nueve

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—¿Estás completamente segura de lo que estás diciendo?

—No.—Eso estuvo cerca. No quería dejarla ir. No tan deprisa.

—Entonces creo que es hora de definir cual será nuestro futuro.

Sé que esto será difícil pero no hay otra manera. Hayden me habló acerca de sus preocupaciones y de las cosas que charló con Alex mientras yo no estaba. Al escucharla pude darme cuenta de cuanto quería reventarle la boca a ese sujeto.

De alguna manera tuve el valor de confesarle lo que sentía y solo de esa manera logramos llegar a un acuerdo. Los planes de boda seguían al pie de la letra y en cuanto a Dylan, dejaríamos que pasara una semana en donde su padre. Fijamos una fecha, la cual no estaba tan cerca pero tampoco podríamos darnos el lujo de dejar las cosas para después.

Al día siguiente finamente decidí hacerme cargo de mi hogar y en cuanto ese chico despertó hablé con él con toda la seriedad posible.

—Es hora de que te vayas de aquí.

—¿Porque?.—Preguntó con una sonrisa descarada. 

—Porque estoy ya no es sano para nadie. ¿No te has puesto a pensar en el daño que le estás haciendo a tu hijo y a Hayden?

—¿Quieres que esto pare? Te tengo una solución, aléjate de ella.

—No, tú aléjate de ella. ¿Porque la quieres? ¿Solo para tenerla y después volverla a dejar? 

—Eso no te importa. Ahora sabes que hacer, y me iré pero haré todo lo posible por que las cosas no se queden a tu favor.

Me empujó con el hombro y comenzó a tomar sus cosas, no tengo idea de que pasará pero al menos logré echarlo de mi hogar. Justo como debí hacerlo hace tiempo. Como era de esperarse, Dylan se puso furioso conmigo y no tardó en volver a dejar muy en claro que quería irse de este lugar.

Lo dejamos a pesar de que a Hayden le costaba dejarle ir y entonces las cosas entre nosotros se tensaron un poco. La actitud de Hayden no era la mejor, cuando volvía del trabajo ya no conversábamos como antes y las discusiones se hicieron presentes, no eran la gran cosa porque los temas a discutir eran insignificantes pero nunca habíamos discutido tanto como ahora.

—¿Que nos sucede? Hayden, esto no puede seguir así. Estamos tirando por la borda tres años de relación en solo tres semanas.

—¿Y que debemos hacer?

—Dejar de discutir por todo y arreglar las cosas con tu hijo y ese sujeto porque sé que el pensar constantemente en ellos te está dañando. Estoy cansado de esto.

 —No tengo idea de como lo haremos. Dylan simplemente no te quiere y Alex solo complicó las cosas.

—¿Crees que sea correcto separarnos por un par de semanas?.—Ella negó casi al instante.

—Hablaremos con ellos. ¿Podría ser mañana?

—Cuando quieras.

Lo teníamos planeado, aprovecharíamos el fin de semana para reunirnos los cuatro y discutir todo aquello que nos molestaba. El lugar de reunión sería en un centro comercial, por la noche pude escuchar como Hayden se levantaba de la cama constantemente y se encerraba en el baño. Tal vez solo estaba nerviosa por como resultarían las cosas.

Al día siguiente,estando dentro del mismo centro comercial en el que nos reuniríamos, tratamos de matar el tiempo recorriendo el lugar con paciencia. Dylan y Alex llegaron una hora después y entonces, al ver como Hayden abrazaba con desesperación a su pequeño, mi mente comenzó a considerar una ruptura definitiva. Estar conmigo solo le evitaba estar con su hijo, no podía seguir haciéndole esto. Ella no lo merecía.

Conversamos un par de minutos antes de que Dylan me pidiese que le llevara por un helado. Por un momento me pareció extraño pero no le dí importancia, tal vez esta sería mi oportunidad de hacer las paces con el pequeño. 

El pequeño se notaba algo nervioso y miraba con muchísima ansiedad la dirección en la que sus padres se encontraban, le extendí su pequeño vaso con helado de chocolate y le dije que fuera a jugar un rato en la fuente. Éste lo hizo olvidando por completo lo que fuese que cuidara y entonces, cuando volví al lugar en donde estábamos me encontré con ese idiota tratando de besar a mi chica. Solo esto faltaba.

—¡Aléjate de ella!.—Le separé de Hayden y le tiré al suelo iniciando una pelea casi de inmediato. Ese chico solo sonreía con cinismo sin importarle que eso solo me motivara a aumentar la fuerza de mis golpes. 

—¡Basta!.—Pude notar la desesperación de Hayden en su tono de voz, y entonces fue cuando me dí cuenta de la gran masa de gente que se formó a nuestro alrededor.—Basta, Shawn.

—¿Porque sigues luchando por lo inevitable?.—Dijo aquel tipo.—¿Sabías que esta no ha sido la única vez en la que nos hemos besado?.—Tengo que acabar con esto. 

—Entonces quédatela. 

—Shawn.—Hayden quiso decir algo pero no le dejé, si ésta comenzaba a llorar todo se volvería difícil.

—Ya no puedo con esto, Hayden. Soporté esta situación tanto que ahora ya no sé que hacer. Me cansé de pelear. Lo siento, pero esto tiene que acabar aquí.—Varios guardias de seguridad llegaron con la intención de llevarnos a Alex y a mí, solo les dije que iba a retirarme y me dejaron ir. No me di la vuelta a pesar de escuchar el leve llanto de Hayden porque sé que eso solo empeoraría las cosas.

Diablos, esto dolía un montón.

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¿Porqueeee? 😢¿Creen que las cosas se queden de esa manera?¿Que creen que pasará?

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Daddy's Issues {Shawn Mendes Fan Fiction}*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora