Era la mañana de un frió y triste domingo, me levante de mi cama, y encontré un regalo, abrí ese regalo y lo que se encontraba dentro era este libro y una carta de Danielle, mi hermana, decía: -"Andrew, se que estas sufriendo y que tu sufrimiento es muy duro, te he comprado este diario para que te desahogues escribiendo aquí y no cortando tus brazos..., en el momento que leí esto, quedé estupefacto, ya qué nadie sabía nada de mis cortes y por lo que estaba pasando.
Después de arreglarme salí de mi habitación en busca de mi hermana, llegué a su habitación y no la encontré, busqué por toda la casa, pero Danielle no estaba aquí, tenía ganas de hablar con ella de sobre como se enteró de mi depresión y los cortes de mi muñeca.
Mis padres casi nunca se encontraban en casa y la mayor parte del tiempo la pasaba solo, entonces regresé al comedor y busque algo de comer, regresé de vuelta a mi habitación y vi que todo estaba muy calmado, volví a dormir pero tenía mucha curiosidad por saber la razón de como Danielle se entero de mis secretos.