Hacia la luz (Historia Corta)

Capitulo 3.

Ya vamos con otro mes más y Lali por lo menos sale un poco, pero sigue deprimida. Sus padres le quieren pagar un viaje para que se distraiga, pero ella se negó.

Al saber que puedo mover cosas, estuve practicando, hasta que conseguí controlarlo.

Estuve intentado dar señales, pero es muy difícil, pero aunque sea con cosas pequeñas pude lograrlo. Cuando fue de compras; le he mandé un folleto con el viento diciendo:

Sigue adelante y déjalo ir.

Pero ella lo hizo una bola y lo tiró. después le mandé otra señal que le puse fue en una de sus pinturas que tiré en unos de los cuadros con mi rostro. Como queriendo decirle ya no sigas pintándome, pero igual lo ignoro. Me es difícil darle señales me debilito cada vez que las uso, pero no me puedo rendí, debo hacer que ella entre en razón.

Me siento en la cama y la veo que se está cambiando ya que es la boda de su hermana, Candela. Sí la peque Cande, bueno, no tan peque. Se va a casar por fin con vico. Ellos peleaban y volvían a cada rato, pero por fin están por casarse.

Se termina de arreglar y se ve en el espejos haciendo una mueca.

— Bueno mi hermana se casará y será feliz. Lo que yo no voy a poder ser.

Me enoja escucharla decir eso. Ella puede ser feliz, pero no me deja ir. Lali puede llegar a otro hombre que le de lo que yo no pude darle. Ella es hermosa y tendrá muchos pretendientes, bueno eso me pone celoso, pero que le voy hacer. Yo estoy muerto  y ella está viva. Ella si puede ser feliz.

Toma el pequeño bolso y sale. Cómo siempre; la sigo y por lo menos vuelve a conducir. Creo que mi accidente lo cual le tiene miedo conducir.

Llegamos a la iglesia y todo la saludan y le dan condolencia por mi muerte. Lali sonríe tristemente. ¡Rayos! No debieron haberle recordado, ya pasó mucho tiempo.

Entra a la iglesia va junto a su hermana y le da un beso y le desea lo mejor, pero notó la tristeza en ella. Lali deseaba casarse y por mi muerte no puedo hacerlo.

La ceremonia fue linda, pero los ojitos de Lali están apagados. Aunque sonríe, pero es una sonrisa falsa. La ceremonia termina y vamos a la recepción en donde es la fiesta. Lali no deja de tomar y está apartada de todos los invitados. Hubo unos cuantos hombres que le pidieron bailar, pero ella se negó.

Miro a un mesero y como en algunas películas vi como un fantasma entra en el cuerpo de una persona, y tal vez yo pueda hacerlo.

Bueno solo espero que lo pueda hacer. Me acerco al mesero, intento meterme a su cuerpo, pero nada. Lo intento varias veces y resoplo frustrado al no poder lograrlo. Tomo un profundo respiro y lo vuelvo hacer; está vez, funciona y logro entrar a su cuerpo. Se siente extraño, es como que la otra persona se resiste a mí. Miro a mi amor y sonrió, no puedo evitar verla con todo el amor que le tengo. Me acerco a ella y sin verme me dice:

— No quiero mas copa, gracias.

Bueno aquí voy.

— Señorita sus ojos se ve una gran tristeza. Debería dejar de sufrir, siga con su vida y déjalo ir. Usted tiene una vida por delante, a él le gustaría que volviera hacer la misma de antes.

Ella me mira furiosa se levanta de golpe.

— Usted no es quien para decirme eso. Lo mandaron mi familia ¿verdad? No necesito que nadie me diga lo que es bueno para mí. ¡Déjenme en paz!

Comienza a caminar hacia la salida y no puedo seguir en este cuerpo y salgo. uff, vaya que cansa. Él se ve confundido y se toca la frente.

— Lo siento amigo.

Digo aunque sé que ni me oye. Busco a Lali y ella sube al carro furiosa. Me apresuró y subo. Ella comienza a conducir y su frente está fruncida.

— Estoy harta. ¿No pueden dejarme en paz? Nadie entiende lo que es sufrir cuando pierdes a alguien que amas. Nunca me dejaran en paz..... Quiero que me dejen tranquila, si quiero sufrir por la muerte de Peter, sufriré, nadie tiene porque meterse.

Siento su dolor y  toco su mano. Ella cierra los ojos y sus lágrimas empiezan a caer.

— Quiero quitarte ese dolor cariño mío.

— Ya no puedo más..... No puedo seguir así....