La misma tarde de ese domingo desperté y vi a Danielle a mi lado me levante apresuradamente y le dije:
-Danielle, ¿Cómo supiste de mis cortes y mi depresión?
Ella permaneció en silencio, sin decir ni una palabra, espere un lapso corto de tiempo y volví a formularle la pregunta:
-Danielle por favor responde, ¡¿Cómo te enteraste de mis cortes?!
Danielle volvió su mirada hacía a mi y me respondió:
-Andrew, soy tu hermana y te conozco suficientemente bien para saber que te cortas, he escuchado todos los llantos que emites todas las noches, he visto tus sacos llenos de sangre y la navaja que tienes guardada en tu maleta, por ese motivo quiero que empieces a escribir en el diario que te di y te desahogues allí no quiero ver que te desangres nunca más.
En ese momento Danielle salió de mi habitación y yo solo estaba impactado por lo que me dijo, mi madre lavaba mi ropa y jamás se había dado cuenta de la sangre que traían, entonces como Danielle cayo en cuenta de eso, tenía muchas cosas por preguntarle pero deje eso aparte, al menos ya sabía como Danielle se había enterado de todo.
Entonces decidí que empezaría a escribir en ese diario, y volví a mi cama a continuar durmiendo.