Cuidando de ti

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Era una exhausta mañana de oficina en el agitado Japón , la empresa Ackerman's Illustrators Inc. No podía estar aún más arriba del éxito en estos momentos , el dueño y jefe de aquella compañía era serio y evidentemente frio , un hombre que tenía por virtud el orden y manejo de las cosas a la perfección y sobre todo altas expectativas sobre el éxito. Sabía que para llegar a donde estaba la disciplina y la determinación en lo que hacía era la clave principal.

Levi Ackerman era hijo único de una famosa diseñadora francesa , una muy buena parte de su éxito se lo debía a ella , aquella mujer era sumamente inteligente , hábil para las finanzas , creativa y espontánea , sus innumerables colecciones de ropa y accesorios de alta calidad lo demostraban , ella era la reina de la industria de la moda , su presencia se hacía notar todo el tiempo , ella era Kushel Ackerman , una mujer de carácter fuerte y un terrón de azúcar a la vez.

Aquella mañana , una  dulce y amable recepcionista de la empresa contestaba innumerables llamadas y atendía a las personas que llegaban por cualquier asunto o por alguna cita agendada con el jefe.

El teléfono que no paraba de sonar , recibió una llamada de la línea roja , aquella que pertenecía a la secretaria personal de su jefe. Contesto mientras terminaba de recibir a unos clientes importantes , pero la voz chillona de aquella secretaria la tenía evidentemente frustrada.

-El jefe pidió ese té , hace más de quince minutos , sube de inmediato con él. Su compañera de trabajo le parecía tan molesta , pero su auténtica amabilidad la hizo responder amablemente , además la bebida era para su jefe y no había nada que ella no hiciese por el... por el que también era su prometido.

Así es , aquella señorita de baja estatura y cuerpo delicado era la prometida del magnate dueño de la empresa en la que era simplemente una recepcionista , la decisión de tener siempre ese cargo era porque no quería que la llamasen una arribista , Petra Ral , ese era su nombre , sencilla y risueña , con unos ojos color ámbar que enamorarían a cualquiera y en este caso... enamoraron a su jefe , no es que eso hubiese pasado repentinamente , ellos se conocieron en la universidad y fueron buenos amigos hasta que un día ,  el serio y amargado hombre le declaro lo que sentía a la oji ámbar y esta le correspondió de igual manera , ya tenía años enamorada de él y aquello fue lo que más había soñado desde que lo conoció.

-Tranquila Hitch , solo me tardare dos minutos en estar ahí. Petra aprovecho que no había nadie en la recepción y preparo aquella bebida que tanto le gustaba a su novio ,  té negro únicamente con un cubo de azúcar , sencillo , pero demasiado importante para Levi.

La chica subió por el ascensor al último piso de la empresa , y al estar frente a la oficina de Levi se preguntó dónde estaba la odiosa secretaria de este y pensó que tal vez  aprovecho que ella llegaba para ir al baño un momento , Petra tomo la charola con una mano y con la otra el picaporte de la puerta , entro lentamente pero ya tenía una sonrisa lista para dedicársele a su prometido , aquella sonrisa que se borró por completo cuando lo vio en una posición demasiado comprometedora con aquella odiosa secretaria a la que no soportaba y que por supuesto estaba enterada del compromiso de ambos. Hitch estaba sobre el escritorio de Levi con sus piernas enredadas en la cintura de aquel hombre de cabello negro , era obvio que se estaban besando , no , se estaban comiendo salvajemente mientras ella jadeaba como estúpida en los labios de su prometido. Apenas se dieron cuenta de su presencia se separaron por completo , Petra quedo en estado de shock al ver a su adorado Levi siendo infiel con aquella zorra de oficina , salió del trance al escuchar su voz y tomo la taza de té para  tirársela a ambos importándole poco que se quemaran o si les provocaba algún daño , así como era de dulce y tierna , también era una fierecilla que si se encontraba herida desataba el infierno con quien fuese.

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