Sueño o Realidad

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Algo me despertó, un fuerte golpe en algo sólido, era la puerta principal. No quería levantarme, pero no dejaban de golpear la puerta, me empece a levantar quitándome de encima las cobijas que envolvían mi cuerpo, levantándome con pereza y poniéndome unos tenis que cogí la mano.

Empecé a bajar las escaleras una por una, tal lentitud, pero los golpes hacía la puerta eran más constantes y mucho más duros, de la desesperación solo conteste con un "Ya vengo!", dejaron de golpear la puerta de repente, se escuchaban pasos de desesperación al otro lado de la puerta, suspire y mencione en mi mente "Dios!, quien tocara a estas horas de la mañana?", eran apenas cuarto para las 7 (6:45 am); llegue a la puerta, tallandome el ojo con una mano y con la otra gire el picaporte y abrí la puerta... nada ni nadie se encontraba ahí, salí un poco para verificar si se encontraba tan solo un alma cerca del lugar, -"Tal vez una broma de los engendros inmaduros", mi mente hablo sola-mi sugestión fue errónea; regresando a la entrad de la casa dando mi espalda para entrar en ella un golpe en mi cabeza fue lo último que sentí al momento,...todo oscureció.

No se cuanto tiempo pasó mientras me encontraba inconsciente; empece a tantear el suelo, pues me encontraba tirada en el, y me di cuenta que este no era el suelo de mi casa, era algo suave al contacto y liso..."pasto", susurre, comencé a abrir los ojos, una luz cegadora me deslumbraba, era el sol con sus rayos translúcidos atravesando los árboles. Me cubrí los ojos con mi antebrazo para que no me molestara el sol, me comencé a sentarme, con la vista borrosa intente observar a mi alrededor, era una especie de campo o más bien un estilo de bosque. Sentí frío, un viento me dio escalo-fríos, pues solo tenía puesta mi pijama, consistía en una ligera blusa de seda rosa y unos pantalones delgados color gris, junto con los tenis que me puse esta mañana... espera, esta mañana?, que hora es? más bien, iniciando mejor ¿donde estoy?.

Me levante completamente y mire con más atención mis alrededores, caminé atravez de los árboles buscando una salida, pero no había nada o nadie que pudiera ayudarme a salir de este lugar tan desconocido, pero por alguna razón siento que he estado aquí, pero no se porque o cunado estuve aquí, entonces escuche unas ramas romperse, voltee bruscamente, "¿Hola?, ¿hay alguien?", no obtuve respuesta.

Camine, solo seguí de frente, no di vuelta a ninguna parte, solo de frente, siguiendo el camino de arboles de cerezo que estaban ahí, debo admitir que es un lugar muy hermoso, es tranquilo y acogedor, pero aún así no tenía ni idea de donde me encontraba, solo seguí y seguí caminando, pero comencé a cansarme, mis pies empezaron a dolerme, y eso que eran tenis, pero no eran los más cómodos que digamos, ya no me quedaban del todo, me apretaban los talones y mi dedo pequeño del pie estaba todo enroscado, dure 10 minutos más caminando, las piernas me temblaban del cansancio y el dolor por el frío que recibía de la brisa, decidí descansar y sentarme bajo un árbol enorme, visualice que ya tenía sus frutos, unas cerezas enormes de color rojo oscuro , se me hizo agua la boca, pero estaba bastante algo como para que los alcanzara, pero aún así ni saltando con todo no lograba agarrar ni una; coloque mi cabeza en mis rodillas, mi frente más bien, empecé a estirar mis piernas y masajearme los pies (obvio me quite mi tenis para poder hacerlo), me puse de nuevo mi calzado, para cuando termine de atarme los zapatos, el paisaje cambio de repente, es decir de un bosque de árboles de cerezo, solo árboles, se apareció una pequeña cabaña, mi mente dijo " eso no estaba ahí antes..¿o si?, como es que...?"no termine la frase en mi mente, pues volví a escuchar unas ramas romperse, gire mi cabeza, esta vez con cuidado pero rápido para ver si alguien se encontraba cerca, gire a la derecha, solo era una pequeña ardilla que salto de un árbol para agarrar una bellota que se encontraba en el suelo, me tranquilice, no se entiendo porque me alteré.

Decidí seguir el camino, me levante, la pequeña cabaña que estaba ahí con unos arboles de verdes hojas con flores de durazno, eran arboles de durazno (valgame la redundancia), me acerque para ver si había alguien ahí, pero la puerta se encontraba cerrada, unos pasos se escucharon a mis espaldas, gire levemente mi cabeza hacia la izquierda, nada, otra vez, gire de nuevo a dirección a la cabaña, pero ahora, la puerta estaba abierta, no entiendo cómo o porque estaba así.

"No deberías estar aquí", un susurro fue dirigido a mi, tan cerca de mi oído me sobresalte, di u respingo del susto, comenzaba a espantarme, voltee por todos lados "Quien esta ahí? Holaaa?" mi respiración comenzó a ser agitada, regrese mi vista hacia la morada (casa) , pero que caraj-?, esto no puede estar pasando, alguien ya estaba en la entrada de la puerta, de espaldas, debo admitir que me asuste al momento, pero sentí alivio, POR FIN! ALGUIEN EN PERSONA!!; era un hombre, tenía una camisa gris que ceñía su espalda ancha, también tenía unos pantalones mezclilla obscuro, no notaba sus zapatos pero su cabello era de color caoba, me quede petrificada, a pesar que estaba agradecida porque había una persona a tan solo unos cuantos metros lejos de mi enfrente mío, no tenía ni idea que hacer o decir o preguntar, pero aún así me asuste que haya aparecido de repente en la entrada mientras que antes no había nadie ahí. Éste comenzó a voltearse lentamente (según yo), apenas giro su cabeza unos centímetros y me empezó a dar u fuerte dolor en mi pecho me toque y quise quitarme ese dolor, no se como pero lo quería quitar de encima, era espantoso, no lo soportaba, escuchaba como gritaba, mis gritos eran de agonía, sufrimiento, apreté fuerte con mu puño el lugar del dolor, pero este no cesaba, de hecho aumentaba más, cada vez se intensificaba, era como un ardor combinado con piquetes de aguja, o más bien apuñaladas de cuchillas, empecé a caer, aterrice en mis rodillas y baje mi cabeza, no sabía si amortiguaría tan solo un poco mi dolor, me puse en posición fetal, el sol me daba justo en los ojos medio abiertos, no podía abrirlos bien, el punzante dolor no me lo permitía, gemía por eso, trate de hincarme y logre torpemente, alzé mi cabeza ligeramente y divisé que él se estaba acercando, no me fije en su rostro, de hecho todo su rostro estaba oscuro por la sombra que hacía su cabello, pero su sonrisa si que se notaba, era hermosa, sentía como mi cara estaba contraída por el dolor, tenía el ceño fruncido por ello, pero todo comenzó a nublarse, era mi vista que me fallaba, lo último que vi fue que el se agachó me acarició la sien, caí en el suelo un poco consiente y me beso la cabeza y siguió acariciándome, solo escuche un "lo siento, pero tranquila, todo saldrá bien".

Al instante abrí mis ojos de golpe pues un sonido fuerte y aturdidor hizo que despertara, era la alarma de mi despertador, ya eran las 8:30 am..."entonces, todo eso ¿era solo un sueño?, pero que clase de sueño es ese?", unos golpes sonaron en la puerta principal, gruñí y me estire en mi cama, pero los golpes seguían y seguían, no tuve opción que ir, salí de mi acogedora cama, baje rápido las escaleras, descalza esta vez, no dejaban de golpear la puerta, estaban impacientes al parecer; cuando mi mano se puso en la chapa de la puerta, me acorde del sueño, justo así estaban golpeando, ahora estaba pensando si debía de abrir o no.

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