Jade.
Harry es el mayor capullo qué he visto jamás. Del todo.
Maldito mujeriego de... argh. ¡LO ODIABA! Y algo me decía en mi interior qué él sabía que estaba allí.
¿No se cansaba de joderme ya?
Lo fulminé con la mirada cuándo pasó por mi lado. Iba masticando un "caniche sexy". A su lado, la chica que lo acompañaba reía.
Era rubia, y sus ojos eran claros. Su rasgos eran afinados; típica chica perfecta salida de película.
Yo no podía ni compararme con esa pedazo de chica.
¡Maldito imbécil!
No pude resistirme a seguirle con la mirada mientras seguía caminando. Se movía ligermante, cómo sí el aire lo llevase por sí sólo. Era mágico... y estúpido.
Harry.
-Annabelle, creo qué ya está ahí.
Ella sonrió, mientras dirigía sus ojos al lugar al que yo señalaba con la mano.
-Sí, esa es Marie. Gracias por acompañarme, Harry.-besó mi mejilla, y se fue corriendo hacia "Marie", qué la esperaba al otro lado de la calle.
Annabelle era una chica especial. Era mi amiga por sencillas razones; me entendía. Es lesbiana, y su "chica de juegos" cómo ella bromea sobre su nombre es Marie. Ya qué compartimos el gusto por las mujeres, ella puede aconsejarme desde el punto de vista de una, y a la vez ayudarme, y es gratificante. La conocí en un campamente de pequeño, pero recientemente nos reencontramos, hace unos meses, y terminamos siendo una especie de mejores amigos. Rara mezcla, sí.
Y, esta vez le pedí un favor; que viniese al centro comercial. Todo estaba claramente planeado por mi rara mentalidad. ¿Fallaría? Podía ser.
Pero había funcionado.
Jade Amelia Thirlwall nos había visto, y había notado en sus ojos una gran furia. Y también noté cómo nos seguía con la mirada.
En otras palabras, estaba celosa.
Y sí alguien está celoso, es porque lo quiere. ¿Qué significa?
¡Qué tengo que seguir intentándolo! Todo por ella.
Me estaba poniendo las cosas difíciles, pero, me gustan los retos. Y lo voy a conseguir, aunque sea por cabezonería. Así funciono yo, soy de mentalidad recta, aunque... a adecuarse.
Jade.
-¡Ha sido agotador!-dicho eso, Perrie se tiró de boca en el sofá, restregándo su cara en el cojín, y dejándo a mis pies todas sus bolsas, qué no eran pocas.
Reí ante su pose; con el trasero para arriba, y la cabeza metida hacia la barriga.
-Voy a soltar mis cosas.-le avisé. La dejé sola (Jesy y Leigh-Anne habían quedado con sus respectivos novios, y Perrie igual, sólo que ella más tarde) y me retiré hacia mi habitación.
Delicadamente abrí la puerta, para encontrarme una gran sorpresa.
Un oso gigantesco de peluche -ocupaba más qué yo misma, aunque eso sea difícil- estaba puesto en mi cama, con algo blanco en su regazo. No había nada más.
-¿¡Perrie, por qué pones uno de esos osos qué te gana tu novio en mi cama!?
Pocos segundos después, Perrie apareció en mi habitación, con una oreja aplastada y cara de sorpresa.
-Eso no es mío, definitivamente. Yo me acuerdo de mis osos.-asintió con convicción, cómo si saberse las caras de sus ositos fuese lo más importante para ella.
-¿Entonces quién puso esto aquí?-esto comenzaba a dar miedo, uh.
Perrie se acercó a la cama, y cogió la «cosa» blanca, qué resultaba ser un sobre.
-"Para Jade".-leyó, y acto seguido, me lo entregó.-Es tuyo, vamos. Leélo, no sé.
Abrí el sobre. Allí, con una letra escrita con elegancia, ponía;
«No te voy a dar por perdida, Jade. Sigo buscándote»
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Holiiiiiiiiiiii:BBB BUENOOOOOO.... este cap es algo corto, lo sé xd. Estoy muy contenta porque han subido los comentarios y vistos y NFCHWEF gracias de corazón, esta fue mi primera historia y es especial:333
¿Quién quiere que le dedique este capítulo o el próximoooooo? me apunto :PP
¿PODEIS HACERME UN FAVOOOOOOOOOOOOR? He subido una nueva fic, "Make Me Believe" y sí os pasáseis sería demasiado feliz:3
¡GRACIAS DE NUEVO, BESOOOOOOOOOOS!
