ver a Carlos y rió.
Narra ________~°
Carlos se paró y me acomode mejor,quedando un gran espacio en el sofá.—Sal de encima, Carlos —le grité. Se lanzó sobre mí cuando no le presté atención. Ya no podía seguir viendo televisión tranquila—. ¡Que salgas!
No me dijo nada. Y tampoco se levantó.
Me estaba aplastando el muy idiota y no hacía nada más que mirarme con calma. Al final le di con mi rodilla en la entrepierna y ahí si que me dejó en paz. Cayó al suelo con un golpe seco, se puso a gritarme mil incoherencias, que era una desgraciada y la peor amiga del mundo, todo eso cubriendo a su “Amigo Carlos” con las manos.
—Eso te pasa por no dejarme ver televisión. Si querías sentarte, había mucho espacio en el sofá.
—¿Era necesario golpear mi orgullo? —me preguntó en un hilo de voz. Comencé a reír desenfrenadamente, cada vez que Carlos ponía esa voz era inevitable no aguantar la risa, y eso se daba sólo en dos ocasiones: Cuando lo golpeaba en la entrepierna y cuando se acostaba con una chica y se ponía a gritar como si la vida le fuera en ello.
—¿Era necesario que te sentarás sobre mí? —me fulminó con la mirada desde el suelo y bufó. Volví a reírme en su cara, tenía las mejillas sonrojadas por el dolor. No me reprimí al golpearle, le di con todo.
