¿Me quieres?

Diario 11

Me levante demasiado aturdida para ser normal me dirigí al baño ya que sentía que mi estomago daba vueltas sin parar. Al llegar a la tasa sanitaria evacue todo sin saber porque me sentía asi. Me iba a arreglar para ir al instituto pero me sentía terriblemente fatal asi que decidí no ir. 

Eran las 12 del medio día y mi celular no dejaba de sonar pero no tenia idea de donde lo había dejado y el dolor de cabeza me aturdía sin dejarme levantar de la cama, escuche el timbre sonar y decidí bajar las escaleras asi fuera por inercia. no llegue ni al segundo escalón cuando de repente me sentí mareada y se volvió todo borroso.

Cuando desperté vi un Aaron muy preocupado, creí que mi cabeza iba a estallar.

-¿Q...uee...pa..s...o...??- sentía mi boca reseca y no podía ni siquiera hablar.

-Creo que te desmayaste, ¿te sientes bien?

-Es...ooo creo, y.. oye... ha..ce...¿Cuantoo es..taass aqui??

-No hace mucho, ven levántate.

No me había dado cuenta que estaba acostada en el sofá, solo sentí como sus suaves pero a la vez fuertes manos me cargaban. No me di cuenta donde estaba hasta que vi la nevera entonces supe que me había llevado a la cocina, me sentó en una silla que había cerca del comedor.

-¿Ya comiste algo?- pregunto con tono preocupado

-No...mm.. en realidad..acabo de despertarme...- dije penosa mente

-Mm ¿es decir que haz dormido desde anoche hasta ahora las 7 de la noche?

-¿¿¿Son las 7???- dije sobresaltada.

-Si

-Oh! no, cuando vi el reloj eran las 12 del medio día.

-¿Quedaste inconsciente 7 horas? oh! no...no otra vez- dijo con tono triste

-¿Que?¿Como asi que otra vez?¿A que te refieres?

-¿Quieres comer?- dijo tensando el mentón.

-No, quiero que me expliques porque dijiste eso-Mi tono era suave pero con mucha autoridad y valentía no sabia de donde había sacado el valor para decirlo.

-Te lo diré pero cuando comas algo-dijo seriamente

-Esta bien-dije sin mas

vi como sacaba cosas de la nevera y los puso en la tabla de picar saco un paquete de espaguetis y una olla bastante grande.

-¿Invitaste a alguien a cenar?.dije asombrada

-No, pero se que amas las pastas asi que te haré las suficientes para que quedes llena.

-¿Como sabes que me gustan los espaguetis??

-Siempre lo he sabido

-¿Pero como?

-Eres predecible- dijo sin mirarme a los ojos pero con una sonrisa picara.

-No soy predecible créeme.

-Si tu lo dices. Alice- dijo enfatizando el Alice, vi como sus ojos se aguaron y su labio temblaba.

-¿Ocurre algo?

-No,no,no nada.

-Ok.

No me había dado cuenta que los espaguetis ya habían estado, vi como sacaba en un plato la delicia que había preparado.

-¿No vas a comer?

-Si me das...Si

-Ok

Comimos, reímos y por un momento olvide que me sentía mal, me miro fijamente a los ojos y puso su mano en mi mentón.

-Eres lo mas lindo que algún día vi,Pequeña.

Sus palabras fueron como un golpe en mi corazón. De repente su contacto con mi piel fue tan extrañamente conocido que hasta pensé que el era el chico de mis sueños.

Una gran locura....  imposible.

Anónimo:

Ni tanto pequeña Alice.