Continuación de ♦Anhelo Carmesí♦
♦Basado en el Brute End de Ayato en Dark Fate♦
«-Si realmente lo deseas, puedo ofrecerte un trato. Entrégate a mí una noche, gime mi nombre en su lugar, y a cambio obtendrás a Ayato.»
Desear lo imposible se había...
Sumary:~Si realmente lo deseas, puedo ofrecerte un trato. Entrégate a mí una noche, gime mi nombre en su lugar, y a cambio obtendrás a Ayato~
Advertencias: Contenido adulto/Lemon/Posible OoC/Rated M.
Pareja: CarlaYui/AyatoYui
Cantidad de palabras: 602/Cortesía de Magic Word en complot con Microsoft para hacernos creer que de verdad hay esa cantidad de palabras en el capítulo.
Disclaimer: Yui no me pertenece... ¿O sí? 7w7 Ok, no. Es de Rejet -.-U
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Besos con sabor amargo
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«Es un beso de tantos...»
Pensó ella, mientras los gruesos labios de aquél hombre descendían por su cuello blanco.
«Es un beso más, como otros tantos...»
Exclamó su mente, mientras aquellas enormes manos tomaron sus pechos por asalto, provocando un ligero gemido, y la fugaz sonrisa de su enemigo.
«Es un beso más, de aquellos falsos...»
Y entonces se dejó llevar al sentir su lengua traviesa recorrer el camino entre sus senos, adorando la mirada prepotente y cariñosa en los ojos de su falso Ayato.
Dejó que la desnudara sin problemas, que la tela satín de su vestido favorito de verano cayera al suelo, rozando su piel y provocándole el placer de sentir el viento frío contra su cuerpo caliente. Carla la recorría ansioso, con la destreza de la experiencia luego de tantos años, y sin desearlo aquél amor no consumado atravesaba sus sentidos y la tentaba a pecar.
No recordaba cuántas veces antes ya había dicho que jamás volvería a ocurrir, que no caería ante un falso amor y traicionaría nuevamente a su amado, pero cada vez que esa ilusión abría la puerta de su cuarto y bebía de sus labios con hambre, gimiendo desesperado, era imposible que las lágrimas no acudieran a sus ojos y le devolviera el beso con la misma exasperación.
A veces, mientras gemía otro nombre y lograba mirar su rostro herido se preguntaba si era suficiente de su propia crueldad. Otras veces, recordaba los ojos piadosos de Ayato pidiendo perdón por marcharse de su lado y dejarla en las garras de ese ser inmortal.
Estaba dividida entre la razón y el perdón, entre sus manos helados recorriendo lugares prohibidos y el pasado de ellas, enterrando la daga en el pecho de su amor.
Desnuda a la luz de la Luna, podía admitir solo para sí misma que a veces quería corresponderlo, pero el odio y el rencor que aún albergaban su corazón se lo impedía todavía.
Jadeó en un murmullo demasiado alto cuando aquella lengua llegó a los pequeños botones rosados, girando en círculos, rotando lentamente sobre su pezón estimulado. Presionando, mordiendo y pellizcando cada tanto, recibió a ambos en su boca con el mismo generoso trato provocando que se humedeciera.
El placer le nublaba la mente y la obligaba a cerrar los ojos, imaginando que ese hombre no era quién estaba tocándola con tanto esmero y pasión, que su lengua traviesa descendiendo por su vientre plano no causaba cosquilleos extraños.
Quería sentir que no era Carla quién arremetía con sus labios amorosos succionando sin piedad el centro de su excitación, adentrando sus manos callosas sin remordimientos en su centro, pero cada vez era un trabajo peor.
«Es un beso... un último beso... Incluso mucho más que un simple beso...»
Protestó mentalmente, mientras se perdía en el placer del orgasmo provocado por un amor falso, quién abatía insistentemente sus dedos humedecidos con su traición y pecado, incluso después de alcanzar la cúspide de su hipocresía.
«Ayato-kun, estoy rota, sucia y podrida... Que sea la última vez, cada vez, que finjo estar a tu lado...»
No supo cuando fue que él se retiraba sus ropas y la tomaba de nuevo, que la obligaba a gritar sin ningún nombre en mente, confusa por sus arrebatos. No era la primera vez que el hacía el amor y seguramente no sería la última, más sin embargo, en sus ojos dorados fundidos entra la tristeza y la liberación podía notar que había algo extraño, quizás un plan arriesgado del que temía sin razón.
—¿Qué harías por Ayato?
Preguntó.
Quizás si ella no hubiera respondido, las cosas no hubiera llegado a tanto...
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OoOoO
Notas de Kou: Ya sé que quieren un poco más de rapidez en Carla, pero vamos por pasos (?) Por lo pronto aquí esta un lime ligero para identificar un poco como se siente Yui al respecto. Tenía ganas de actualizar muchas historias ya que el 18 es mi cumpleaños y este es mi auto regalo, pero el tiempo me juega en contra xD Probablemente ande actualizando entre semana o el próximo fin.
En serio que no esperaba el enorme apoyo que me han demsotrado, las amo, son las mejores <3 <3 Las quiero mucho y gracias por leer :D